3. Buen libro, mejor arma

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      La psicópata ataviada con capa roja iba dando brincos por las calles encharcadas de Dublín mientras abrazaba el grueso libro entre sus brazos. Iba de camino al laboratorio de su creador deseando poder enseñarle su mortífera nueva arma.

      Cuando alcanzó la puerta del almacén, se quedó parada como un pasmarote. Nye, al oír una vocecita canturreando en el exterior, la asoció enseguida a Muerte Roja. Soltó un bufido y abrió la puerta de mala gana.

      —¿Acaso no sabes llamar? —cuestionó.

    —No, ¿Qué es eso? —soltó, con toda naturalidad.

      —Olvídalo. ¿A qué has venido? No veo que traigas un cuerpo.

      Roja entró al interior, sin dejar de sonreír pese a la hostilidad mostrada por su amo.

      —He venido por algo mucho mejor... ¡Tengo un arma!

      Acto seguido, alzó el libro con ambas manos como si de Simba se tratara. El científico enarcó algo parecido a una ceja.

      —¿Un libro de Harry Potter es tu... arma? ¿Me estás tomando el pelo?

      La criatura bajó su arma, sorprendida. Había esperado que Nye hubiese alabado su fuerza y poder.

      —Esto... No, en absoluto. ¿No le gusta? ¿Demasiado mortífera?

      El psicópata no se dignó a responder, simplemente hizo como si no la hubiera escuchado y se giró hacia una camilla en la que se encontraba un hombre atado de pies y manos.

      Muerte Roja se asomó y exclamó:

—¡Hola! Yo te conozco, ¿verdad? Parece que fue ayer cuando nos encontramos en un callejón. Espera... ¡Sí que fue ayer!

      El hombre soltó un chillido de terror, a la par que forzaba sus ataduras, sin éxito.

      —¿¡Qué hace ella aquí?! ¡Me dijo que me había ayudado a escapar de esa cosa y que iba a curarme la brecha que me hizo!

      Nye fingió una expresión de lástima.

      —Esto... Lo siento. Se me olvidó mencionarte que mentir es una de mis cualidades. Lo único que vas a hacer tú es ayudarme a mí con mi propósito estrella. Eres muy especial, vas a ser el primero en ser abierto en dos —tras los gritos del hombre, añadió—: anda, cállate.

      Acto seguido, cogió una jeringuilla llena de un líquido verdoso y se la inyectó en un lado del cuello. La víctima abrió los ojos como platos sin dejar de chillar en ningún momento. Cuando el científico vació el contenido, su experimento estaba sedado: listo para que buscara su alma humana.

      —Bueno, Muerte Naranja... —dijo Nye mientras tiraba la jeringa a una papelera.

      —¡Es Muerte Roja! —replicó ella.

      —Bueno, se parecen. En fin, el caso es que voy a estar ocupado un tiempo y necesito que desaparezcas de mi vista.

      Cuando vio que su creación se ponía a su espalda, añadió malhumorado:

      —Con "desaparecer de mi vista" no me refiero a que te quedes aquí donde no pueda verte, ¡Significa que te vayas de mi laboratorio! Busca más sujetos para mí.

      —Oh, vale. ¡Adiós!

      Se acercó a la puerta y la abrió, pero Nye volvió a hablar:

      —Por cierto, consigue un arma mejor.

      Ella asintió y salió al exterior, esta vez cerrando la puerta del almacén.

      Por suerte, había dejado de llover y estaba oscureciendo. Muerte decidió cambiar de aires y se dirigió a la zona de Temple Bar, situada en el centro de Dublín. Fue caminando despacio, sin prisa, ocultándose en las sombras. Finalmente, encontró a su presa: un joven de unos treinta años que se alejaba apresurado de la multitud. Además, la criatura advirtió que era un hechicero. Seguro que su amo le daba una gran habilidad por él.

      Lo siguió de cerca, teniendo cuidado de que no la viera, hasta que este entró en una calle oscura y sin gente. La psicópata sonrió con malicia, sabiendo que era suyo, y sacó su libro. Iba a darle el golpe de gracia cuando el joven se giró con una llama en sus dedos. La lanzó con intención de darle a la creación, aunque esta ya no estaba allí. Miró a su alrededor, alerta, temiendo no conocer el alcance de poder de su contrincante.

      —¿Qué demonios...? —cuestionó.

      Muerte dejó de correr y volvió a situarse delante del joven, que aún estaba buscando con la mirada (en lugares equivocados) a Roja.

      —¡Cucú! —gritó ella, llamando su atención.

      El hechicero pegó un bote y volvió a dirigir la vista a lo que tenía delante, que en este caso era una psicópata que quería dejarlo cao. Este se preparó para atacar, chascando los dedos para crear dos bolas de fuego. Muerte Roja ni se inmutó.

      —¿De verdad crees que con eso vas a conseguir siquiera rozarme? Las lanzas muy lento, se me hace aburrido. Creo que deberí...

      El joven no permitió que continuase y lanzó el fuego contra ella, esquivadas por esta dando un increíble salto. Furioso, lanzó bolas de fuego una detrás de otra combinadas con otros ataques elementales, que sólo lograron que se agotara.

      Entre ataque y ataque, Muerte lo golpeaba sin usar mucha fuerza, dejándole claro quién mandaba. Con un último esfuerzo, el hechicero le lanzó otra bola de fuego.

      Muerte desapareció de su vista, momento que aprovechó para marcar a toda prisa un número de teléfono. Cuando distinguió una voz al otro lado de la línea, murmuró:

      —Ayuda.

      Segundos después, un golpe seco en su nuca lo dejó inconsciente. Roja sonrió, satisfecha, y le dio un beso al libro en la cubierta. Desde luego, era un buen arma.

      —Mi creador tendrá que dejar que lo use, es muy efectivo.

      Cogió al hombre en volandas, usó su supervelocidad y se alejó de allí, quedando el móvil de la víctima olvidado en el suelo.

      Minutos después, varias personas corrían hacia el lugar de los hechos. Uno de ellos se agachó y recogió el móvil, maldiciendo entre dientes.

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¡Hola de nuevo! Aquí os traigo el tercer capítulo. ¡Espero que os guste! Admito que este es uno de los capítulos más aburridos e introductorios, pero era necesario. En el próximo capítulo Skulduggery y Valquiria harán su gran aparición. Además, no creo que tarde mucho en subirlo.

ALERTA SPAM: no suelo hacer esto, pero es que creo que os puede interesar. En la aplicación Amino AngelVinnero y yo hemos creado una comunidad en español de la saga de Skulduggery Pleasant. Todo el mundo puede entrar, y estoy segura de que os encantará. Mi usuario es Valquiria Caín y el de Ángel, Skulduggery Pleasant.

¡Eso es todo, hasta la próxima!

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⏰ Last updated: Nov 03, 2016 ⏰

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Detective Esqueleto: Muerte RojaWhere stories live. Discover now