Mientras Duermes; JB

Capítulo 9

-¿Matar a Chris?- repeti, para luego sonreir- No es mala idea- mentí.

Justin sonrió conmigo.

Realmente no quiero matarlo. Es obvio. Pero al hacer creer que si quiero hacerlo, pensará que Chris está más que muerto, en cambio, yo lo dejaré libre y que se vaya lejos de aquí. Un plan bastante organizado e inteligente.

-¿A que no?- dio una mirada perversa- Será cosa fácil, es un niño de mami. Ademas es tu último trabajo, luego te podrás ir de aquí

Dios, ¿qué dijo?.

-¿Irme?, pero Justin, no tengo donde ir- me altere-.

¿Como puede decir eso?. Tenemos un hijo y quiere echarme a la calle.

-Eso debiste pensarlo antes de revolcarte con Chris, ¿no?. Vete, ya sabes que hacer- dijo cortante-.

-No lo hice, Justin, jamás llegué más aya de besos y caricias- confesé espantada-.

¿Porqué tiene esa idea de mi?. Quizá el no lo pensó, si no... alguien se lo dijo.

-La imágenes no mostraban eso- gruño apretando los puños- Vete -ordenó furioso-.

Si, alguien se lo dijo. Eres tan estúpido Bieber, ¿cómo caes en cosas absurdas que hasta pueden ser editadas?.

-¡No, no me ire!- lo rete con la mirada- Hay que dejar las cosas en claro, Bieber- me acerqué más a su rostro- ¡Jamás me acosté con Chirs porqué te sigo amando!- grité-.

Genial, no tenía pensado decir que lo sigo amando. Quizá algo más calmado, como que estaba embarazada y por eso no podía tener relaciones sexuales, pero no, yo y mi bocota.

Sólo se quedó observandome, fijó. Cada facción de mi cara. Su ceño estaba rígido, pareciera que no respiraba.

El silencio se hacía cada vez más pronunciado, provocándome unos nervios a morir.

-Dime algo, Justin- susurre, al momento de no poder seguir más con su reacción indiferente-.

-Vete... - tomó su chaqueta, llaves y salió de la mansion-.

-¿¡Cuándo dejarás de ser un pendej* infantil y no escapar de tus problemas?!- grité furiosa a todo pulmón, rogando que al menos escuchará el insulto-.

Pero sólo oí como su auto, un Camaro negro era encendido y salió rápidamente.

Gruñi y me tiré al suelo, rendida.

Si ya no tengo a Chris, es por ti, Bieber. ¿Porque no dejas atrás el pasado y construimos un nuevo futuro con nuestro hijo adherido a él?. Dejé al que me valoraba por él que yo valoraba, dejé a Chris por ti. Siento, sinceramente, que salí perdiendo en todo esto.

Me levanté del piso y tomé la mochila con la AK-47. Fui a casa de Chris. Será algo corto.

Mierd*, verdad que ah esta hora está trabajando. Rodé los ojos y decidí esconderme entre uno de los arbustos que decoraban su casa. Me siento espía, además, ¿porque me escondo?. No lo mataré. Bueno, tampoco estaré parada como una lunática fuera de su casa.

Finalmente, desde lejos vi como Chris venía caminando, mirando el piso y con audífonos. Se veía muy mal, triste. De pronto mi vista se enfocó desde el lado contrario de la calle donde venía Chris, un auto a toda velocidad se acercaba.

-¡Chr... Chris!- grité, llamándolo- Oh no, mierd*- susurre-.

Saqué el arma de la mochila y corrí lo más rápido que pude. El auto cada vez se acercaba más y al parecer, venía con la disposición de atropellar a Chris. El auto es negro... Un Camaro.

-¿Negro?- susurre para mi-.

Justin, vino de inmediato a mi cabeza. Imposible. No puede ser el... ¿o si?.

-¡Chris! ¡Hey!- lo llamé-.

Sentía que no avanzaba nada y en cambio el auto se acercaba el doble. Cuando supe que no llegaría a tiempo me rendi y caí al suelo.

-No... - susurre apretando mis ojos, esperando el golpe del auto a Chris-.

Luego reaccione.

No perderé a otra persona. No más. Chris lo ah hecho todo por mi, ahora yo cobraré la deuda.

Tomé el arma y apunté a la rueda del auto, dispare. Esté comenzó a dirigirse a todas direcciones, descontrolado, pasó de Chris, hasta llegar a impactar en un poste de luz.

Chris se dio cuenta y estaba tirado en la calle, impresionado, asustado, traumado. El auto paso a centímetros de él.

Corrí donde el, se sacó los audífonos al llegar.

-______... -susurro-.

Gruñi y le di una bofetada que hasta mi me dolió la mano.

-¿¡Como se te ocurre caminar por la calle, siendo que tienes una vereda a un lado más grande que tú casa, con audífonos?!- grité pegandole en el pecho- ¡Casi te pierdo!- confesé-.

Chris no reaccionaba. Pero después de unos segundos me abrazo fuertemente. Su respiración era acelerada.

Me separe de su abrazo.

-Espera un segundo- comenté, mirando el auto con rencor-.

Tomé el arma y camine lentamente al auto. El matar personas me hizo ser más valiente. Sorprendentemente ya nada me detiene, ademas, ¿qué pierdo con morir?.

Suspire al llegar al auto. A la cuenta de tres abro la puerta.

-Uno, dos... -susurre- ¡Tres! - apunte con el arma- ¿Hailey?