» what a feeling

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La alarma de mi teléfono sonó. El reloj marcaba justamente las 7:40 de la mañana. Sin más me levanté y tomé una ducha rápida y refrescante. Hoy me sentía bastante bien, con ganas de ser buena persona por un día. Una vez cambiado, bajé a la cocina y conecté mi teléfono a las bocinas, donde comenzó a sonar Twenty One Pilots, Abrí la nevera buscando algo qué desayunar, la regadera del baño de mi madre se escuchaba hasta abajo, saqué un par de huevos, junto con jamón y pocos vegetales. Piqué estos para agregarlos a la sartén donde ya se freía el jamón y descansaban los huevos revueltos. Mientras tanto saqué el pan favorito de mi madre –el de papa obviamente-, lo tosté en la parrilla con mantequilla e hice dos sándwiches con de huevo y quesos variados. Saqué un tupper con fruta ya picada que mi madre siempre mantenía en el refrigerador y serví jugo de naranja y café. Puse dos manteles sobre la barra donde mi madre se apareció después de dos minutos.


"Buenos días", caminé detrás de ella y besé su mejilla. Ella se quedó quieta y me miró mientras me sentaba.

"¿Dónde está mi hijo?", preguntó y comencé a reír.

"Lo estás viendo", bebí de mi taza de café y miró su plato.

"Algo quieres, ¿qué es?".

"Sólo es un buen día madre, estoy de buenas", confesé. Ella mordió su sándwich.

"Mmm, está muy bueno".

"Gracias", sonreí airado y le di un mordisco.

"¿A qué viene tanta felicidad?", preguntó.

"Pues ya vez, la vida", ella rió.

"¿Acaso todo esto tiene que ver con Zazil-Ha?", preguntó. Sentí como mi estómago comenzaba a moverse y no era precisamente por el hambre. "Ella te está haciendo bien, lo he notado".

"Ella no me hizo nada, así yo soy", admití.

"¿Todos los días te despiertas y le hacer desayuno a tu madre?", preguntó alzando sus cejas. Solté una carcajada.

"Sólo me siento bien mamá, no quieras que mi humor cambie el día de hoy".

"Oh, no no. Si todos los días fueran así, créeme que sería diferente".

Seguimos comiendo, no estaba del todo convencido de querer hacer esto. Quizá se vería muy obvio. ¿Desde cuándo me despertaba el interés por el negocio familiar? Creerá que estoy loco, o por ella. No sabía cuál era la obsesión de mi madre con Salsita. Siempre quería sacarla al tema, como si tuviera alguna clase de pacto con el diablo y supiera todo lo que está pasando. Me le quedé mirando, ya casi acababa. Tenía que preguntarle ahora.

"Uhm... Y... ¿Cómo va el trabajo?", pregunté, ella me miró. Jamás le preguntaba por la empresa.

"Un poco atareado", confesó. "Las audiciones son la próxima semana y están arreglando el set, mejorando las instalaciones y oh cielos. Tengo tantos correos sin responder, cartas que leer, firmas que hacer, citas que atender".

"Debes tener muy poco tiempo para relajarte", inicié.

"Dejé de saber lo que era el descanso desde que todo se hizo tan internacional", confesó.

"Deberías buscar a un asistente", sugerí.

"Estoy tan ocupada que no me puedo dar el lujo de buscar a alguien".


Apreté mis labios y bebí un poco de mi café.

"No tienes por qué buscar a alguien...", me le quedé mirando con la taza entre mis labios, ella entreabrió la boca y negó efusivamente.

Airplanes » l.hМесто, где живут истории. Откройте их для себя