Capítulo 3. Segunda Temporada.

21.9K 1.8K 407
                                    

Narra Dipper:

Aún seguía frente a la puerta, no podía creer que mis problemas ya habían terminado.
Sentí unos brazos rodearme la cintura y unos cálidos labios en mi cuello.
Solté un suspiro.

-¿En qué piensas Pino?.- Susurro mordiendo mi oido y volviendo a mi cuello.

-Creí que podías leer la mente.- Dije soltando una risita y cerrando los ojos para sentir más sus caricias.

-Puedo, pero tu me dijiste que no lo hiciera.-

-Estaba pensando en que mis problemas habían terminado.- El mordió mi cuello e hizo que soltara un leve gemido.
Me di la vuelta y enrede mi cola en su cintura, comencé a besarlo y nos tuvimos que separar por falta de aire.

-Que tierno.- Dijo acariciando mi cola.

-Ah, ¡Ah!...- No pude evitar gemir por su contacto.
Escondí mi cabeza en su hombro aferrándome más a el.

-Parece que eres muy sensible ahí.- Y soltó una risita. Yo iba a defenderme, pero volvió a acariciar ahí y no pude evitar aferrarme más a el.
Como seguíamos al lado de la puerta solo estiré una de mis manos hacia atrás y puse el seguro. Bill sonrió pegado a mi cuello e hizo una señal para que enredara las piernas en su cintura, lo cual hice. No unimos en un beso desesperado, yo entrelacé mi brazos en su cuello profundizando más el beso.
El me llevó hasta la cama donde me dejo con delicadeza sin cortar el beso. Bajó a mi cuello y lo comenzó a morder, haciéndome dar varios gemidos, pero lo pare en seco.

-Las chicas, p-podrían oirnos... ¡AH!.- Avía rascado mi cola, fue como una corriente eléctrica que recorrió todo mi cuerpo, desde mis orejas hasta mis pies.
Al demonio que nos escuchen.
Pasé mis garras por su espalda para hacer que la ropa que tenía se rompiera y cayera por ahí. El se apartó de mi cuello para verme a los ojos.

-Si sigues así me vas a dejar sin ropa por que la destruyes con tus garras.-

Y nos volvió a unir en un beso.
El bajó sus manos a mi camisa y me la quitó. Estábamos iguales.
Me quitó los pantalones dejándome solo en boxers.
El volvió a acariciar mi cola y gemí involuntariamente. Llevé mis manos hasta su pantalón, el entendió la señal y se los quito.
El comenzó a morder mi clavícula y me sacó la única prenda que me quedaba, al igual que el.
El introdujo un dedo en mi interior sin que me diera cuenta y pegué un quejido de dolor. El me besó para que me tranquilizara, lo cual funcionó.
Hizo lo mismo con los otros tres. Después los retiro y en su lugar puso su miembro y comenzó a entrar en mi.
Yo aferre mis garras a su espalda y clave mis colmillos en su hombro haciendo que sangrara, su sangre no sabia nada mal.

-Muévete.- le susurre y el comenzó con las embestidas.

Las primeras embestidas eran lentas, pero después se tornaron más rápidas.

-Bill, n-no puedo más.- Y sin avisarle, me corrí entre nuestros abdómenes. El, a las pocas embestidas, se corrió dentro de mi.

Cayó al lado mio, mirándome a los ojos, los dos con la respiración irregular.

-Tienes sangre en el labio.-

Llevé una de mis manos a mi labio y había sangre suya.

-Es tu sangre, no sabe nada mal.-

-Ahora me vas a decir que eres mitad vampiro, ¿no?.- No reímos los dos.

-Ya es suficiente con ser mitad gato.-

El me abrazó y yo le correspondí.
-Te amo Pino.-

-Y yo a ti Bill.-

----------------------------------
Se que tardo en subir capítulo, pero es que hoy tuve que ir a dar una materia que no aprobé y los otros días es que no me sentía bien. Además de que no se escribir muy bien esto.

El Gato y El Demonio. BillDip.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora