Capítulo 50

5K 286 37
                                    

« ¿Juntos?
Por siempre. »

E M M A

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

E M M A

Tras engullir mi sándwich -más el de Lana- como si no me hubiese zampado tres tortitas con arándanos y un plato con huevos revueltos para desayunar, mientras nos echábamos unas cuantas risas con Kevin y nos poníamos al día sobre los acontecimientos más recientes de nuestras respectivas vidas, tocando tanto temas de estudio como de relaciones amorosas, mi nueva hermana y yo pasamos a despedimos de la familia Butler.

Kevin suspira cuando extiendo los brazos en su dirección, y me da un suave beso en la sien cuando nuestros cuerpos colisionan. Es un beso que transmite nostalgia por haber pasado de vernos cada día a visitarnos por las fiestas, pero ninguno dejamos que nos afecte demasiado. En un momento dado me abraza con más fuerza y yo me aferro a él, tratando de grabármelo en el alma. No es amor lo que nos mantiene pegados el uno al otro, nunca lo ha sido. Es amistad, respeto y familiaridad.

Estar con Kevin es muy fácil, todo con él es sencillo. Tiene una mente tan abierta que los temas de los que hablar nunca se agotan y siempre aprendes algo nuevo.

-¿Hasta cuándo os quedáis? -pregunta, apartándose un poco para poder verme la cara.

-Hasta mañana. Nuestro vuelo sale a última hora de la tarde.

Hace una mueca y yo lo vuelvo a abrazar.

-Te prometo que la próxima vez nos quedaremos un poco más. No, pero qué estoy diciendo. Ya va siendo hora de que seas tú quien nos visite a nosotros -le doy un puñetazo sin fuerza en el hombro y él sonríe-. Siempre que quieras escaparte o hacernos una visita, avísanos y tendrás un billete a tu nombre. ¿Lo harás? Hablo totalmente en serio, yo misma me encargaré de que tengas el billete al cabo de cinco minutos. ¿Entendido?

Gracias al tacón de mis botas quedamos prácticamente a la misma altura, ojos marrones contra ojos marrones. Kevin asiente.

-Entendido.

-Vuelve cuando quieras -me dice Sophie, que sentada junto a Lana y el señor Butler al otro lado de la barra americana de la cocina, observa la escena como si de una obra de teatro se tratase-. Sabes que aquí te queremos como si fueras un miembro más de la familia.

«Como un miembro más de la familia.»

Aprieto las manos de Kevin y miro al suelo por un momento.

-Es la pura verdad -susurra él, y yo asiento.

Lana y yo emprendemos el rumbo en dirección a la peluquería de la madre de Rachel. Sé que con las cientos de peluquerías que hay por la zona escoger esta precisamente es un poco morboso, pero me da igual. Lauren lleva viniendo por aquí desde hace años, y siempre ha salido con una sonrisa en la cara y el autoestima por las nubes. Al parecer, esa mujer y sus manos mágicas saben bien lo que hacen.

No Me Falles  [2]Where stories live. Discover now