My destined ||Suga Y Tu||

Siete

_____.— volvió a decir aquel rubio mirándome con esos ojos penetrantes.

— Ahora me acosas? — pregunto en un tono entre burlón y molesto.

— Ah..Y-yo vine a comer! Que coincidencia vernos aquí YoonGi..— dije forzando una sonrisa.

— Vienes a comer sola en un restaurante familiar?..Dime, tanto te gustó?

— Ya quisieras.— respondí.

— Hemos estado tres años en el mismo Instituto. Y siempre me estas observando. Por que no lo admites ya?

— No es por que me gustes, Es por que eres extraño. Eres realmente popular en el instituto, tienes a todas las chicas a tus pies, muchos chicos a cuáles le gustaría ser tus amigos, porque lo ignoras?

— Voy al Instituto a estudiar, No a hacer amigos. Y no necesito a ninguna chica. Si no te gusto porque te interesa tanto mi vida? — preguntó con un rostro serio.

— No a todas las chicas le gustas. — respondí.

— No lo dijiste tú? Tengo a todas las chicas a mis pies.— siguió.

— Aish! Eres guapo, inteligente. El novio que cualquier chica quiere! por eso es que estoy aquí, vine a proponerte algo, un trato.

— Que? acaso quieres que salga contigo? 

— Si no lo haces, le diré a todos sobre tus trabajos a medio tiempo.— interrumpi.

Se que esto es chantaje y se que esta mal. Pero, lo dije inconscientemente. Había algo que me obligó a hacerlo. 

Si los demás alumnos en el instituto sabían sobre sus trabajos no les costaría tiempo saber sobre sus problemas en casa. 

empezarían a tenerle lástima y tratarlo de otra forma. Es algo que YoonGi odia, verdad?

— Me estás chantajeando?.. — decía esto mientras se acercaba a mi.

— Tu decides YoonGi. Sal conmigo o todos sabrán sobre esto.

Antes de que YoonGi pueda decir algo, alguien toca mi espalda. Al voltear, puedo ver a un Taehyung sonriente.

— Diablos Tae! en donde te habías metido!? — dije molesta.

— Lo siento, pasó un camión de helados, no pude evitarlo. — contestó.

— Vámonos, Jin estara realmente molesto si tardamos más tiempo. — Voltee a mirar a YoonGi por última vez.

— Te doy tiempo hasta el lunes YoonGi.— sonreí.

Y entonces nos fuimos de allí. Al llegar, Jin nos regaño por no haber contestado sus llamadas.

Diciendo que estaba realmente preocupado. 

Nos disculpamos y fuimos a mi casa.

Luego de cenar y despedirme de Taehyung y Jin me duché y me acosté en mi cama.

Entonces recordé lo que paso con YoonGi.

Que fue lo que pensé en ese momento?

Dice que soy una idiota y siempre me habla con ese tono de burla. Me moleste y dije esas cosas. Aún así YoonGi es una persona realmente orgullosa. Por lo que no va a aceptar. 

El lunes le diré que sólo era una broma y problema resuelto. Tendré que buscar a otro chico o simplemente rendirme con las historias de romance.

Me acomode preparada para dormir pero realmente no podía hacerlo.

— _____, estás durmiendo? — escuché, y me levante rápidamente.

— Jin? — pregunté.

— Siento molestarte a esta hora. — respondió acercándose a mi y acomodándose a mi lado.

— No importa, sucede algo?..— pregunté.

— Hoy realmente me preocupaste. Puedes decirme a donde fuiste?

Estaba preocupada de que esto pase. Taehyung me dijo que no diga nada. Pero yo no puedo mentirle. No a Jin.

— Fuimos con YoonGi, lo seguimos a su trabajo. — contesté. 

Al hacerlo pude notar el ceño fruncido de Jin.

— Por que?

— Iba a hacer que YoonGi saliese conmigo. Pero ya decidí que no lo intentaré más. Creo que lo mejor será rendirme con mis historias. Si no puedo trabajar con un género distinto al que escribo no creo que pueda ser llamada escritora. Debería sólo dejar to-

Antes de poder seguir con lo que estaba diciendo, Jin coloca uno de sus dedos en mis labios y hace una mueca en forma de silencio. Algo que me sorprendió.

— No digas tonterías, no importa lo que los demás digan. Para mi tú eres la mejor. No te fuerces. cuando sea la hora de que tu te enamores, pasara. Yo voy a ayudarte, así que, no te rindas _____.— dijo tomando mi mano.

— Por eso te quiero Jin..— dije mientras lo tome con mis brazos para darle un gran abrazo.

— Lo sé, soy el mejor.

— Idiota..dijiste que me ayudarias, cierto? Como lo harás?..— pregunté.

— Sólo espera.— respondió mientras acariciaba mi cabello. Al sentir su tacto, No pude evitar quedarme dormida.