Cap.26

2.1K 170 37
                                    



Me despierto porque Tragón me está asfixiando, tiene su cabeza encima de la mía. Intento que se mueva pero está profundamente dormido, le oigo suspirar constantemente de lo a gusto que está, me sabe mal, pero me está ahogando y es bastante incómodo.

_ Tragón, despiértate, vamos bonito.

Intento moverle pero pesa demasiado para mí.

_ ¿Necesitas ayuda? -escucho a Matt en la puerta-.

_ Por favor, tu querido perro se cree que mi cara es su almohada.

Entra y comienza a reírse al ver la escena, yo me pongo roja por la vergüenza por varios motivos. El primero, me va a ver recién levantada, en pijama, despeinada y sin maquillar, perfecto, va a ver a la versión troll de Emma. Segunda razón, anoche pasó lo mismo que la anterior noche, estuvimos a punto de irnos a la cama, pero cuando estábamos en el último momento me dio las buenas noches y se fue hacia su habitación, dejándome con un calentón de tres pares de narices. Tercera razón, debido a la anterior, anoche tuve un sueño... cómo decirlo... inapropiado, y cómo no, él era el protagonista, por lo que ahora me están viniendo escenas del sueño de anoche, las cuales no eran precisamente decentes.

Matt aparta a su perro, el cual nada más despertarse me ve y comienza a darme los buenos días como todas las mañanas, tirándose encima de mí y lamiéndome toda la cara feliz. Me echo a reír contenta mientras me moja la cara de tanto beso, me encanta esto. Matt le aparta entre risas y el animal empieza a correr y saltar por la cama de pura felicidad, me podría acostumbrar a despertarme así cada mañana, supongo que ya estoy preparada a tener otro perro, lo echo demasiado de menos. Tras tirarse un poco encima de su dueño Tragón se va al piso de abajo moviendo el rabo, supongo que pensará que así iremos antes a la cocina a hacer el desayuno. Matt y yo nos reímos, este perro anima a cualquiera.

_ Buenos días preciosa.

_ Buenos días bombero.

Me tapo un poco con la sábana muerta de vergüenza mientras Matt se sienta en la cama a mi lado y me da un beso, tras ese le sigue otro y otro...Sujeto mi mano en su cuello, noto como va intensificando el beso, algo dentro de mí empieza a florecer. Tragón empieza a ladrar desde el piso de abajo, creo que está ya ansioso por su desayuno, al escucharlo Matt se separa y se levanta para acudir a la llamada de su perro, no sin antes guiñarme un ojo divertido justo antes de salir de la habitación.

Nada más desaparecer me tapo la cara con el brazo, no me puedo creer esto, no puedo creerme que esto me este pasando, nunca había sentido algo tan fuerte por nadie, es como si cada vez que estuviera cerca el corazón se me fuera a salir del pecho. Me ducho corriendo y me arreglo en un segundo, bajo corriendo las escaleras, me doy cuenta de que estoy tan animada que bajo los escalones dando saltitos, despertarse así de animada da gusto la verdad. Cuando llego Matt ya está poniendo los platos en la mesa mientras Tragón le sigue sin perder la vista de la comida, es imposible no sonreír al verlo, es precioso.

Tras desayunar y pasear un poco al perro por el pueblo nos vamos a verlas pocas galerías de arte que nos quedan por visitar, ayer estuvimos viendo algunas pero nos lo tomamos con calma y aún nos quedaban un par por ver. Tras esto nos vamos a comer al mismo sitio al que fuimos a cenar la primera vez, la vista de día es completamente diferente, ahora ya no hay lucecitas colgando por los árboles, pero ahora por todos los lados hay flores, es precioso. Nos sentamos en la misma mesa que la otra vez, a mi lado tengo unas campanillas colgantes, todos lo que se ven son flores en todas partes, los cual da una fragancia maravillosa a la terraza.

El viaje de toda mi vida -COMPLETADA -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora