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Llegué al lugar que habíamos arreglado treinta minutos antes. Me sentía avergonzado, pero estaba tan ansioso por ver a Gabrielle otra vez, que no me importó. Estaba nervioso por conocer a su hermana. Espero que no me odie. Aunque, probablemente lo hace. ¿Por que no me odiaría? Oh dios estaba arruinado.

Los minutos pasaron mientras yo esperaba, solo, en la mesa de tres. Ya había tomado cuatro vasos de agua y una cerveza (solo para estar algo seguro). Pensé que debería ir al baño antes de que llegaran. No quería darles la oportunidad de hablar mal de mi porque tuve que disculparme en medio de una conversación para ir al baño. Si me ganaba a Mari, me ganaría a Gabrielle. Mari le llenaría la cabeza si le caía mal y ahí si que no tendría oportunidad.

Cuando volví del baño, vía a Gabby y a su hermana ya sentadas en la mesa que había reservado. Mari ya lucia molesta, y Gabby parecía ansiosa. Genial. Pase mi mano por mi cabello un par de veces antes de hacerme lugar entre las mesas y llegar a la mía. No estaba seguro de si iba a abrazarlas o no, ya que se encontraban sentadas, pero mientras le acercaba, Gabby se puso de pie como si hubiera leído mi mente.

Mari se levanto de mala gana y me dio un abrazo de lado tan descuidado que me pregunté si eso se consideraba un abrazo. Gabby apoyo su cabeza en mi hombro, y yo la apreté con algo de fuerza, dejando que mis manos trazaran círculos sobre sus costillas antes de soltarla. Ella me miró con algo de duda y entre en pánico. quizá no debería haber hecho eso.

"Entonces, ¿como has estafo Mari?" Pregunté mientras me sentaba y ojeaba el menú.

Ella soltó un quejido y tomó su menú. "No te he visto hace un año y ¿eso es todo lo que tienes para decir?"

"Mari," Gabrielle dijo en tono de advertencia por lo bajo, tapándose con el menú, pero su hermana hizo como si nada.

"¿Bien?"

Mordí mi labio y conté hasta cinco antes de mirar a su hermana, quien no dejaba de mirarme mal. Por dios, ¿me la había tirado en la boda o algo así? Luego de que eso cruzo mi cabeza, entre en pánico otra vez. Yo no haría eso, ¿verdad? Eso es enfermo. Quiero decir, se que no recuerdo nada de la boda pero... Aunque si lucen como gemelas. No. Basta de pensar en eso. Solo responde la puta pregunta Ashton. "Si, solo trato de ponerme al día."

Ella puso los ojos en blanco, pro respondió mi pregunta anterior. "He estado bien. Pero, la verdad es que deberían estar pagándome por ser su psicóloga con la cantidad de veces que he arreglado sus problemas luego de que Gab pasara noches llorando en el teléfono conmigo."

Bajé mi menú, y miré a Gabby como pidiéndole perdón. Ella no me miraba. Su rostro seguía escondido detrás de su menú, así que en su lugar miré a Mari. "Lo siento."

"Oh, lo sientes." Ella casi se rió de mi. "¡Gabrielle el lo siente! ¡Nuestros problemas se resolvieron!"

"¡Mari!" Gabrielle dejó con fuerza su menú en la mesa, y miro a su hermana. "¿Que carajos te dije antes de venir aquí?"

"No me importa" Ella respondió, mirándola también. "Todo esa mierda de controlarme voló por la maldita ventana cuando este idiota abrió la boca. ¡No me puedo sentar aquí y pretender que el no arruinó tu vida!"

"El no arruinó nada. Solo porque las cosas están difíciles ahora no significa que ya no lo ame."

Ellas siguieron hablando de mi como si yo no estuviera aquí sentado, pero no me importó. Mis oídos seguían repitiendo las ultimas palabras que habían salido de su boca. No estaba seguro de si lo había dicho sin pensar pero si había sido así es porque realmente lo sentía. "No significa que no lo ame." Ella me amaba. Ella todavía me ama. Todavía tenia una oportunidad.

Su discusión siguió incluso luego de que yo pudiera volver a oírlas.

"El era el novio prohibido del que  mamá te advirtió. Te cegó con collares caros y viajes por el mundo. Nunca viste un futuro con el porque te hizo creer que solo tenían que vivir el momento. ¡No puedes construir un futuro viviendo el puto momento Gabrielle!"

"Estaba feliz Mari," Gabby respondió, en el mismo tono y volumen que su hermana. "Era joven y nunca me habían tratado tan bien. Ningún chico con el que he salido ha sido lo suficiente para ti. Ya no soy un bebé. Puedes dejar de protegerme.

"Dejare de protegerte," Mari bajó su vos, notando que estaban llamando la atención. "cuando dejes de llorar hasta dormirte. ¿Sabes lo difícil que es escuchar tu corazón romperse cuando estoy a 17 horas en avión de distancia? No es mi trabajo mantenerte cierta Gabby. Sabes que siempre lo haré, pero si el te amara como tu lo amas, no te dejaría sufrir así."

"Gabby," Hablé finalmente, ya no podía escuchar como insultaban al hombre que me prometí ya no ser. Alcancé su mano a través de la mesa y la tomé, acariciándola con mi pulgar. A pesar de las lágrimas que caían por su rostro, no dejó de mirarme, o se molesto en limpiarse la cara. "Realmente lo siento. Nunca entenderás lo mucho que lo lamento. Jamás había arruinado tanto algo en toda mi vida. Tienes razón, éramos muy jóvenes cuando esto empezó, pero eso no significa que no podamos envejecer juntos."

Nadie habló. Dudaba que Mari creyera la sinceridad en mi voz, pero esperaba que Gabrielle si lo hiciera. Necesitaba que ella viera el cambio en mi. Tratar de que volviera a mi vida era inútil si no me creía.

"Ashton, yo-" Comenzó a hablar pero un muy nervioso camarero se acercó antes de que ella pudiera terminar.

"Pu-puedo traerles algo p-para tomar?"

Rápidamente ordenamos algo, y nos encontramos en un silencio incomodo. Gabby no había retirado su mano de la mía, y Mari se negaba a mirarnos. "Ibas a decir algo, justo antes de que el camarero um..." Traté de que terminara lo que iba a decir.

Ella sacudió la cabeza y miró nuestras manos. "No era um... no era nada"

"No podemos arreglar nada si no me dices en que piensas."

"Era que.. um es que... Bueno Mari," Gabrielle se volvió hacia su hermana, y yo dirigí mi mirada a otro lado. Algo me dijo que lo que iba a decir era algo entre ellas dos. "Creo que quiero ir a casa."

Me voltie rápido hacia ella, sentí el miedo en mi. ¿A que se refería? No hablaba de Florida, ¿verdad? No podría ser...

Su hermana la miró sonriendo como si pensara lo mismo que yo, pero le dió una respuesta que no esperaba. "Perfecto, podemos empacar tus cosas cuando-"

"No." Gabrielle dijo con un determinación que no había escuchado antes. "Quiero decir, quiero ir a hogar. Pero a mi hogar con Ashton."

Ella quería estar conmigo.

"¿Sabes que Gab? Espero que estés tomando la decisión correcta. Porque la próxima vez que el te haga esto, no voy a dejar todo para volar por el mundo a salvarte."

"Mari, esto no significa que no aprecie lo que hiciste pero enserio creo que necesito-"

"No, Gabrielle," Mari se puso de pie y tomó su bolso del suelo, colgándoselo en el hombro. "no quiero escucharlo. Parece que sigues tan embobada como cuando lo conociste. Y tu," Puso su mano con fuerza en la mesa frente a mi y se acercó a mi rostro. "si alguna vez la lastimas de nuevo, te juro ir dios que volveré y te arrancaré miembro por miembro. ¿Me entiendes?"

Trague fuerte y asentí. Las palabras me fallaron mientras Gabrielle y yo veíamos a su hermana salir furiosa del restaurant.

El camarero nervioso volvió y aclaro su garganta. Ambos lo miramos algo asombrados. "¿Han decidido q-que van a ordenar?"



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