¿Y si Me Tuviera Que Marchar? JackBam.

Cap 5

[BamBam]

Cuando mi tío me dijo que me colocaría en el mejor grupo de su "negocio", por llamarlo de alguna forma, di por hecho que serían bastante buenos, pero jamás imaginé lo que presenciaban ahora mis ojos. Era absolutamente increíble.
Primero estaba Mark, en medio de la sala atizándole a una colchoneta de boxeo con todas su fuerzas. Cada golpe era más firme y certero que el anterior, apuntando y golpeando el punto exacto que pretendía sin fallar ni una sola vez. Era todo lo contrario a Jackson, manteniendo el control en todo segundo.

YoungJae y JB practicaban tiro, este primero enseñándole al segundo, a quien se le resistía más la técnica y puntería. También me habían dicho que ambos destacaban en velocidad, aunque no había tenido tiempo de comprobarlo. Hasta ahora JB había fallado dos tiros y YoungJae ninguno, incluso el menor había formado una Y en el pecho del maniquí con los disparos.

Quizás el más destacable en puntería era Junior, pero ahora mismo se encontraba recostado en un sofá con una libreta en mano. Cabe decir que junto a Jackson, era quien se encargaba de organizar las misiones, intentando acortar el tiempo y disminuir el riesgo. Otro detalle del Pelinegro era que tenía una destreza sin igual con las armas blancas, sobretodo las pequeñas y más comunes, como cuchillas o navajas. De hecho en este momento con la mano libre se pasaba una entre los dedos con total confianza.

El más pequeño de todos, YugYeom, pasaba el rato haciendo flexiones y demás ejercicios. Era increíble la resistencia que tenía ese niño, y sobre todo la capacidad para destacar en todas las artes. Jackson no mentía cuando decía que valía oro, porque en serio, no tenía ningún punto débil.

Y por último el platinado.

¿Qué decir de él?

Nada. Porque no estaba haciendo nada. Bueno, sí, estaba apoyado en la pared con los brazos cruzados y la vista pegada al culo de Yugyeom. Un líder de grupo genial y completamente confiable, claro.

" Y a mi tío se le ocurrió dejarme a cargo de él..."

Aunque en el fondo no me podía quejar, ya que yo tampoco estaba haciendo algo productido a demás de tomar datos de cada uno. Me gustaba observar, pero eso no me ayudaría al cien por ciento en cumplir mi objetivo.

- ¡Princesa! -Levanté la vista hacia la voz grave que tan bien conocía y me acerqué cuando me hizo un gesto. Jackson señaló a Mark con la cabeza antes de hablar. - Dile a Mark que te enseñe.

- ¿Qué? ¿Por qué él? -Le miré y nuevamente devolví la vista al platinado con actitud enfadada.

- Dijiste que te encargarías tú personalmente.

- Solo quiero que te muestre las bases.

- Pero... -Me puso esa mirada de "¿Vas a volver a replicarme? ¿En serio?" y decidí callarme. Más que nada porque no sería bueno ni para mí, ni para él ni para los oídos de los presentes en la sala, el empezar una pelea. - Espero que no estés pensando en librarte, porque hicimos un trato.

- Yo nunca rompo mi palabra BamBam. Deberías saberlo si tan bien me conoces.

- Como digas... -respondí de mala gana antes de dirigirme hacia Mark.

Aún estando a dos pasos de él, no dejó de golpear la colchoneta, como si estuviera abstraído de todo. Era increíble, en serio. No quería ni imaginar cómo sería estar en el lugar de un oponente suyo, me dolía solo de pensarlo.

- Ma... -me alejé unos pasos al sentir una brisa en mi mejilla, provocada por un golpe demasiado cercano.

-Mark...-De nuevo sin hacerme ni caso. Genial.

- ¡Mark!

- Te he oído a la primera, no hace falta que grites- respondió deteniendo sus golpes y la colchoneta, la cual había empezado a balancearse después de los impactos. Me sonrió al tiempo que limpiaba su rostro con el antebrazo.