CAPITULO 24 Reencuentro (Edward)

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EDWARD:

Era ella, era mi Bella, pero ya no era humana era un vampiro, nuestras miradas se encontraron, ahora dorada y no el chocolate que amaba, yo me había ido para dejarla vivir una vida sin peligros, por eso me había alejado para darle una oportunidad y ahora me encontraba con esto. Toda mi atención estaba concentrada en ella desde el momento que dije su nombre.

Primero pareció no reconocerme pero luego me pregunto algo que hizo que un dolor infinito se apoderada de mi

--me avandonaste—me dijo.

Al momento vi como el que sostenía su mano se me avalanzo, era rápido casi como yo. No podía leer su mente y eso me desconcertaba, luchamos pero la pelea no duro mucho más pues fuimos separados abruptamente.

Ella estaba con él eso lo tenía claro, me desconcertaba que a ninguno del Clan Salvatore pudiera leerle la mente, un escudo había dicho un joven de cabellos castaños y ojos dorados claro, Stefan era su nombre. Bella y ese sujeto llamado Damon se internaron en el bosque, el la levaba en brazos, el dolor emocional que sentí al verla con otro hizo que una furia e impotencia se apoderarán de mí, sabía que era mi culpa, si yo no la hubiese dejado ella tal ves estaría conmigo aún. No, no podía ser tan egoísta al pensar en ello. Debía asumir que me había olvidado, eso fue lo que le pedí en primer plano aunque me doliera, mis estupidas decisiones nos habían llevado a este punto sin retorno, solo me quedaba asegurarme que ella fuese feliz.

Había encontrado a la humana de las visiones de Alice, eso era bueno así la podríamos salvar de ese destino incierto que le esperaba, se hicieron las presentaciones correspondientes de camino a la casa del "Clan Salvatore", me enteré que Bella era la esposa de Damon, tenía miles de preguntas por hacer pero sabía que aún no era el momento, ya había esperado por más de 40 años, unos pocos días no serían nada.

Alice y la tal Pru Salvatore nos empezaron a relatar de sus visiones, todos estaban atentos, yo me mantenía alejado de todos ellos, el escuchar los pensamientos de mi familia no me calmaba, lastima era lo que me tenían como si necesitara de algún consuelo, la única que se mantuvo distante a esos pensamientos fue Rose, ella estaba distante.

Mi dolor era demasiado como para soportarlo, pero ahora solo importaba poner a salvo a Arabella ese era su nombre un buen seudónimo de Bella. La vida en verdad esta llena de ironía.

ALICE:

— Están aquí para protegerla, la guerra esta a punto de iniciar y todos nosotros nos debemos de preparar...dijo la mujer que se llamaba Pru.

Aun no entendía como era posible que estuviera sucediendo todo esto, ella tenía un don casi igual al suyo, solo que ella necesitaba del contacto y yo no, enterarme de que Bella estaba viva me llenaba de felicidad y a la vez de tristeza sabía que esto le estaba doliendo a mi hermano, verla viva y saber que era feliz era bueno, saber que ahora era parte de otro clan, que tenía esposo y había adoptado a unas niñas en parte me dolía siempre pense en ella como una hermana ya estuviera con Ed como que no, me hubiese gustado romper la promesa que le hize y seguir al pendiente de ella, tal ves las cosas hubiesen sido muy distintas.

— Hay que empezar a prepararnos para la batalla entonces—les dije a todos—no hay tiempo que perder.

Y fue así como nos pusimos de acuerdo para iniciar los entrenamientos por la mañana en el claro donde se llevaría la batalla al salir el alba.

Haríamos de todo por ver a las personas que amanos felices, así sea verlas con otras personas, porque ese es amor verdadero, poner su felicidad por encima de la tuya....

Bella Swan la nueva Isabella SalvatoreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora