"Mis demonios"-(Chris Evans y tú)-

Capitulo 39: Te amo, no me dejes.

Chris POV:
-Al terminar de leer mi corazón estaba hecho trizas, me sentía horrible y de mis ojos comenzaron a salir lagrimas... Estos momentos eran de los que no sabía si rendirme o seguir.
Me quede serio, sentado en la cama viendo al suelo... No tenía ganas de nada. Mi teléfono comenzó a sonar e ilusionado de que fuese ella conteste sin ver-

-¡¿____?!-Pregunté apurado.

-No Chris, soy Hayley, pero precisamente por eso te llamo.

-¿Qué pasa?-Trate de disimular mi voz.

-¿Estás bien?-Preguntó, al parecer lo noto y suspiro- No contesta y quería preguntarle si mañana iríamos de compras.

-Ella se marchó, se fue... No tengo idea dónde está.

-¡¿Qué?!-Preguntó exageradamente sorprendida.

-Lo que te dije Hayley... Mira, no tengo ganas de hablar -Suspire- Llama luego, ¿Sí?.

-Voy para aya-Colgó.

-No habían pasado ni quince minutos cuando Atwell ya estaba aquí, toco la puerta y fui a abrirle, me abrazo y yo se lo di de vuelta, apoyo necesitaba en estos momentos, al soltarme nos sentamos en el sillón-

-Dime qué pasó Osito-Dijo preocupada.

-Lo arruine... Sí que lo arruine-Se me quebró la voz.

-¿Porqué?.

-Por que...

-Comencé a contar todo, absolutamente todo, cada detalle, cada cosa, Hayley se sorprendía cada vez más y más, inclusive le conté lo de la carta-

-Ow Chris...-Dijo en tono de compasión- ¿Dónde está esa carta?.

-En mi habitación-Respondí a secas.

-Hizo una mueca, se puso de pie y fue por ella-

-Hay que analizar esto-Se sentó de nuevo junto a mí-Veamos...-Comenzó a leer-

-En lo que leía yo solo miraba fotografías de ella en mi teléfono, el pensar que no volvería me aterraba-

-¡Listo!-Dijo y sacó su teléfono de su bolsa.

-¿Qué ocurre?-Pregunté sin ánimos.

-Dijo que retiró dinero del banco para usar su tarjeta... Dijo que borraría redes sociales -Reviso el teléfono- Ya lo hizo -Bufo- Dijo que se desharía de su teléfono pero...

-¡¿Pero qué?!.

-Se le dibujó una sonrisita en el rostro-

-Acabo de descargar una App que rastrea a mis amigos a través de sus teléfonos... Aún no se deshace del suyo, ¡Marquemos!.

-¿Y si no contesta?-Murmuré temeroso.

-Nada pierdes con intentar-Respondió optimista.

-Llamo desde su teléfono, sería más probable que le contestara a ella, marcó una vez... Nada, Marco otra vez... Tampoco, así estuvo durante buen rato, todas mandaban al buzón de voz, excepto las últimas dos llamadas, que decían estar "Ocupadas"-