Dominado (Zarry)

Capítulo 18

Acababa de cerrar la maleta, tras meter las últimas prendas. Dio un vistazo a la habitación, deteniéndose por unos segundos en el cuerpo dormido de Harry Cerró los ojos, maldiciendo en voz baja; y recogió su chaqueta de la silla. Después agarró la maleta y dio un par de pasos hasta la puerta.

Se detuvo al golpearse el pie con el borde de la cama, y maldijo de nuevo. Suspiró aliviado al ver que Styles no se había despertado por el ruido y llegó hasta la entrada del dormitorio, abriendo la puerta. Arrastró la maleta y salió al pasillo, caminando por el corredor hasta el ascensor. Llegó hasta allí y llamó, esperando unos minutos hasta que las puertas se abrieron.

Una vez que el ascensor estaba en su planta, se metió en él y le dio al botón para cerrar las puertas. Justo en el último segundo vio como alguien golpeaba el metal para que las abriese de nuevo, percatandose de ello volvió a pulsar el botón. Se sorprendió cuando vio a Harry delante suya, en pijama, descalzo y con la respiración acelerada.

–¿Adónde vas? -le pregunto el rizado.

Él sólo  pudo bloquear como un pez. Mierda. Se suponía que esto no iba a pasar.

–Zayn. Respóndeme.

–Yo... No se.

Harry le agarró de la camisa, sacándole del ascensor. Tenía el ceño fruncido, y parecía nervioso

–Eres un idiota. -dijo Styles en un Susurro

–¿Perdón?

–Es la verdad, eres estúpido. ¿Por qué te ibas? ¿Y a dónde?

–No te atrevas.–contestó Zayn enfadado, alzando la voz. –No sabes nada, Harry. No tienes derecho a reprocharme nada. -

–Cobarde.

–Cierra la boca, Harry.

–Imbécil.

–iEs suficiente, Harry! Tú no sabes lo que se siente, joder. Tú simplemente vienes aquí como si todo esto fuera tan fácil, haces la jodida reunión y ya está. ¿Y yo qué? ¿Qué mierda significo yo? ¿Qué hago yo aquí? ¿Para qué sirvo? ¡Dimelo, Harry! Sí, soy un idiota. Un imbécil que no puede estar en la misma habitación que tú sin quedar en ridículo, un idiota que te desea. Pero no soy suficiente, lo sé; no sirvo para nada, tú solo quieres un jodido buen polvo pero estoy harto de eso. Yo quiero a alguien que se quede, Harry, alguien "para siempre" no una jodida follada en un club de mala muerte; y yo pensaba que quizá tú...

–Zy...

Su voz suena débil y lastimera, mirándole con los ojos verdes bien abiertos. Pero Zayn niega con la cabeza, está harto, no quiere seguir lidiando con esto.

–Déjalo. Me voy. Dimitiré en la empresa o pediré un traslado.

–No. Espera. Por qué? Tú no puedes hacer eso.

–No puedo más. No puedo verte. Joder. No quiero respirar el mismo aire que tú.

–Zy, yo no sabía...

–No me llames así. ¿Que no sabías? Eres un gilipollas.

–No puedes desaparecer.

–Me voy, adiós.

Se giró, dándole la espalda y volvió a llamar al ascensor. Sus manos temblaban, y pensaba que iba a echarse a llorar. Dios. Prácticamente se le había declarado.

–Zayn.

La voz de Harry sonó triste y cansada, repitiendo su nombre una y otra vez. Se giró, para verle una última vez. Harry estaba arrodillado ante él, con los hombros relajados y la cabeza. agachada. Tenía las manos detrás de su espalda, mientras murmuraba por lo bajo. La imagen acabó por destrozar el corazón de Zayn.

–Soy tuyo, Amo.

Oh Dios. Zayn se detuvo mirando fijamente hacia Harry. Sabía que era la primera vez que el rizado hacía esto. Sabía que se estaba dejando dominar, que se estaba entregando a él. Pero por qué? Los ojos de Zayn estaban empañados en lágrimas, sin entender nada de lo que acababa de pasar. Joder.

Movió su brazo y tocó con la punta de los dedos la mejilla del rizado. Alzó su barbilla, sujetándola; los ojos de Harry eran irreconocibles. Él parecía asustado, pero también aliviado, como si se alegrase de verle. Se encogió ante su toque y se inclinó sobre su mejilla, para aumentar el contacto. Parecía ido, como si se hubiese vuelto loco.

–Harry, para. Qué haces?

–No quiero que te vayas. Está bien, estoy aquí. ¿Por qué haces esto?

Poco a poco Zayn acabó de rodillas frente a él, imitándolo. Sujetó la cabeza de Harry con sus manos, acercándole.

–Yo quería ver si podía solucionar las cosas con este viaje. Quería decirte que iba a comportarme bien contigo y que respetaría si tu no querías saber nada de mí, yo siempre he querido tenerte, Zayn. Simplemente no sabía cómo hacerlo, y me comporté como un idiota, pero yo no quería ser otra puta para ti. No quería tener que arrodillarme, y suplicarte; como hacen tus sumisos, pero lo haré si eso es lo que quieres. Yo también estoy cansado, pero no quería que desaparecieras. Haré lo que digas si así te quedas.

–Oh Harry.

Acercó sus cara a la del rizado, perdiéndose en sus ojos verdes Harry quería que se queda Entreabrió sus labios y acabó juntándose a los suyos besándolo. Se besaron apasionadamente, acariciándose, acercándose y mezclando sus lenguas. Zayn no podía creerlo.

–Tú no tienes que hacer esto. -dijo Zayn cuando se separaron. –Yo no quiero que seas mi sumiso.

–Lo entiendo, lo siento por...

–No, Harry. Te quiero para mí. Quiero que seas mi amante. Sé que soy un gilipollas orgulloso, pero intentaré darte lo que necesitas. Quieres que esté contigo?

–Sí.

–¿como amantes? -preguntó Harry incrédulo.

–Sí.

Volvieron a besarse de nuevo, levantándose. Louis sintió como su corazón se recomponía de nuevo.

–Vamos a la cama. -susurró Harry cerca de su oreja. Caminaron a través del pasillo, uno junto a otro, hasta llegar a la habitación. Abrieron las puerta y pasaron al interior.

–¿Cómo te has despertado?

–Tu dejaste el móvil sobre la mesa, empezó a sonar.

–Joder.

Harry ahogó una risita, y tiró la chaqueta de Zayn al suelo. Se acercó a él y lo besó una vez más Después lo llevó hasta la cama, tumbándolo junto a él. Zayn lo observaba en silencio, dejándose llevar.

–Te quiero. -oyó susurrar a Harry, antes de besarlo de nuevo.