Magi The Labyrinth Of Magic ❀ One - Shots [Pedidos Cerrados]

Drakon x Lectora

DRAKON POV

Vagamente puedo recordar ese día, era muy pequeño pero aún así ciertas cosas sigo teniéndolas en mi memoria. Había sido cuestión de tiempo para que yo pudiese aceptar que aquella chica ahora era la segunda princesa de Parthevia antes de la señorita Serendine por la diferencia de edades. Lamentablemente por no ser hermanas de sangre ella fue tratada como una simple chica más en el palacio, no era tratada como se debía.

- ¿Por qué lloras? -Recuerdo que de pequeño siempre estaba al tanto de ella-

- M..Me tropecé.... -Lloraba cubriendo sus ojos-

Ya que ninguno se tomaba la molestia de preocuparse por ella yo había tomado la gran decisión de cuidarla como su guardia personal, pero estaba claro que para nosotros era un juego más. En verdad que eran tontas ocurrencias mías de un típico niño pequeño. Lo que había iniciado como un juego de niños terminó volviéndose realidad. Me volví en secreto el guardia personal de la segunda princesa de Parthevia y a la vez fui nombrado como el General del Imperio de Parthevia.

- ¿Hasta cuándo dejarás eso, Dragul? -Dijo divertida al ver cómo hacía una reverencia ante ella- Eso del « Guardia personal » nunca creí que fuese enserio... ¿por qué insistes con eso?

-  ¿Y dejar que algo le pase?... jamás.... -Dije para luego alzar la mirada y dedicarle una leve sonrisa-

Nuestra relación jamás fue de « Princesa y Sirviente », pues al conocerla de hace bastantes años nuestra relación era de « Mejores amigos ». De pequeño yo había hecho un juramento el cuál nunca pienso romper, y era que por ningún motivo me apartaría de la joven princesa (T/n).

Aun que esa promesa poco a poco se fue rompiendo...

Debido al puesto que se me había asignado como General del Imperio no podía distraerme, siempre había algo que hacer. Por ello casi no podía ir a visitar a la princesa (T/n), y cuando yo no iba a visitarla ella se tomaba la molestia de venir a verme a pesar de que se le prohibiera salir del palacio. Poco a poco pude darme cuenta de que cada vez se nos estaba dificultando permanecer juntos, pero a pesar de ya habernos dado cuenta seguimos intentando mantener aquella promesa...

Mantener nuestro lazo...

Todavía sigo pensando si seguir con esta promesa infantil es buena idea, tan solo estamos poniéndonos en riesgo, y todo por mantener nuestra amistad. Supongo que dentro de poco nos habremos dado cuenta de que desde un principio todo era una completa tontería, tan solo un juego de niños. Si quería seguir adelante debía dejar aun lado los obstáculos... pero...

¿Dejar de lado a (T/n) es lo correcto...?

¿Eso es lo que en verdad quiero...?

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Hasta hace poco apareció lo que se le conoce como un Calabozo. Hay rumores de que en él se encuentra un poder inhumano, capaz de hacerle frente a cualquier cosa, y por ello debía ser entregado al emperador de Parthevia, mi hermano mayor. Se me permitió estar a cargo de la captura del Calabozo, era una gran responsabilidad y sin duda estaba dispuesto a sacrificar mi vida por el bien de mi país. Había reunido un gran ejercito, la victoria estaba a nuestro alcance a simple vista, estaba casi seguro de que superar aquel Calabozo iba a ser demasiado fácil.

- ¿Terminaron de pasar lista? -Pregunté-

- Si, pero hay uno que no se presentó.... -Respondió uno de los que dejé a cargo de aquella tarea-