Capítulo Doce

1.3K 71 4
                                    


-¿Os conocéis? -pregunta de pronto Stev, con una cara de verdadera sorpresa.

El cuerpo de Will tapa gran parte del mío, como si estuviese escondiéndome, así que apenas alcanzo a ver al rubio. Desde detrás de Will observo cómo se le tensan los músculos de la espalda y, al dar un paso hacia la derecha, veo cómo aprieta la mandíbula sin apartar la mirada del chico rubio. De repente, se gira al notar que me he movido y pone su cuerpo otra vez por delante del mío mientras su mirada cambia al cruzarse con la mía.

-Vuelve dentro.

-¿Os conocéis de algo? -le pregunto a la misma vez que me habla, consiguiendo un suspiro de impaciencia por su parte. -Contéstame.

-Will, estamos aquí, ¿recuerdas? -la voz del rubio suena por encima de nosotros a la vez que se ríe, como si la situación le pareciese de lo más graciosa. -¿Qué tal todo, preciosa? Ya pensaba que jamás volvería a ver esa cara tan bonita.

Will me mira con los ojos entrecerrados, pero logro apartar mi mirada de la suya y me hago a un lado para ver mejor al rubio. Hago una mueca de asco y le miro de arriba abajo para dejar claro que el sentimiento no es mutuo.

-No puedo decir lo mismo.

Su risa se mezcla con la del tío de Will y los otros dos hombres que tiene al lado antes de contestarme.

-¿Me estás sacando las uñas? -pregunta con una ceja levantada y una mirada divertida-. Me gusta. Si quieres podemos acabar lo que empezamos el primer día.

-Puaj. -Suelto.

No pensé que tuviese una personalidad tan vomitiva cuando le conocí, pero ahora me arrepiento más que aquel día de haberle besado.

Will se gira en su sitio como si fuese un animal a punto de atacar y me rodea los hombros con el brazo, haciendo que sienta un cosquilleo en el estómago. El Will protector que tanto me gustaba salió en cuanto llegaron ellos y, por mucho que no quiera, me gusta. Cuando me tiene bajo su brazo me coloca más cerca de su cuerpo y aspiro su maravilloso olor mientras el resto nos mira fijamente.

-No vais a acabar nada, Logan.

¿Logan? ¿Así es como se llama el rubio? Vaya, esto sí que no me lo esperaba. Pensé que se llamaría Ralph o Ben.

-¿Ah, no? Me gustaría saber por qué. -Logan entrecierra los ojos con una sonrisa falsa en los labios.

-Porque está conmigo. -Contesta Will con la voz ronca por la rabia, a la vez que me aprieta más contra él.

-¿Sólo por eso?

-Ehm... ¿hola? Sigo aquí, aunque no lo creáis. -Suelto molesta mientras me aparto del brazo de Will. -No pienso hacer nada contigo, creí que te quedó claro la última vez.

-Me gustan las chicas difíciles.

-Me importa una mierda lo que te guste. -Contesto cada vez más cabreada.

-Búscate a otra, ella ya está conmigo. -Suelta de pronto Will a mi lado.

Hablan de mí como si fuese una chica más para su colección y, sinceramente, me duele que él me siga tratando así. Le miro asombrada y, una vez más, decepcionada y aprieto los labios para contenerme.

-Que os jodan a todos. -Digo, antes de salir corriendo hacia la puerta por la que hace unos minutos salí con Will.

Entro al bar sin que Will ni nadie me frene y me duele la verdad de la reacción. Tenía la ligera sospecha de que él me cogería antes de llegar a la puerta y haría cualquier cosa para arreglar la situación, pero sigo siendo una ingenua. Atravieso el bar hacia la barra y veo que los chicos siguen en el mismo sitio, todos excepto Scott. Antes de llegar hasta ellos cruzo una mirada con Charles y recuerdo que las cosas no están bien con él ahora mismo, así que me giro sobre mis talones y camino torpemente hasta la salida.

Anhelo IncontrolableWhere stories live. Discover now