ULTIMO CAP...

1K 34 8
                                    

 Paré el coche a un lado de la carretera, al pie de una colina

Oops! Questa immagine non segue le nostre linee guida sui contenuti. Per continuare la pubblicazione, provare a rimuoverlo o caricare un altro.

 Paré el coche a un lado de la carretera, al pie de una colina. Yo me bajé del coche y Anahi me siguió algo confundida.
-Ya hemos llegado. –Dije satisfecha.
-Dul.. aquí no hay nada, sólo una carretera abandonada y mucha hierba.. nada más! –Dijo ella extrañada como si no me diera cuenta de donde estábamos. Yo me reí.
-Ya lo sé tontita, ahora tenemos que andar un poco. –Dije dirigiéndome al maletero del coche y sacando dos maletas, le di la menos pesada a ella.
-Sígueme mi amor. –Dije comenzando a andar por un camino hacia arriba de la colina.
Anahi aligeró el paso y se puso a mi lado. Yo le cogí de la mano y seguimos por el camino.
Cuando llegamos arriba, Anahi se quedó maravillada con lo que veía. Desde ahí se podía ver todo L.A en miniatura, y si mirabas al lado contrario, una pequeña casa campestre.
-Cómo.. cómo has descubierto esto Dul?? -Dijo ella sonriendo feliz.
-Aquí me traía mi padre cuando yo era pequeña y queríamos alejarnos de toda la locura de L.A y estar juntos.. él lo llamaba Never Land, aquí he pasado uno de los mejores momentos de mi vida, y pensé en seguir agregándole momentos perfectos.. contigo.
-Muchas gracias Dul.. todo esto es hermoso.. te amo muchísimo.
-Yo también te amo mi amor. Bueno, entramos?
-Claro!
Ambas nos dirigimos hacia el porche de la casita. Cogí la llave que se encontraba debajo de una tabla suelta y abrí la puerta.
La casa no era muy grande, sólo un pequeño salón con una chimenea y un sofá, una cocina americana, un baño y una sola habitación.
-Está un poco sucia.. hace tiempo que nadie viene aquí..
-No pasa nada, si empezamos ahora, por la noche ya estará todo limpio. Tienes escobas y trapos?
-Si, están en el baño, por ahí. –Dije señalando hacia la izquierda de la habitación.
-Muy bien.
Anahi quiso ir para coger lo necesario, pero antes de que se fuera la cogí del brazo.
-Ey por qué tan ligera? –Dije acercándola a mi y cogiéndola de la cintura y pegándola a mí. Ella sonrió y puso sus brazos alrededor de mi cuello.
Las dos nos sonreímos, no hizo falta decir nada, nos besamos con pasión, nuestras lenguas se acariciaban y se fundían en una sola, cuando nos separamos pegamos nuestras frentes.
-No te imaginas cuánto te amo Dul.. me haces la mujer más feliz del mundo..
-Yo solo vivo para hacerte feliz mi amor.. todo lo que haga es poco para lo que quisiera.. mi único objetivo en esta vida es sacarte una sonrisa todos los días.. te amo muchísimo Anahi.
Sin decir más nos abrazamos por unos minutos, sintiéndonos la una a la otra, sin preocuparnos por nada más que nuestro amor.
Nos separamos y nos dimos un pequeño beso, luego nos pusimos a limpiar toda la casa.
Llegó la noche y las dos nos encontrábamos tiradas en el sofá, muertas del cansancio, pero con toda la casa limpia.
-Quien iba a decir que Dulce Saviñón cogería una escoba alguna vez eh.. –Dijo Anahi haciendo broma.
-Pues si.. pero no me importa cogerla si es por ti..
-Ohh.. te amo muchísimo bebe
-Te amo preciosa..
Como cada una estaba echada a un lado del sofá, me levanté y me recosté sobre ella. Anahi me envolvió en sus brazos y yo empecé a besarla intensamente. En pocos segundos nuestra ropa iba desapareciendo. Mis manos vagaban por su cuerpo, sentía su piel caliente en la yema de mis dedos y sus besos en mi cuello. Con mi lengua recorrí desde su oreja hasta el valle de sus senos. Con suavidad le aparté el sujetador, y con mi boca me adueñé de su pezón. Sin parar de lamerlo le quité el sujetador completamente y con mi mano acariciaba el seno que quedaba libre. Ella cogía mi cabeza e intentaba acercarla más a ella, movía su cuerpo fruto de su excitación y pequeños gemidos se escapaban de sus labios.
Cuando ya me había quedado satisfecha de sus senos, con mis besos seguí bajando por su cuerpo. Llegué a su centro y suavemente le quité su tanga, lo tiré a un lado y su cuerpo quedó totalmente libre para mí. Poco a poco me acerqué a ella, fascinada con la perfecta visión que tenía en ese momento. Dejé huella de mis besos en su pubis y con mi boca recorrí todo su centro, mi lengua buscaba el punto donde le daba mayor placer, y no tardó en encontrarlo. Primero lento y suave, después rápido y fuerte, mi lengua parecía que tenía vida propia y hacía lo que quería con su clítoris. Con dos dedos la penetré cuidadosamente mientras no paraba de lamerla. Los gritos de Anahi cada vez subían más de volumen y con ellos la fuerza de mis penetraciones. Cuando sentí que estaba llegando al orgasmo paré repentinamente y me aparté de ella, cosa que hizo que Anahi se quejara. Me volví a recostar encima de ella y la besé.
-Quiero que lleguemos juntas mi amor.. –Dije cuando nos separamos. Ella me sonrió y bajó hasta mi centro, que ya se encontraba bastante mojado.
Yo hice lo mismo y empezamos a mover nuestros dedos al mismo ritmo, nuestros cuerpos estaban empapados en sudor y pegados el uno al otro mientras nuestros dedos no dejaban de moverse en el interior de la otra. Minutos después la intensidad pudo más y llegamos a un gran orgasmo.
Yo quedé recostada sobre ella sin poder moverme por el cansancio. Cuando nuestro ritmo cardíaco volvió a ser normal y nuestras respiraciones se calmaron, nos dimos la vuelta y yo quedé debajo de ella y así seguimos abrazadas.
-Dul
-Mmm? –Dije con los ojos cerrados, a punto de dormirme.
-Gracias..
-Gracias por qué mi amor? –Dije abriendo los ojos y mirándola.
-Por.. por todo.. gracias por esperarme, por luchar por mí, por estar conmigo cuando más lo necesité, por no rendirte nunca..
-No tienes que darme las gracias por nada mi amor.. yo siempre te he amado, y desde que éramos unas niñas siempre supe que sería así siempre..
-Dul.. tú me has enseñado tantas cosas.. me has enseñado a ser valiente, a superarme a mí misma y a no tener miedo de amar.. creo que me faltará vida para demostrarte cuanto te amo..
-Pues tenemos toda la vida para demostrárnoslo, porque no te voy a dejar escapar nunca más..
-Espero que mis padres algún día nos acepten y nos quieran igual que antes..
-Lo harán, estoy segura. Ha sido algo muy fuerte para ellos todo esto y yo te prometo que no les guardo ningún rencor. Pero estoy totalmente segura de que algún día nos aceptarán, puede que no sea hoy ni mañana, ni siquiera dentro de un año, eso depende de ellos, pero estate tranquila, ellos te quieren y nos aceptarán.
-A ti también te quieren Dul..
-Si, colgada de un pino.. –Dije riéndome.
-Jaja no seas payasa que sabes que si lo hacen.
-Está bien, está bien.. me pueden querer algo..
Nos abrazamos muy muy fuerte y así dejamos que pasaran las horas...
-Te amo Dulce.
-Te amo Anahi.  

MIEDO AMAR !!PORTIÑON¡¡ ♥Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora