Prologo.

6.7K 314 21
                                    

La vida y la muerte, algo a lo que todos aman y a la vez tienen miedo. ¿Qué se puede hacer? ¿Quererla? ¿Odiarla? Nosotros los humanos, no sabemos cómo interpretar estas emociones; pero, los dioses son los únicos que pueden entendernos a nosotros. Tanto el dios Vida como Muerte, se conocieron hace ya muchos millones de siglos; pero hay algo que los une perfectamente: son opuestos. Y los opuestos siempre se atraen...

Vida, hace ya varios años pasados odiaba que Muerte destruyera todo aquello por lo que tanto había creado y amado; en cambio Muerte, no lo veía así. Él amaba enteramente el trabajo de Vida, crearla, amarla, ver como crecían y se enamoraban; era algo que enteramente a él le fascinaban. Únicamente que el sentía algo que probablemente Amor lo veía en sus ojos, el está enamorado de Vida; todos los días quería verlo y ver que es feliz. Y por otro lado, Vida también estaba enamorado y temía decirle sus verdaderos sentimientos; ya que no quería salir lastimado.

Siempre se veían con ojos de amor, siempre se sonreía uno al otro, siempre querían estar uno cerca del otro; así es, los opuestos se atraen. Pero así como se atrae, así hay personas que detestan ver a esas personas juntas; El Destructor y El Creador de la tierra, no querían que ambos estuvieran juntos. ¿Qué hacer en este caso? Sencillo, hacer que se odiasen uno al otro.

Crearon las plagas y así las epidemias, y por supuesto el que tuvo la culpa de todo era Muerte. ¿Por qué? Él es el único que puede mandar las almas a Ithis y a Nim, así que solamente él podía hacer eso. Causando desacuerdo, los otros dioses comenzaron a odiar a Muerte y el único que seguía a su lado era Vida; todos los días iba a visitarle a su casa y convivir con ellos, creando así un vínculo perfecto y un tanto más cariñosos.

Muerte, quería saber si en verdad el tenía la culpa y la tendría que averiguar. Con tristeza, una noche en la cual Vida se había quedado a su lado, salió de su casa para ir a buscar la verdad. Dejando así una nota, pidiendo perdón y suplicando que algún día le perdonara si volvía a verlo; beso su cabeza y colgándose una bufanda, salió de la casa así emprendiendo un viaje hacia la verdad. Vida, perdió su sentido de existencia; había perdido al amor de su vida por un capricho de los otros dioses. Y así, el destructor y el creador sonrieron ante la tempestad de vida y la soledad de Muerte; por fin habían logrado su cometido.

"-Te encontrare. –menciono Vida en lágrimas viendo una vez más la luna- Y por fin te diré todo lo que siento, Muerte... -se apoyó en el marco de la ventana una vez más- por favor... regresa a mí."

"-Lo siento, Vida. –Menciono Muerte sentado debajo del árbol- Pero, aunque te amé no puedo estar contigo hasta saber la verdad... por favor, -lagrimeo, escondiendo la cara en las piernas- perdóname. Yo... yo te amo."

"-Si se vuelven a reencontrar, tu tendrás la culpa Amor –menciono Sabiduría un tanto molesto- Ellos no pueden estar juntos, Muerte acabara por destruir todos y a nosotros también"

"-Aunque la suerte no este de nuestro lado por el momento, hay alguien más que si la tiene. –menciono Fortuna viendo a su amado cuervo- Por el momento no hay que preocuparnos por Muerte, Vida va a hacer una estupidez"

Y aunque sabes que el amor siempre va a triunfar, siempre va a haber alguien que interfiera en estas decisiones y también, siempre hay alguien que quiere la guerra. Acaso, ¿Algún día este mal se acabara?

Dreams between the rainWhere stories live. Discover now