Capítulo 37: No me abandones tu también.

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- Liam conduce más despacio, por favor. - le dije porque cada vez aumentaba más la velocidad.

- Ya llegamos, tranquila. - me dijo poniendo una mano en la pierna y mirándome preocupado.

En 5 minutos llegamos a un centro de salud dónde me examinaron. Estuvieron hablando con Liam un rato pero yo no entendían que decían. La cabeza me mataba y me costaba estar despierta. Después de un rato luchando por mantenerme consciente, Liam me cogió de la mano y volvimos a salir rumbo al coche.

- ¿Que ha pasado?¿qué te han dicho?

- No puedes viajar en tu estado. Pasaremos la noche aquí.

- ¿QUÉ?¿PERO Y LOS DEMÁS?¿DÓNDE VAMOS A DORMIR?

- Tranquilízate, por favor. Vamos a dormir en un hotel al que vamos ahora. En cuanto estemos llamo a los demás. Tienes mucho cansancio y te vas a marear como volvamos a Miami, por eso es mejor volver después de que hayas descansado. - me dijo y notaba la preocupación en su voz.

Me costaba moverme, pero hice un esfuerzo y acaricié su mejilla con mi mano. Él me miró.

- Estoy bien, tranquilo - le dije sonriendo. Él respiró hondo y volvió su vista a la carretera.

Al cabo de unos minutos en el coche ya empezaba a marearme, pero para mi suerte Liam aparcó el coche y se bajó para ayudarme a salir. Me costaba andar así que me cogió y cogió nuestras mochilas. Fuimos adentro del hotel y me dejó sentada en un sofá con las cosas mientras él pedía la habitación y la pagaba. Luego me cogió de la mano y tiró de mi hasta el ascensor.

Estaba demasiado cansada para andar, pero aún así hice un esfuerzo para ir hasta la habitación. Era muy bonita. Me tiré en la cama y Liam se reía.

- ¿Te vas a dormir así?¿Con toda la ropa y todo? - decía riéndose.

- No me he traído otra.

- Yo sí. Ven - me dijo tirando de mi para que me pusiese de pie. - levanta los brazos - dijo agarrando el bajo de mi camiseta.

- Un momento.. ¿me vas a desvestir tu? - le dije con los ojos cerrados pero frunciendo el ceño.

- Vamos Brooke, ya lo hice una vez, confía en mi.

Subí los brazos y él me sacó la camiseta, me desabrochó los pantalones.

- Creo que soy el chico con más suerte del mundo ahora mismo - me dijo y yo me reí.

Me sacó los pantalones y me dijo que subiera los brazos. Lo hice y al momento tenía una camiseta suya, que me quedaba larga y me gustaba.

- Estas preciosa así, siéntate.

Me senté y me desmaquilló. Me estaba cuidando mucho y mañana se lo agradecería.

- Ya puedes dormir cariño - me dijo dándome un beso en la frente.

- ¿Tu no duermes conmigo?

- Ahora me acuesto, tengo que llamar a los otros.

Yo me tumbé en la cama y oía cada vez más lejano cómo Liam le contaba a Emily lo que nos había pasado, hasta que me quedé dormida.

Me desperté y vi que Liam no estaba en la habitación. Todo estaba oscuro y no se cuánto tiempo he estado durmiendo. Me senté en la cama y me puse a pensar. No esperé mucho porque Liam entró 5 minutos después. Al verme sentada descorrió las cortinas y sonrió.

- Buenos días preciosa.

- Buenos días, ¿cuánto he dormido?.

- Muchas horas, son las 2 pm - yo abrí los ojos de par en par. ¿Tan tarde era? - necesitabas dormir, Brooke.

La Cara OcultaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora