Tonos de frío

Capítulo 6.− Verdad a simple vista

Bueno, los personajes no me pertenecen, si no a su creador Masashi Kishimoto

Capítulo 6.− Verdad a simple vista

Podía decir que había perdido por completo el control sobre sí mismo. Hasta el punto de no saber si lo que hacía estaba bien o mal. Pero él no era experto en sentimientos, nunca lo había sido y no iba a comenzar en esos momentos.

La guerra estaba a punto de estallar, la fricción entre las aldeas cada vez era mayor, y la insistencia de Naruto en desmantelarlos no hacía más que incrementar la presión que todos sus hermanos ya sentían. Una que no terminaría en nada bueno si no era capaz de ponerle un alto a Naruto, eso no era una opción. Era prácticamente una obligación.

Pero ahora, el mismo rubio había terminado por echarse a la hoguera él solo. Solo tenía que arrojar el cerillo.

De nuevo alejo esa punzada de culpabilidad que sentía por los años que convivio con él, pero si Naruto no había retrocedido, no sería él quien lo haría.

La primera pieza ya había sido movida, había sido el rubio quien empezó el juego al mandar un peón en lugar de tomarse las cosas en serio. Eso le había costado una buena alianza con la aldea de la Nube, que él fue capaz de aprovechar rápidamente. Pero esa alianza tenía un costo que ahora debía de cumplir.

Le habían dado una reina a la cual proteger, y él, ahora debía encargarse de que Hinata aceptara ser su torre a como diera lugar. Esa no era una partida que pudiera perder. Suspiro con frustración viendo una vez más los documentos. Naruto se había encargado de acorralar a Hinata. Él rubio le había regalado prácticamente a su reina y a su torre, mismos que él ahora convertiría en torre y caballo respectivamente.

Le hubiese gustado que el rubio fuera más consciente de la situación, de que debían apoyarse el uno al otro, pero el pasado sería siempre un tema que los perseguiría.

Suspiro y se dejó caer sobre la silla. Se acercaba el momento de hacer su movimiento, uno que calculó muy bien y que no podía fallar.

Primero fue la reacción del clan Hyuga, que le sorprendió levemente hasta que analizó la situación desde otro punto de vista. Aunque habían fallado al contemplar a Hinata como un miembro más del clan, ella no se comportaba como una Hyuga. Ahora vendría la reacción de la aldea, ni buena ni mala, podía suponer. Hinata no era el tipo de mujer que revelaría los secretos del Hokage, y Naruto no arriesgaría su puesto haciendo publica su relación con Sakura tan pronto.

En ese limbo, estaría también la reacción de la generación de los 9.

El clan Nara y Akimichi no irían contra el Hokage, Naruto ya se había encargado de controlar al clan Hyuga e Inozuka, incluido el equipo Gai. Sakura e Ino eran simplemente inseparables. El clan Aburame le daría su apoyo a Hinata, estaba seguro, pero eso también comprometería su posición en la aldea, y esperaba que Hinata tomara eso en cuenta al momento de hacer sus elecciones. No se arriesgaría a poner en peligro a sus amigos, no era ese tipo de persona.

Y estaba Sasuke Uchiha, que ya había hecho su jugada. El primer movimiento que puso en marcha toda la partida, y que esperaba, le diera la victoria.

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Su mano se movió de manera instintiva hacia la mejilla de la mujer, que solo atino a ponerse aún más roja de la que ya estaba y entreabrió los labios levemente, enviando todo su aliento a las mejillas del chico. Aunque ella solo trataba de controlar su alocado corazón que parecía querer salir de su pecho. Apretó sin querer su agarre en los brazos del moreno y empezó a cerrar los ojos al tiempo que el moreno bajaba la cabeza hacia ella.