Capítulo 15: Ataque.

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Luchar contra Mettaton fue más sencillo de lo que pensaba, el ritmo de la canción de fondo la motivaba, incluso hasta Chara quien hasta ahora estuvo distante ayudó.
Frisk supuso que ser una adolescente cautivó al público.

– ¡Oh querida! –Mettaton estaba completo, piernas, cabeza, torso, brazos y piernas, la lucha fue más competencia de baile, todos los monstruos que observaban, una gran cantidad, aplaudían.– ¡Maravillosa! ¡Maravillosa! Al final, puede que sea mejor no capturarte, no creo que haya tan hermoso público como este.

Estiró su brazo mostrando a todos, Frisk estaba cansada, más de lo normal, jadeaba y su corazón se oprimía lentamente, Chara no se preocupó.
Mettaton estaba tan ocupado con su momento sentimental que no lo notó hasta el final.

– Hey, darling... ¿Estás bien? –Mettaton sólo pudo saber por expectantes que miraban aterrorizados atrás de él.

Frisk estaba teniendo un ataque.

La humana estaba sintiendo punzadas por todo su cuerpo, le dolía la cabeza, sus brazos y piernas no las sentía más si las movía el ardor se iba al pecho.
Sus ojos adoloridos sólo podían ver brillos extraños, mientras que el sudor empapó toda su ropa, se desmayó.

❇✴❇✴❇✴❇✴❇

¿Por qué no moría de una vez?
Está vez no despertó en el sofá de los hermanos esqueletos, si no en el mismísimo suelo oscuro y... Peculiar.

No había nada a su alrededor, nada, más que oscuridad y ella misma, llamó diferentes nombres, Mettaton, Papyrus, Undyne, Alphys, Sans... Y Chara.
Esta última apareció apenas la llamó.

– ¿C-Chara? –Frisk estaba de pie, eso creyó, pero no había sensación de gravedad pero había suelo.

La joven llevaba un collar con un corazón tapizado como joya, sus manos yacían a su espalda.

Ha sido difícil lograr esto, Frisk. –Comentó Chara, Frisk no podía moverse desde que habló con su dulce e infantil voz.

– ¿D-De qué hablas?

Me cuesta entender la situación tanto como a ti, pero necesito hablar contigo, y acá es el mejor lugar.

– ¿Dónde estamos?

En nuestra mente. –Una pequeña sonrisa macabra se curvó en los labios de la demonio.

– ¿Qué me pasó allá?

Eso fue mi culpa, no pienses que fue por otra cosa. –Chara quería ir al grano.– Debemos cambiar de planes, urgentes, Frisk.

– ¿Cuáles son?

Tú recuerdas lo que soñaste ese día ¿No es así? –Asintió como pudo.– Pues haremos lo mismo, dame tu cuerpo, tú no podrás lograrlo, allá afuera, en los pasillos del rey... El comediante estará esperando para atacarte, ¡JUSTO ACÁ!

La oscuridad desvaneció, estaban donde la demonio dijo, cuando sucedió ésta se volvió nuevamente como un ser fantasmal.

– Él no es malo. –Frisk miraba por todas partes, él no aparecía.

– ¡Se hace pasar por bueno! Sigue furioso por nuestros actos, no dejará que vivas, nunca.

– ¿No hay otra manera, Chara?

No, no la hay.

Chara ya estaba lo suficiente cerca para poder tocarla, tomó ambos hombros.

Entrégame tu ser, es por nuestro bien, teniendo a los demás creyendo que somos sus amigos no vendrán para ayudar, sólo estaremos contra él y podremos irnos sin otra herida.

– Y-Yo no quiero irme.

¡PERO ELLOS SÍ QUIEREN IRSE, FRISK! SÓLO DESEAN TU ESTÚPIDA ALMA. ¡DÁMELA! ¡YO TE VOY A PROTEGER!

El rostro de Chara se volvió tenebroso, Frisk temió ante esto, lágrimas se colaron en sus ojos, quería creerle, no quería odiarla, pero la empujó.

– NO CHARA. –Gritó, no importaba si alguien la miraba, Chara la iba a poseer si se quedaba como sumisa.– POR FAVOR... ¡Hay otras maneras! P-Podemos seguir perdonando.

– NO SEAS IDIOTA, “AMIGA”, ELLOS APROVECHAN TU BUENA VOLUNTAD, VAMOS, NO HAGAS EL TRABAJO MÁS DIFÍCIL.

– BASTA.

Frisk empujó a la ser quien lastimaba sus hombros, quiso huir pero ella era demonio, no podía vencerle.

Tú lo pediste.

La oscuridad no duró mucho, Chara desapareció y atacó su cabeza, el dolor aumentó tanto que ella tuvo que arrodillarse, tomó su cráneo desde ambos laterales, jadeante y pidiendo ayuda.
Alzó la vista al escuchar unos pasos, y al ver quien era su llanto aumentó, estaba usando todas sus fuerzas para resistir a la maldad de Chara.
Sans, el llegado en esos pasillos no entendía al principio la escena, una joven en el suelo llorando y agonizando, nadie comprendería al principio.

Pero no por mucho tiempo, el esqueleto gruñó, murmuró unas palabras y su ojo se iluminó de un azul brillante, varios huesos aparecieron debajo de Frisk, atravesando su cuerpo en milisegundos.

El corazón de Frisk se partió.

Heya, Sans. • Frans •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora