¿Que Paso Con La Armonia??

Capitulo 6: una visita

- Discord, ¿A donde rayos crees que vas?-dijo molesto el dragón al percatarse que lo dejaba solo con un lío tremendo

-A un lugar lejos de aquí y cerca de allá- contesto sin mucho interés el draconecus.

Spike lo miro con desconfianza lo que hizo suspirar al híbrido.

-no es nada malo, te lo prometo- dijo antes de chasquear los dedos y desaparecer de la vista.

Casa de... :

Era de tarde y el draconecus se dirigía a una cabaña el las afueras del pueblo.

"Toc,toc"

-Hola fFlutershy, soy yo Discord, te traigo comida y semillas para tus animales- dijo desde la puerta esperando que su amiga le abriera.

Y así fue, la puerta se abrió dejando ver a una pegaso de piel amarilla con la crin larga y de color rosa pálido la cual tapaba la mitad de su cara.

-Hola Discord, muchas gracias - dijo en voz baja y tomo la cesta que le traía,la pegaso se disponía a cerrar pero Discord la detuvo

-espera, este... verás no he comido a si que me preguntaba si podríamos... ¿comer juntos?después de todo ya casi no nos vemos - propuso el draconecus mientras la veía esperanzado.

Pero obtuvo una negación rotunda.

-lo siento, pero no tengo hambre

-ohh en-entiendo–la voz de Discord denotaba su tristeza –es solo que ya compre la comida, supongo que comeré solo nuevamente.

Puede que hayan pasado muchas cosas, pero nunca se puede cambiar lo que uno es, y para la pegaso era sumamente grosero rechazar de tal manera a quien por mas de 1 año le había ayudado. Así que termino por acceder.

-esta bien, pero que sea una comida rápida, por favor- dijo mientras suspiraba.

Al escuchar eso, el draconecus se animó al instante y sonrió ampliamente.

–Muy bien, sus deseos son órdenes madam– Discord hizo un movimiento con los dedos y automáticamente de la canasta salió la comida con pies ya una pequeña banda para corredores, toda la comida en hilera corrió hacia la mesa.

Flutershy no pudo evitar soltar una ligera carcajada ante tal broma lo cual puso feliz al draconecus puesto que hace mucho no oía su risa, esa risa que le gustaba tanto.

Mientras en el Tren real:

-Luna,¿esta todo bien?- Preguntó Celestia a su hermana al ver el disgusto en su rostro.

-Sí- contesta Luna cortante.

-Ya deberías dejar de preguntarle cosas a esa amargada- opina Cadence mientras rueda los ojos.

Ante este comentario Luna gruñe.

-Pero sí mira quién lo dice...

–¡basta! ¡calmense las dos!- grita Celestia antes de que empezarán a discutir de nuevo.

Cadence y Luna habían agarrado un tipo de reproche entre sí, por un lado Luna le molestaba que Cadence no se hiciera cargo de todas las responsabilidades que conlleva ser princesa, le parecía terrible que solo se deprimiera día tras día puesto que ella había sufrido más y nunca dejó sus responsabilidades de lado (o al menos así lo veía la princesa de la noche).

Por otro lado Cadence tenía los ánimos por los suelos, no conciliaba el sueño y siempre la atormentaban pesadillas así que empezó a creer que su tía Luna lo estaba haciendo a propósito para reclamarle su actitud. Pero ¿Qué actitud se supone que debería de tomar si de un día para otro perdió al amor de su vida y a todo su imperio? Ella se sentía la más idiota, inservible y culpable