Capítulo 8

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Bestia despertó en la mañana y pensó en como podría averiguar si Nicolás sería traspasado al sector C y en caso de ser así como podría evitar que esto sucediera, y también le preocupaba Naiko; era muy probable que el personal estuviera haciendole algo y necesitaba averiguarlo, para poder ayudar al menor y ver que le esperaba al moreno si lo cambiaban.

Ahora si nos vamos al sector A, podremos apreciar una escena bastante maraca a decir verdad, y es que  Edgar y Naiko estaban tan abrazados y tenían sus piernas enredadas que cualquier persona que los viera pensaría que son pareja; la primera persona en despertar fue Jaime quien al buscar a su compañero de habitación se dio cuenta en la manera que se encontraba con el pequeño, y por supuesto que aprovecharía esto para poder molestar al par de fletos que se encontraban en la cama del lado. Jaime se arregló y se dirigió a la habitación de los adictos para no tocar violín y para ir y delatar a los hombres que se veían muy a gusto abrazados.

El siguiente en despertar fue Edgar, quien no quiso separarse y acercó un poco más a su amigo; después de una horrible noche haber dormido con Naiko lo había mantenido calmado y relajado y inexplicablemente muy a gusto. Estaba cara a cara con el menor y se puso a apreciar los rasgos de este, como eran sus pestañas, su nariz y sus delgados y bastante secos labios, sus mejillas bastante adelgazadas y comenzó a acariciar su espalda, sentía como los huesos se notaban, sus costillas sobresalían y el mayor sabía que eso no era normal. Levantó un poco la polera del menor para encontrarse con el hundido vientre del pequeño y observó unos cuantos moretones en su piel, delicadamente bajó la polera y volvió a abrazar fuertemente al menor. No sabía que le habrían hecho o dicho para que llegara a tal punto pero no le agradaba para nada. Cerró sus ojos y esperó a que el menor despertara, tenía que hablar con él.

Sin querer Edgar se quedó dormido, la paz que sentía al estar descansando con el pequeño lo obligó a dormirse y para suerte de Naiko, cuando el despertó Edgar seguía en el mundo de los sueños, Naiko se escabulló de los brazos de Edgar y volvió a su habitación con miedo, tenía claro que no podía escapar para siempre de los problemas.

Cuando bajaba las escaleras escuchó las voces de sus agresores quienes hacían una ronda o algo así

-Mañana transferiremos a Nicolás Gaule a el sector C, será una nueva presa ¿Que quieres hacerle?-

-No sé, deberíamos castigarlo por lo que hizo su amiguito escapándose de su castigo, podría ser nuestro nuevo juguete-

-Podemos conseguir algo de diversión de el, por las noches, ya sabes- ambos hombres que conversaban rieron y Naiko sin pensar ni nada bajó para encontrarse con ellos y enfrentarlos-


Naiko conocía a Nicolás desde pequeño, el moreno siempre lo había protegido y querido, se sentía en deuda; no sabía que había pasado desde que sus caminos se separaron pero probablemente fue algo grave y por algo se encontraba en Whittingham el día de hoy. Naiko respiró y se encontró frente a frente con sus estúpidos agresores.

-Miren quien decidió aparecerse- rieron ambos-

-Escuchen bien- dijo algo enojado Naiko- pueden hacerme lo que quieran, pueden golpearme, maltratarme, dejarme inconsciente o hasta matarme pero por favor, no le hagan nada a él-rogó el pequeño-

-¿Por qué deberíamos aceptar eso?

-No le diré a nadie- dijo Naiko- podrán golpearme como quieran y cuando quieran pero no lo dañen a el

Ambos tipos pensaron en la propuesta del menor, a decir verdad les sonó muy tentadora pero no era suficiente

-No- respondió el de voz grave quien era levemente más alto que su compañero-

-Algo deben querer-suplicó Naiko- algo para que lo dejen a él en paz

Ambos se miraron y como si pudieran hablar telepáticamente cada uno tomó a el menor de un lado y lo llevaron a una habitación; tendrían una charla y si Naiko tenía suerte podría salvar a su amigo moreno de los maltratos y abusos del sector C

Welcome To Hell- Jainico-Ednaiko-BeshohDonde viven las historias. Descúbrelo ahora