Diecisiete

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Pov. Woozi

Despierto y veo la hora, me sorprendí ya que eran más de las diez de la mañana, me levanté rápidamente y salí de mi habitación, miraba por todos lados y no había nadie así que eso quiere decir que todos se fueron y nadie me despertó. Me fui a lavar mi cara rápido, me cambié lo más rápido posible y mientras salía de la casa para tomar un taxi llamé a Jeonghan, quien me dice el lugar en donde están y me marchó a la velocidad que el taxi brindaba. Llegué al programa de la radio mientras veía la cara molesta de todos y la de mi mánager.

-Ven, ¡De inmediato!- corrí hasta donde estaba el mánager.

-Lo siento, lo siento, lo siento, lo siento.- repetía mientras hacía una leve reverencia.

-¿Ves la hora de tu llegada?- suspiró. -Esta es la última sesión así que da igual que vayas con ellos...-

-Lo lamento, no volverá a suceder.-

-Eso espero, porque sino, las consecuencias no serán muy buena.- dicho esto, se aleja de mí sin decir nada más y aún más enojado.

Quedé observando allí a mis compañeros, ya veo que este no sería un buen día y no sé si alguien intentó despertarme, porque no recuerdo nada. Se reían y se notaba que se estaban divirtiendo, faltaba poco para que terminara mientras yo seguía observando desde lejos, una vez que terminaron se despidieron y salían con una sonrisa ignorandome por completo, caminaba detrás de ellos y subí último al furgón mientras que el mánager, antes de manejar, nos dio las indicaciones de lo que ahora debíamos de hacer y que yo me añada junto a los chicos sin problema.

Así fue el día, entre sesiones de fotos y programas, ya era tarde y nos tocaba ensayar, nos instalamos en la sala de ensayos mientras Soon Young nos trataba de guiar, aunque las veces en que nuestros pasos iban juntos él se alejaba y yo bajaba mi mirada tratando de no mostrar mi tristeza porque aunque sé que soy el culpable de todo, me dolía que todos me hiciesen la ley del hielo, me sentía sólo y sin nadie que me entienda. Los ensayos terminaron y nos fuimos a la casa, al llegar, Mingyu comenzó a cocinar y todos hablaban gustosamente mientras que yo me sentía apartado, miré a Soon Young que hablaba con Seokmin y Seungkwan, lo veía un poco serio mientras que los otros dos reían de quizás las tonterías que dicen, siento miedo, mucho miedo, sé que esto no será fácil y que he perdido algo valioso para mí. Y pensar que me costó reconocer que lo amaba y que sentía tantos celos por So Jong, pero, ¿Quién puede entenderme? No hacía mucho tiempo que tuve una relación con Seungcheol e incluso es la primera persona por la que me había enamorado tanto, pero luego, las actitudes de Soon Young me enamoraron, confundiendo mi cabeza por completo y terminando por hacer algo tan estúpido que llegó al punto en que Soon Young tuvo que justo observar, provocando su lejanía, y yo, soy un pobre imbécil que no supo valorar lo que tenía y que ya es tarde para pedir perdón, pedir que me ame, porque... porque soy un estúpido.

Levanto mi mirada y veo que todos ya están cenando, ¿Se olvidaron de mí? ¿No quieren que yo este con ellos? Me levanto del sofá y con mi mano tomo mi abrigo para luego salir de la casa, llegó hasta un parque cercano y me siento en una banca a llorar, siento mucho arrepentimiento y dolor, me siento una basura que no vale la pena amar...

-Miren quién anda por aquí.- levanto mi mirada para encontrarme con la estúpida sonrisa del estúpido de So Jong.

-Déjame tranquilo.-

-Ay... pobre enano, Soon Young se dio cuenta de que en realidad no lo amas.-

-¡SI LO AMO!- grité enojado, odio su maldita voz.

-Claro...- rió irónico. -Tanto lo amas que besaste a Seungcheol y casi van más allá que simples besos.-

-¡CALLATE! Tú no lo entenderias.-

Mírame a mí -- HoZi/SoonHoon Where stories live. Discover now