11.

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Cuando llegó la mañana, Jeongguk y Jimin escuchaban un alboroto horrible en la parte de adelante, por lo que suponían que provenía de la oficina del Jefe Min.

Jeongguk esperó a que Jimin se estirara entre sus brazos antes de soltarlo, de lo contrario el pelirrojo se hubiese caído.

Los ruidos eran muchos, se podía distinguir una voz grave, pero no mucho, la voz de YoonGi y otras dos personas más.

—¿Deberíamos ir a ver?—preguntó el oficial mientras que Jimin bajaba de su regazo.

—Si es que tanto que gusta meter tu gran nariz en asuntos que no son tuyos, vamos.—respondió el pelirrojo divertido.

Jeon le miró como animal herido y trató de defenderse;

—Puedo hacer otras cosas con mi nariz además de meterla en otros temas.

—Oh, ¿En serio? Entonces dime qué es lo que puedes hacer.

—Bueno... Tengo buen olfato.

Jimin, con esa simple razón, ya estaba que moría de la risa.

—¡Dime otra!—trató de sonar asombrado.

—También puedo hacer burbujitas en las gaseosas con una pajita...

Jimin hizo una pequeña mueca de asco al escuchar aquello y golpeó el hombro del azabache con suavidad.

—¡Qué asco!

—Creí que dirías algo como... "Qué asombroso", Jin hyung decía eso cuando lo hacía.

—Qué asombroso.

—Lo sé.—dijo el azabache con aires de grandeza y una sonrisa.

Jimin rodó los ojos y luego se aferró al brazo izquierdo del policía.
Ambos caminaron así, hasta llegar a la oficina del mayor y encontrarse con la escena más impactante.

No, no escenas cochinas.

Taehyung estaba ahí, vestido de mujer.

Misteriosamente nadie se dió cuenta de eso, pues estaban atentos tratando de calmar a su mejor amigo diciéndole "señora".

Pero Jimin sí que se dió cuenta.

Porque Taehyung es el único que cuando se pone su peluca rubia, se pinta un lunar cerca del labio.

—¿¡Saben lo que cuesta pagar todo eso!? ¡Qué les hizo mi pobre criaturita! —gritaba su mejor amigo, que cuando se dió cuenta de la presencia de Jimin, corrió a abrazarle como una madre que nunca en la vida vió a su hijo. —¡Jiminie bebé!

Todos los demás en la sala miraban al pelirrojo con asombro. Todas las bocas formaban una "o".

—Señora usted no...

El Jefe Min fué acercándose lentamente a ellos.

...pero antes de poder tocarle el hombro al travestido, Taehyung se adelantó a golpearle la mano.

—Sal de aquí bicho escuálido, que te saco la mierda a golpes. —chilló el castaño mientras abrazaba protectoramente a su culoncito, dejándolo casi sin oxígeno.

A Jeongguk se le fué cayendo la ficha poco a poco, hasta darse cuenta aquella mujer, en realidad era un hombre.

De hecho, ni siquiera fingía su voz.

Obviamente, la expresión que puso Jeon en ese momento alarmó a sus compañeros.

—¿Jeonggukie, te sientes bien?—preguntó SeokJin, quien había estado metido entre todo el lío junto con Namjoon

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—¿Jeonggukie, te sientes bien?—preguntó SeokJin, quien había estado metido entre todo el lío junto con Namjoon.

Jeongguk asintió ante la pregunta.

El problema era que no estaba bien.

Su padre siempre le dijo que no estaba bien que un hombre se vistiese de mujer, y otras cosas más. Que a veces te iban metiendo lentamente en aquella moda hasta que no hubiera salida alguna, y todo para que otras personas te maltraten justo como a ellos.

En ese caso... ¿El padre-madre de Jimin era de esos tipos? ¿Y si Jimin también se vestía como una mujer?

¡Y zas!

Una imagen salvaje de Jimin vistiendo uniforme de colegiala y bragas se le cruzó por su no-inocente mente, poniéndole duro en cuestion de microsegundos.

Gracias a Dios, su hermoso hyung Don Namjoon se dió cuenta de la roca que tenía entre las piernas y lo llevó al baño, para que ambos se encerrasen ahí.

—Jeonggukie en qué mierda andas pensando, chico...

—Lo siento Hyung, a veces no puedo evitarlo y sólo pasa... Como esas erecciones mañaneras, pero peor.—Jeongguk se dirigió a los lavamanos para mojarse un poco la cara.

Estaba ardiendo, aún no se podía creer la erótica imagen que había creado su mente sobre Jimin travestido.

No, aquél gnomo rojo lo tiene mal, muy mal.

—A mi me pasa cuando pienso en Jinnie.

—Lo sé, te pones algo nervioso cuando estas al lado de Jin hyung y comienzas a mirar tu pajarito con disimulo. Pero yo me entero de todo, Namjoonie.—se encogió de brazos el menor.

El nombrado obviamente se sonrojó al saber que todo este tiempo Jeongguk notaba sus acciones.

—Vamos rápido... Ya no escucho ruidos. —cambió de tema el mayor.

Pero no era tan sólo una excusa, sino que realmente los ruidos habían cesado.

Ya no se escuchaban los griterios de aquella supuesta mujer y no se escuchaba la voz de YoonGi tratando de solucionar la situación. Cosa que los dejó algo preocupados y volvieron a donde estaban anteriormente.

Al llegar, sólo se encontraba Jimin, quien al parecer se quedó esperando a Jeongguk.

—Y-Ya... ¿Ya se acabó?—preguntó el menor, a lo que Jimin asintió como respuesta y le sonrió.

—Síp, podemos volver a nuestro nido, tucancito lindo. —se abrazó a su macho y Jeon trató de caminar así.

Y bueno... Namjoon quedó solito, mirando a su lindo SeokJin que estaba de espaldas frente suyo atendiendo otras cosas...

—Tanta carne y yo en cuaresma...

•••

Hola sucias
Les debia actualización pero ando muy ocupada y cansadota asi ke
Sorry baes
Ya quiero terminar todo chamas

Jeon Police ⇨Kookmin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora