Nuestro Amor (Craig x Tweek - CREEK)

Capitulo 5

La vida de Tweek y Craig pasaba sin por menores; la nueva alcaldesa había resultado una de las mejores personas que le pudo haber ocurrido a ese pueblo, que crecía a grandes pasos. 

Todos los chicos de su grado habían pasado a octavo grado, todos con 13 años.

Era la última de semana de vacaciones, antes de comenzar las clases. El azabache suspiraba pensando, que sería de su 'amigo-novio', pues no lo veía desde hace un mes y apenas hablaban por chat. Los abuelos de Tweek, lo invitaron a pasar sus vacaciones con ellos en la ciudad de Venecia.

(Venecia se me ocurrió de la nada, queda en Italia) 

Craig suspiraba aburrido; se encontraba en su casa cuidando de su hermana menor, ya que sus padres habian salido a cenar por su aniversario de bodas.

- Si tan solo Tweek estuviera - suspiró Craig, para luego sonrojarse y taparse el rostro, al recordar al rubio. ¿Qué era lo que acababa de decir? Su felicidad no dependía del pequeño rubio.

- ¡Craig! - llamó su hermana, Ruby, sacándolo de sus pensamientos.

- ¡Qué quieres!

- Hermanito, dame comida... - 

Craig se levantó del sillón; se dirigió a la cocina, encendió el horno y calentó el alimento que tan desesperadamente pedía su hermana. Sirvió la comida en 2 platos y se dispuso a comer junto a la pequeña. Ruby se dio cuenta de la tranquilidad excesiva de Craig...

- Craig, acaso, ¿extrañas a Tweek? - preguntó con inocencia la pequeña, que ya no era tan pequeña.

- ¿Qué? - la pregunta lo tomó desprevenido - Claro que ¡no! - gritó a su hermana. Esta, que había aprendido igual que su hermano, levantó el dedo medio por el grito que le dió Craig.

- ... Entonce, por qué te ves triste -

Craig solo la vió, sabía el porqué, pero no se lo diría nadie. Asi que solo concluyó dandole un ligero golpe en la frente a su hermana. - Come y vete a dormir - dijo el azabache.

Ruby no hizo caso, y se fue directo al sofá para prender el televisor; Craig no pudo quejarse, pues estaba entretenido lavando los platos usados.

~Ding dong~  

Ruby fue ha abrir rápido, pues no quería perderse nada de su serie. Para entonces, Craig salia a la cocina e iba a atender la puerta. Lo primero que vio fue una cabellera rubia desordenada.

- ¡¡Tweek!! - gritó emocionada la pequeña al ver a su 'cuñado', además que se colgaba de su cintura.

- ¡Ah! Ho...hola Ruby - sonrió Tweek - Hola Craig -

El azabache saludó feliz, sus ánimos se habían levantado.

- Hola - dijo de manera desanimada, ocultando su alegría -¿Cuándo volviste? - preguntó.

- Hace unos 15 minutos - respondió el rubio con su acostumbrado tic, y sin mucha presencia de su tartamudeo - Mi papá está afuera, él insistió que viniera cuanto antes -

- Hmph - Craig miró al rubio de arriba hacia abajo.

- ¿Qué pasa hermanito? - preguntó la pelirroja.

Volvió a mirar a Tweek y luego a su hermano, no pudo ocultar su risa. - Tweek, ¡creciste! - 

- ¡Eh! -

- Niña ya vete a la cama - ordenó el mayor de los Tucker.

- Si, si, si - Ruby se despidió de ambos y se dirigió a su cuarto.

- Yyy... ¿Qué tal tus va... vacaciones? - preguntó Tweek.

- Solo son 5 - contestó Craig, serio- ...y también te quemaste -      

- No, no, no ¡Me quemé! - gritó asustado el rubio.

- Tranquilo rubio, solo con el sol -

- ¡Oh! - suspiró aliviado.

- Pero...; ahora eres más alto - rió el azabache - Ahora eres más grande -

- ¿Qué? -

- Nada, nada - suspiró Craig - Mañana vienes a jugar -

- Está bien -

Ambos niños se despidieron, el rubio se despidió y volvió al carro de su papá. Mientras que el azabache sonreía divertido y entraba a su casa.

Esa noche; Craig durmió tranquilo y relajado, al igual que un rubio que dormía cansado en su cama.