Sobreviviendo Juntos {+16} [Carl Grimes y tú]

Capítulo IX

   Salimos temprano de casa, fuimos a los muros a buscar algún lugar donde pudiéramos cruzar. Mi vista estaba fija en las murallas cuando Carl tocó mi brazo, lo miré y él señaló con la cabeza al frente, Enid iba corriendo hacia los muros con una mochila, la seguimos y vimos cómo cruzaba al otro lado de Alexandría.

— Vamos —dijo Carl quitándose la camisa a cuadros que llevaba arriba, yo me quité la mía y la puse en mi hombro, empezamos a subir por las varillas que Enid había dejado, colocamos las camisas para no cortarnos al cruzar. Cuando bajamos vimos a Enid corriendo a lo lejos, Carl empezó a caminar en su dirección.

— ¿A dónde vas? —pregunté al verlo—

— Voy a ver a dónde va Enid. —dijo girándose.

— ¿Para qué? No es necesario, que haga lo que quiera.

— No, quiero saber a dónde va. —dijo volviendo a caminar, ahora con más velocidad. Yo no lo seguí, me quedé ahí hasta que no lo vi más, un sonido proveniente de los muros me hizo girar sacando mi cuchillo, levanté la mirada y ahí estaba Ron, tratando de cruzar, cuando lo logró caminó hacia mí.

— ¿Qué haces aquí? No puedes estar afuera

— Te seguí y tú tampoco puedes salir, ni Carl.

— Nosotros... es diferente, estoy acostumbrada a estar fuera de los muros, tú no

— ¿Crees que no puedo hacerlo? — preguntó. Yo me rasqué la nuca mientras negaba con la cabeza. Él rió.— También he visto a Enid salir de los muros, pero nunca me atreví a seguirla, contigo siento que puedes protegerme, es decir, ella es fuerte pero... no sé. ¿Cuál es el afán de los que vienen de afuera por salir de los muros? ¿No quieren estar seguros adentro?

— No es eso, no sé porqué lo hará Enid, Carl y yo lo hicimos porque... No queremos acostumbrarnos a estar protegidos siempre —respondí.

— ¿Y porqué no?

— No sabes lo que pasa aquí afuera... hay gente mala, siempre tratarán de lastimarte, no puedes confiar en nadie.

— ¿Ni en ti? —me quedé en silencio cuando preguntó eso, no soy mala, pero tampoco soy buena.

— No me hagas tu enemiga, con eso estarás bien —dije finalmente empezando a caminar.

— Nunca he visto un caminante... como ustedes los llaman —dijo Ron caminando a mi lado.

— Deberías regresar, no es seguro que estés aquí —realmente quería que me dejara sola, Carl se fue tras Enid y me dejó, estaba muy enojada,
y sus palabras de la noche anterior no me dejaban de doler: "Lo siento, fue un error, no quise hacerlo", se arrepentía de intentar besarme, para él fue un error, no quería hacerlo y jamás lo hará... Quizá sólo estaba desesperado, quizá imaginaba que yo era Enid y que la besaría a ella... ahora desearía que un caminante llegara y me arrancara el corazón...

No había notado que caminaba en la misma dirección por donde Carl se fue hasta que lo vi corriendo. Puse una mano enfrente de Ron para que se detuviera, me escondi detrás de un árbol y Ron conmigo.

— ¿Qué estamos viendo? — preguntó.

— Carl, ese idiota, ésta haciendo mucho ruido —susurre. Carl parecía algo desorientado, al parecer había perdido el rastro de Enid.

— Carl, deja de seguirme. —se escuchó la voz de Enid, Carl movía la cabeza tratando de encontrarla.

— ¿Cómo te diste cuenta? —respondió mi hermano.

— Haces mucho ruido —dijo Enid, Carl bajó la mirada notando que cuando caminaba aplastaba las hojas secas y eso hacia bastante ruido. Después de intercambiar unas cuantas palabras, Enid salió de entre los árboles, empezó a correr y Carl la siguió.