Capítulo 9: Corazón de hielito.

1K 109 71
                                    

Comencé a hurgar por los cajones de la cómoda, buscando alguna remera para arrojarle a Laura

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Comencé a hurgar por los cajones de la cómoda, buscando alguna remera para arrojarle a Laura. Que esté sentada, cruzada de piernas y en ropa interior, no me ayudaba para nada. Quería hacerme una idea sobre cómo encarar a mis padres con respecto al estudio y sobre una posibilidad de dejar todo en honor a la banda. Estaba practicando con ella pero su forma de vestir no colaboraba con mi mente.

Una remera azul Francia cayó sobre su cabeza. Resopló, tiró de ella y me lanzó una mirada cargada de odio. Luego, observó la remera con el entrecejo fruncido.

–¿Y esto por qué? –preguntó, bastante ofendida.

–Porque me distraes y no puedo pensar bien –respondí, cruzándome de brazos, apoyándome en el mueble que estaba atrás de mí. Con mis ojos le di a entender que estaba pensando en arrancarle eso que tenía puesto, pero que no podía. Me estaba torturando. Cuando entendió, por fin, sonrió con alegría.

A ella le gusta que le diga ese tipo de comentarios, y yo sé que los ama, por eso se los suelto sin vergüenza.

Sentí un poco de alivio cuando la pasó por encima de su cabeza, la estiró y quedó cubierta hasta un poco más debajo de la cadera. Con eso me era suficiente.

–Entonces... –Giró sus manos hacia adelante como señal para que continúe. Asentí. De vuelta, empecé a dar algunos pasos por la habitación, yendo y viniendo por los nervios que me daba.

No quería decepcionarlos pero yo realmente quería enfocarme en la banda. Amo Historia, me encanta estudiarla pero siempre va a estar en segundo nivel. La música me llenaba mucho más, me generaba adrenalina en las venas y me hacía sentir vivo. Yo quería sentirme repleto de vitalidad al igual que Jeannette cuando toca su batería.

–¿Se acuerdan cuando iba a empezar a estudiar y yo les prometí que llegaría hasta el final? Bueno... También tienen que acordarse de la condición que yo puse ese día. –Le eché un vistazo a Laura. Tenía sus codos apoyados en sus rodillas, sus manos como puños y su cabeza posada en ellos. Inclinó su cuello hacia adelante para que sepa que iba por buen camino–. Yo dije que si encontraba la forma de tener una banda y poder vivir de eso, iba a abandonar todo lo que esté haciendo para enfocarme en eso. –Giré sobre mis pies para caminar hacia la derecha. Sabía que ella se mantenía en la misma posición. Volví a mirarla y ella hizo el mismo gesto que antes–. Bueno... se está presentando esa oportunidad gracias a Jeannette –por reflejo la miré de reojo y noté que entrecerró un poco sus ojos al mencionarla–. El sábado, en el bar donde la encontramos, se va a hacer una noche de cazatalentos donde van a estar representantes de discográficas buscando talentos. –Ahora retrocedo sobre mis pasos hacia la izquierda. Parezco una maestra por la forma en que agito mis manos al hablar–. Y nos vamos a presentar todos juntos como una banda unida.

Me puse de frente a Laura con mis brazos extendidos.

–¡Tarán! –exclamó ella, imitándome con sus manos. Sí, parecía un mago terminando su truco. Comenzó a reír–. Yo digo que estás bastante bien, en serio.

Mujer Baterista. (COMPLETA)Where stories live. Discover now