LA MALDICION DEL GATO NEGRO

PROPUESTA... ¿ACEPTADA O RECHAZADA?

El señor Bourgeois me pregunto si me queria quedar con Marinette y los demas campistas, me gustaria, pero la verdad no es muy recomendable, y si el esta aqui significa que tambien su hija esta en este lugar y con ella sabiendo que estoy aqui no es buena idea.

-Señor, creo que hay que dejarlo solo, el dia de ayer escapo de la enfermeria y me conto que no le gustan las personas.-Menciono Marinette, a pesar de que no la conozco ella ya me defendia.

-Jovencita ¿El a hablado con usted?-

-Si.-

-Me sorprende, normalmente el es mas reservado en las palabras. Sabes, te dejare que tomes tu desicion, mientras tanto si deseas estar solo te dare una cabaña donde no habra nadie mas, ¿Estas de acuerdo con eso?-

-Nadie... puede entrar... exepto ella.- Y señale a Marinette.

-¿Algo mas que se te ofresca?-

-No quiero ver... a nadie mas.-

-De acuerdo, sigueme.-

-¡SEÑOR!-

-¿Que sucede señorita Manon?- Era la misma mujer que me vio todavia con mis orejas y cola de gato.

-Mire... yo hace unos...- En eso levanto su vista hacia mi y cuando lo hizo solto un grito y yo me escondi detras de Marinette.

-¡AAAAAAAAAHHHHHHHHHHH!-

-¡Señorita Manon! ¡¿Que le pasa?!-

-E-e-e-e-el es u-u-u-una b-b-b-b-estia...-

-Eso es ridiculo, el es un niño que le gusta estar solo, digame ¿Por que dice eso de el?-

-Cuando lo vi... t-t-t-t-tenia... orejas y cola... n-n-n-n-negras...-

-Que ridiculo, de seguro creiste ver eso ya que estaba obscuro, si me disculpa lo llevare a su cabaña.- Y asi me guio este tonto a una cabaña asegurandose de que nadie me viera.

Mientras que a Marinette le revisaban su herida en el pie, estando ya dentro de la cabaña cerre todo lo que dejara ver el exterior y con eso estar en las sombras. De vez en cuando me asomaba para ver a los demas hacian actividades que yo jamas habia prestado atencion, pero jamas vi a Marinette, esperen ¿Sera que me he estado enamorando de ella? No, no es posible, yo no debo enamorarme. Pero en eso se escucho que tocaron a la puerta de donde yo estaba.

-Vamonos Chloe, de seguro no hay nadie.- Demonios, es ella.

-Pero que dices, yo digo que vi a alguien asomandose desde una de las ventanas y yo siempre tengo razon.-

-Aun asi no podemos estar seguras, puede ser que haya sido solo imaginacion tuya, vamos a otra parte.-

-Si quieres puedes irte tu, yo en cambio me quedo aqui y si nadie me habre la puerta yo lo are.- Rayos.

La persona que menos quiero ver esta intentando entrar a este lugar y yo no quiero que sepa de mi existencia al igual que el odioso de su padre, rapido busque algun lugar donde esconderme y vi que en el techo habia un espacio que era suficiente grande como para que yo me escondiera y no me podria ver aunque vea de diferentes lados, rapido trepe y me escondi, justo en eso ella entro y empezo a inspeccionar el lugar.

-Ves Chloe, te dije que no habia nadie aqui.-

-¡Agh! Odio que tengas razon Sabrina, bueno. Sera mejor retirarnos de aqui ya que hace tanto calor aqui dentro y tanto de eso le hace daño a mi cabello.-