Epílogo 1/2

3.8K 335 70
                                    



Pasé mi mano por el torso desnudo de Nam Joon. Estaba tumbada sobre su brazo y le miraba mientras dormía pacíficamente. Cuando deslicé mi mano hasta su abdomen, arrugó la nariz y me abrazó con más fuerza. 

Sonreí. Que guapo y que caliente está mi novio. 

Seguí acariciándole el abdomen. Solo le miraba porque seguía arrugando la nariz. Lo encuentro muy lindo.

Se puso de lado pero no abrió los ojos y me abrazó con sus dos brazos y encerró mis piernas con las suyas. Hundí mi cara en cuello y me reí. Adivino que no tiene ganas de despertarse. He pensado en algo travieso mientras me abrazaba.

—Amor... no inicies algo que me gusta... sabes que no podré parar —susurró en voz ronco. Me reí. Le besé y le mordí por el cuello.

—Despiértate, amor... llegarás tarde —contesté. Él me miraba mientras sentía su mano detrás mi cabeza. Me acercó más a su rostro.

—Sabes que prefiero abrazarte y hacer el amor contigo —dijo antes de besarme los labios apasionadamente. Se posicionó encima de mí sin dejar de besarme y me penetró despacio.

—Lo haremos rápido... —susurró mientras aceleraba.

—Nam Joon... —gemí desordenandole el pelo mientras que él jadeaba.

—¿Tienes... una reunión... verdad? —dije entre gemidos y me besó en los labios. 

—Te va a regañar Jin —dije después de que llegáramos al climax. 

Se levantó y desordenó su pelo totalmente.

—¡Aish! Por qué tuvo que hacerme cargo de ese proyecto, puede habérselo dado a Yoon Gi hyung o a Ji Min... ¡Aish! —reclamó y me reí. A veces parece un niño. 


Mientras que él se estaba duchando preparé sus cosas e hice el desayuno. A veces duermo aquí en su casa, bueno no solo duermo. A veces vivo aquí y vuelvo algunos días a casa. Nuestros padres ya saben lo nuestro y están de acuerdo.

Estaba arreglandole la corbata mientras que él me robaba besos y tardábamos más. Tiré de su corbata y le besé.

—¿Dónde vas hoy, amor? No tienes trabajo, ¿no? —preguntó mientras nos dirigíamos al aparcamiento.

—Sí, voy a casa —contesté y le di el abrigo—. ¿Te parece bien?

—Claro —contestó con una sonrisa. Me rodeó en la cintura y me besó enseguida en los labios—. Adiós, amor. Te amo —dijo y sonreí. Le hice entrar en el coche porque ya llegaba tarde.

—Te amo —dije antes de cerrar la puerta e irme a la entrada del apartamento y llamar un taxi.

Al llegar a casa, mis padres estaban ocupados haciendo limpieza. En la hora de almuerzo ayudé a mi madre a cocinar. Estaba colando los fideos cuando de repente dijo algo.

—Tú y Nam Joon, ¿no habláis sobre casaros? —preguntó y me giré hacia ella.

—No... somos feliz como estamos. De novios, así.

—Pero hija... lleváis cuatro años de novios

—Van a ser cinco años, mamá.

—Vale, cinco años de novios. Eso ya es suficiente. ¿Cuántas bodas habéis ido ya de tus amigas? ¿Y de sus amigos?

—Dos de mis amigas y cuatro de los amigos de él.

—¿Ves? Os estáis quedando atrás. 

Más que deseo (BTS RM)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora