Liar. (Harry Styles)

3. Encuentro

Hoy, ya era sábado.
El lunes empezaría mi trabajo, en estos momentos estaba en mi nuevo apartamento, que se encontraba a dos calles de la casa de los Styles, tal y como me dijo Andrew.
Todos estos días que pasaron, sólo me concentré es buscar información y empezar a entrar en mi personaje. Era lo que siempre hacia antes de una misión, me empezaba a preparar psicológicamente para el cambio, así poder hacer todo mejor, no me podía permitir hacer cosas sin pensarlo o improvisar, ya que una cosa como está seguramente terminaría con un mal resultado de la misión.

Mi teléfono sonó sacandome totalmente de mis pensamientos, mire la pantalla y era un mensaje, Lucas.
Lucas era mi ex novio, habíamos estado saliendo unos 8 meses, pero nuestra relación se fue cayendo, yo fui la que decidí dejarlo, debido a sus múltiples engaños hacia a mi, y mi pérdida de amor hacia el.
Claramente el no quedó conforme con esto, para cualquier hombre es una humillación que sea la mujer quien lo deja, por eso el aveces me molesta. Cuando seguía en California, iba a mi casa todos los días suplicando volver, y cada vez yo le repetía lo mismo, que no.
También solía llamar a mi teléfono.         Gracias al universo dejo de hacer todo eso tan seguido, desde hace dos meses que no iba a mi casa, y ahora sólo llamaba una vez a la semana como mucho. Lo que me daba un total alivio, ya que se estaba empezando a volver molesto.
Lucas, no tenía ni idea de mi trabajo, en realidad nadie la tenía sólo mi madre. Ni a mi mejor amiga Alissa, fui capaz de confesarle la verdad, mi trabajo no me lo permitia.
Realmente aveces me sentía muy mal por hacer esto, ocultar a las personas más queridas por mi lo que realmente soy.
Volví mi atención a mi teléfono y leí el mensaje de Lucas:

*Donde estuviste todo el tiempo? Te fui a buscar en tu casa y tu madre me dijo que no estabas.*

*Necesito que hablemos, estuve pensando mucho y podemos volver, haré lo que tú quieras, pero por favor vuelve*
Leí estos mensajes varías veces.

*Lucas, sabes que esto no tiene solución, sólo sigue con tu vida y se feliz*.
Y prometí que sería la última vez que le contestaría. Creanme, fueron muchas las veces que trate de hablar con el sobre los sentimientos pedidos, pero el simplemente prefiere no escuchar.
De mi parte no quedaba nada mas que ignorarlo.
Deje el teléfono sobre la mesa y comencé a organizar todas mis cosas, coloqué las cosas como me gustaban, ajustándolas a mi estilo. Este lugar era realmente lindo, sin muchos lujos, pero con todo lo necesario, así me gustaban las cosas a mi. Sencillas.
Mire atentamente las paredes color blanco de mi habitación, buscando ideas dentro de mi mente sobre lo que podría hacer con ellas. Otras de mis pasiones era el arte, es mi forma de desconectarme del mundo y sólo dejarme llevar por mis ideas.
Siempre que me estresaba mucho con el trabajo lo hacía.
Pensé en pintar algunos cuadros con diferentes colores así estos resaltarán en la pared. Quedaría hermoso.
El mes que estaría aquí tendría que aprovecharlo bien, sentirme comoda en mi espacio, es lo que haría.
Luego de unas horas termine de limpiar y acomodar cada cosa en su lugar.
Fui hacia el refrigerador y como lo suponía, no había nada.
Entonces tendría que ir a comprar lo más necesario, y lo no tan necesario también.
Agarre las llaves del apartamento y también las de mi coche momentáneo.
Esta es la primera vez que me ocurre esto, me dieron un apartamento y un coche, genial.
Subí a este, y prendi la radió, sonaba música de los '80, mi preferida.
Opté por poner el gps, ya que no conocía nada de la ciudad, se me haría muy fácil perderme. Ubique en el destino: Walmart.
En este encontraria todo.
Tarde unos 15 minutos en llegar, quedaba bastante cerca del edificio.
Bajé y me dirigí hacia las grandes puertas de entradas, wow, demasiada gente en un solo lugar. Probablemente hoy sería un día de descuentos o algo así.
Trate de ignorar la gran fila hacia las cajas, esperando que cuando sea mi turno, no estuviera tan atascado de gente.
En primer lugar fui a la sección de verduras y frutas, luego hacia los lácteos. Y así continué hasta casi finalizar con todo en la lista. Sólo me faltaba una cosa, mis cereales favoritos. No podría olvidarlos.
Caminé a un paso rápido hacia los estantes y sólo habían unos, mi día de suerte, pensé.
Estire mi brazo hasta alcanzarlos y traerlos hacia a mi, pero algo me lo impedía, alguien estaba haciendo fuerza desde el otro costado de la caja de cereal, bien no será tan fácil.
Dirigí mi mirada hacia la persona que consideraba mi oponente en esta busca de mi alimento fundamental en mi vida, exagerado, pero eso era para mi.

-Oh disculpa, esto es mío.- dijo una voz bastante ronca.

-Lo siento, pero los tomé primero- dije, y al final mire hacia el sujeto, ahora sabía que era un hombre. Cuando lo vi me sorprendí totalmente, mientras estaba dada vuelta cerré los ojos para intentar no ver lo que estaba pasando, quería desaparecer, que la tierra me trague no lo se algo, tenía ante mis ojos a nada más ni nada menos que Harry Styles, mi objetivo.
Logré reconocerlo por las fotos que vi del el en línea, las fotos no mentían.
Era alto con el cabello alborotado y unos lindos ojos verdes.

-Son los últimos, y llegué a ellos primero así que...- dijo, pero interrumpí con un movimiento que hizo tener toda la caja de cereal en mis manos. Le gané.

-Oh genial, gracias, desconocida- dijo el mientras me retiraba de ese pasillo.
Fue algo muy estúpido lo que pasó lo se, pero no podía hablar con el antes de que todo comenzará oficialmente. No entiendo porque hice tanto escándalo por una caja de cereales, supongo que fue por la sorpresa que me generó verlo, jamas espere encontrarlo antes de tiempo.
Por una parte esto podría llegar a perjudicar el plan, sólo un poco, pero esperaba que hasta el lunes que sería donde me vería otra vez, no se acordará de mí y este estúpido encuentro.
Tonta tonta tonta tonta.
Repetía en mi mente, porque no sólo le di la caja y quizás cuando me vería el lunes me agradecería y todo empezaría mejor de lo que creía.
Tendría que ver la forma de disculparme, o si tenía suerte ni se acordaria de mi y todo estaría bien.
Por lo menos sabía algo, le gustaban los mimos cereales de animalitos que a mi.
20 años, y me siguen gustando los cereales que empecé a comer cuando tenía 7 años.
Recuerdo que también eran los preferidos de mi padre.

Fui hacia la primera fila que encontré, quería salir rápido de ese lugar, no quería cruzarme de nuevo con el y que me viera de nuevo, es gracioso como el no sabe absolutamente nada de mi, pero yo sí de el.