Ninjago II: The Last Day With Us [TERMINADA]

10: Ojos En Las Pistas

JAY'S POV

Como era de costumbre, aterrizamos en un bosque. Uno diferente a todos los demás: éste tenía troncos marrones, hojas redondas y verde limón, pasto, flores que nunca antes habíamos visto y lo mejor: un sol que iluminaba todo el lugar. Si éste no era un buen sitio para vivir, entonces no sé qué sería.

Me dieron ganas de sacar un mantel rayado y hacer un picnic.

-Creí que nos llevarías a la civilización -dice Lloyd.

-Los llevaré -le contesta Oliver -, al pueblo de Doom, está pasando la esquina. Pero no nos quedaremos ahí.

-¿Ah? ¿Por qué no? -pregunté mientras comenzábamos a caminar.

-Digamos que no tienen muy buena recepción.

*-*-*-*-*-*-*-*

El pueblo estaba en un valle, y no sólo era impresionante, sino que además, era de los pueblos más cautivadores que había visto en mi vida. Todas las calles eran de piedra gris, talladas y acomodadas de tal forma que formaran dibujos en el suelo. Pero las casas y edificios eran aún mejores: todos de diferentes tamaños, y junto con los locales, tenían ese aspecto rupestre que me encantaba tanto, con las casas hechas de piedra, vidrios de botellas rotas encajadas en la pared como decoración, colores que iban del café al amarillo, con decoraciones humildes y detalles en las rocas. Y ahora venían las personas, como un ser humano normal, pero más pálidos, y con las orejas en forma de punta. Y todos usaban ropa que parecía ser sacada de una boutique de la vieja usanza, sin mencionar los kilos de maquillaje que llevaban algunos.

-Son...son... -trataba de encontrar la palabra.

-Duendes -termina Oliver por mí -, pero no se les acerquen, no son muy amistosos.

Oliver nos llevaba hacia un jardín, que más bien parecía el centro del pueblo, una plaza, con árboles, bancas, puestos de comida, y, un kiosco decorando el lugar en el medio del jardín.

-¿Alguien tiene dinero? Me muero de hambre -me quejé.

No sé qué me molestó más, que todos me dejaran en visto, o que Cole no hubiera dicho algo como "¡Wowowowow! Alto pelirrojo, ese puesto es mío" o cualquier cosa por el estilo. Pero no, él estaba a unos cuantos pasos de mí, demasiado ocupado cuchicheando con su novia recién traída del más allá como para hacerme caso.

Me crucé de brazos, molesto. ¿Así sería de ahora en adelante.

Me acerqué al lado de William para tratar de pensar en otra cosa, él dibujaba con rapidez todo lo que veía. No se me hacía extraño que estuviera a la orilla del grupo, pero desde el bosque en el Reino de las Almas me parecía que estaba más nervioso de lo normal, además, sentía que trataba de evitar a alguien.

-Hey Willy, ¿estás bien? -le pregunté.

-Um, sí, ¿por qué preguntas? -volteó a verme.

-Has estado un poco raro últimamente.

-Estoy bien, te lo aseguro -dice él, sonriendo.

-Bueno, tal vez sea la bupertad.

-¿Bupertad? -me miró extrañado.