¿Realmente Sola?

Micifuz

Después de dormir buen rato me levantan los maullidos de mi nuevo amigo de nuevo maullando frenéticamente a algo, cuando bajo los primeros dos escalones bostezando me despierto al pisar algo suave, levanto el pie para examinar que ha sido y grito.

Me llevo la mano a la boca para no vomitar, es una rata del tamaño de mi pie, entonces escucho de nuevo a mi gatito y se que está librando una batalla contra otro roedor o eso creo pero entro a la cocina y bufa al patio, mis ojos se abren lo más posible y salto hacia atrás.

-¿¡Que rayos haces aquí!? ¡¿CÓMO ENTRASTE?!

-Buenos días, la secadora ya está.- 

Entro en pánico, tomo a mi gato y subo las escaleras corriendo, olvido el cadáver peludo en el último escalón así que lo piso y me caigo, el gato vuela y lo último que veo es la perilla de la puerta en mi ojo antes de ver mi alfombra, estoy mareada todo es más oscuro,escucho pasos en la escalera y mi gato bufando, me proteje.

Despierto en mi cama, estoy asustada, ¿Fue un sueño? siento como mi ojo me punza, no fue un sueño, ¿Que hacía Dan en mi casa?¿Me siguió anoche? No hay manera de que supiera de mi dirección si no me siguió anoche.

Bajo las escaleras y en lugar de rata hay una mancha de sangre sigo bajando, me apoyo en el barandal por que en verdad me duele la cabeza, el microondas dice que son las dos de la tarde y yo podría jurar que no son ni las 11.

La secadora no está instalada, me enojo.

-Fue real o no, gato, tu estabas aquí dime que pasó.- El gato solo me mira 

Voy a mi cochera, la secadora sigue ahí, mi puerta esta cerrada, ¿Cómo me he hecho el moretón del ojo? 

Mi estomago gruñe, tengo hambre, el celular suena, número desconocido, bacilo en contestar pero lo hago de todos modos.

-Hola?

-Tienes hambre Clara? 

-¿Quién habla? 

-¿Que dices? No recuerdas al amable caballero que te ayudo a subir tu lavadora al auto? 

Me aprieto el puente de la nariz con los dedos, estoy muy confundida pero quizá el me ayude.

-Tengo hambre, claro que te recuerdo y era una secadora.

-Perfecto, te veo en el centro comercial de ayer, podemos comer ahí y discutir de electrodomésticos .- 

¿Está demasiado entusiasmado o yo demasiado apagada? Durante la comida se comporta como todo un cabello de historia antigua y no se ni cómo decirle que creí verlo en mi casa, al inicio se preocupó por mi ojo, en realidad todos los del centro lo notaron, le dije que me caí y me di en el ojo con la perilla pero no quedó satisfecho.

-Oye, Clara de verdad, si alguien te está molestando me lo puedes decir, yo se que no nos conocemos de nada pero te podría ayudar.

-De verdad no fue nadie, solo estamos mi gato y yo.-

Me arrepiento de decir eso al instante, no necesita saber que solo tengo un gato guardián.

- Mi papá me leía antes de dormir, un libro en verso.- se ríe sin ganas, es la primera vez que lo veo serio.

-¿De que trataba?.- Lo miro con curiosidad.

-De gatos, estaban  zapaquilda , marramaquiz y micifuz, es una buena historia pero hace mucho tiempo que no la leo, o escucho.

-Creo que micifuz es buen nombre para mi gato.-

-De nada, espero verte de nuevo.-

Subo a mi auto y enciendo el motor, arranco y cuando estoy metiendo mi boleto a la máquina veo a Dan en la otra ventana.

-Por cierto, deberías usar pantuflas. 

El corazón me da un vuelco y salgo del auto, cuando volteo del otro lado ya no está, ¿estuvo en mi casa entonces? ¿El me metió en la cama después del golpe? 

El sonido de un claxon me hace volver a mi auto y poner seguros antes de irme, a casa a cambiar las cerraduras.  

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