Capítulo primero.

30 5 0
                                    



Maca subió al autobús que la llevaba y traía de su instituto por sexta vez en esos tres días que llevaba de clase. Siempre había cogido el mismo autobús para todo: para ir al centro de la ciudad, para salir a casa de una amiga... y es que ella vivía en una urbanización alejada de la ciudad, a unos veinte kilómetros de allí, y eso limitaba su vida social.
Se puso sus auriculares y pulsó el botón de reproducción de su iPod, regalo de cumpleaños de su madre unos días atrás.
Empezó a cabecear al ritmo de la música, golpeando con sus dedos la barra de sujeción del autobús, hasta que éste dió un frenazo, y ella con el despiste, no consiguió agarrarse bien a la barra, cayendo hacia adelante. Pero no llegó a tocar el suelo, un chico la había sujetado por los hombros evitando que le diera un beso al autobús.

Aquél chico del busWhere stories live. Discover now