-¿Qué? ¿Qué acaba de decir, majestad?
-Somos tan parecidos que no creo que se note la diferencia.
-Pero, majestad, es una locura.
-Escucha, tengo una sospecha de algo. Mi padre prohibió que yo visitara el pueblo de Egipto por alguna razón y debo de averiguar qué sucedió. Es extraño que haya dejado a gente a cargo del pueblo cuando yo soy el verdadero gobernante.
-Pero nos pueden descubrir
-Lo dudo, somos muy parecidos así que dudo mucho que nos descubran solo debemos hacer la actuación correctamente
-Faraón, no me da confianza hacer esto
-No sucederá nada. Además quiero ir al pueblo, hace años que no voy
-No le gustara.
-Esa es la idea, que vea lo que ha sucedido con la gente ahora que mi padre dejó a esos hombres.
Yugi lo pensó mucho, no estaba seguro pero no le quedaba de otra más que obedecer al rey.
-De acuerdo, acepto el cambio
-¡Genial!
Atem agarró a Yugi y lo llevó a buscar lo más profundo de su cuarto donde se desvistieron y se cambiaron de ropas, Yugi se vistió como faraón mientras que Atem se puso la ropa de mendigo.
-Majestad, honestamente no creo que sea buena idea
-Yugi, es necesario. Necesito averiguar qué pasa y quiero ver el pueblo nuevamente. Extraño ir a visitarlo como cuando era niño
-Pero hay unos detalles, ni usted ni yo sabemos nada de la vida del otro. No se cómo se debe comportar un faraón y usted tampoco sabe lo mismo de un mendigo
-No es difícil ser un faraón, solo te pondrán a estudiar todo el tiempo.
-¿Seguro?
-Sí, ¿y tú? ¿Cómo es tu vida?
-Pues vivo en un edificio con mi amiga Mana
-wow, wow, wow, espera ¿vives con una mujer? ¿Estas casado?
-No, pero hemos crecido juntos toda la vida así que vivimos en el mismo hogar. Solo nos tenemos a nosotros mismos.
-mmm, ya veo.-Atem reflexionó sobre lo que decía el mendigo
-Y si me piden que dé una orden ¿qué haré?
-No lo harán, al faraón nunca le piden nada. Te lo aseguro.
-Bueno, entonces hagamos esto antes de que me arrepienta.
-No te preocupes, todo saldrá bien. Cuando llegue el momento adecuado volveremos a nuestras vidas normales.
Atem y Yugi se dirigieron con mucha cautela hacia el túnel, al llegar Atem sintió nostalgia recordando sus aventuras con Teana.
-Aún sigo sin poder creer que todavía exista este túnel.
-Pues ya lo ve. Existe como usted y como yo.
-Muy bien. Ahora yo me iré y tú te quedarás aquí
-Majestad, reconsidere todo esto
-Ya lo pensé detenidamente y no cambiaré de opinión. Solo actúa natural y nadie notara la diferencia
-Eso espero.
-Bueno, me retiro antes de que alguien nos descubra
Atem se adentró por el túnel con sus ropas de mendigo mientras Yugi, vestido como faraón, comenzó a sentir que su miedo aumentaba al ver como el faraón se alejaba haciendo más pequeño hasta que desapareció.
-Suerte, majestad-dijo Yugi
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El Faraón y El Mendigo
FanfictionUn faraón y un chico pobre muy parecidos se conocen y cambian sus identidades para descubrir un secreto sobre el gobierno de Egipto. Basada en la obra clásica "El príncipe y el mendigo" de Mark Twain Mi fanfic número 5