Capítulo 4

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Martes, 13 de septiembre

8:00 AM

Tener que ayudar a su padre en la librería siempre le había parecido un problema. Tenía que levantarse antes para poder llegar a tiempo al instituto. Hoy es su primer día, y no puede llegar tarde.

Como siempre, la suerte ha jugado en su contra. No le había sonado el despertador por lo que va muy apurado. Nicolás se va de la librería con una caja de libros enorme. Sale de espaldas para poder cargar con ella. Con lo que Nico no contaba era con que una chica estaría parada justo en la puerta. No le da tiempo a verla y choca con ella. Se gira para decirle que se quite de en medio, pero al ver su belleza se pone colorado y farfullea una disculpa

- N-no es nada, tranquilo – dice la chica. Se ve hermosa

Vista de cerca es muy guapa. Casi tanto como Leila. Al recordar este nombre, el chico siente un pinchazo en su corazón. "Eso ya es agua pasada" se recuerda a sí mismo. "O no..."

La chica mira por encima de su hombro y le sonríe tímidamente

- Bueno, me tengo que ir, un placer – añade riendo

Se da la vuelta y comienza a andar. No puede dejar que se vaya sin saber su nombre. O por lo menos que ella sepa el suyo. Carraspea levemente. Al oír eso, la chica se da la vuelta

- Por cierto, me llamo Nicolás Torralba, Nico para los amigos – dice el chico, esperando que ella se presente

Pero la chica se vuelve a dar la vuelta sin decir nada.

"Quizás no le has agradado"

Cállate conciencia

"O tiene novio... de seguro más guapo que tú"

El chico la mira alejarse corriendo hacia dos chicas de su edad. Una de ellas exclama:

- ¡Hola Paula! ¿Quién es ese? Ya estás ligando... ¡Estás toda roja!

Nicolás se queda observando a las tres chicas hasta que se pierden de vista. De repente Paula se gira para mirarle y el chico la saluda con la mano. Nico no puede reprimir una sonrisa... Paula. Dulce nombre. Algo es algo. En cuanto llegue a casa se pondrá a investigar más sobre esa chica que en tan poco tiempo ha ocupado cada uno de sus pensamientos.

De repente, parece despertar de un trance. Mira el reloj de su bq. Las 8:05. Tendrá que darse prisa si quiere llegar a tiempo. Con un suspiro, deja la caja en el suelo y vuelve a entrar en la tienda a seguir su trabajo.

Como le recuerda esa chica a Leila...

*Nicolás Torralba's Flashback*

Madrid, 5 de julio

15:00 PM

Nicolás entra en su casa feliz. Su sueño de conquistar a Leila Sánchez se ha hecho realidad. Por fin, tras años enamorado de ella, había dado el paso definitivo. Se lo había dicho todo.

Deja el ramo de rosas que ha comprado para ella encima de la mesa de su cocina y entra en el baño para arreglarse. Tiene una cita con ella a las cuatro y media, así que le da tiempo a comer, peinarse e incluso repasar para el examen de física y química. Silbando, se prepara la comida, mete los platos en el lavavajillas, se peina y se va hacia la cafetería donde han quedado

De repente la ve llegar, preciosa, con un vestido gris ajustado. Se queda mirándola preguntándose que ha hecho él para merecer a alguien tan maravilloso en su vida. Leila le ve y le sonríe a lo lejos. Se acerca hacia él y le besa. Él le sigue el juego, alegre. Los dos chicos entran en la cafetería y comienzan a hablar de cosas varias. Es la mejor cita que ha tenido en su vida. Después de comer, la chica se despide con un corto beso y se va

*Fin Flashback*

No debe pensar más en Leila. Lo suyo se acabó. Pensando en la misteriosa pero encantadora chica que acaba de ver, se cuelga su mochila a la espalda y arranca a correr para no llegar tarde el primer día

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Nicolás Torralba en multimedia <3

ROSAS PARA ELLANơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ