¿Nos vas a traicionar?

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Pov Elise

Mi cabeza daba vueltas y vueltas para cuando abrí los ojos estaba tirada en el suelo llena de tierra me senté cómo pude y note algo mi pierna izquierda estaba rota al igual que mi brazo derecho además me salía sangre de la cabeza, comencé a llorar como una bebé estaba asustada
-¡¡¡Ayuda!!!- grite y trate de ponerme de pie pero no lo pude y volví a gritar
-¡¡¡Duele!!! ¡¡Ayuda!!- empecé a llorar y me senté ahora el miedo que tenía era porque estaba sola y en un lugar que no conocía
-¡¡Ayuda!!- mi garganta estaba seca y el cansancio de mi corrida ya me estaba cobrando fractura tenía mucho miedo
-¡¡Ayuda!!- grite aún más fuerte y luego seguí llorando por el miedo que tenía
-Elise- un pequeño grito se oyó muy lejos de mi pero reconocí esa voz su voz
-¡¡¡Oto-san!!!- grite sabiendo que era el deje de llorar y me trate de poner de pie para que mi grito se oyera mejor
-¡Elise!- aquella voz la voz de Natsu se oyó más fuerte y trate de subir pero no pude
-¡¡Oto-san!!- mi cabeza mataba y mi garganta estaba seca mi visión se estaba haciendo borrosa
-¡¡Elise!! ¿donde estas?- se oyó aún más cerca y sonreí y empecé a llorar por la alegría de que alguien me encontraba y no un simple alguien sino mi papá
-¡Oto-san! ¡Estoy en el barranco!- grite pero mis energías estaban cerca de su límite, se estaban acabando y eso me molestaba no iba a poder mantener la consciencia por mucho tiempo y aquello era una completa molestia
-¡¡Espera Elise!!- dijo mi padre y yo casi le iba a decir algún comentario sarcástico pero no lo hice ya me estaba cansando me senté y sonreí esperando a mi padre pero un instante después me desmaye.
Pasaron unos minutos cuando por fin oí unos pasos a mi alrededor
-¡¡¡Elise!!!- dijo una voz cálida, preocupada y amable una voz que tanto anhelaba oír sonreí un poco y empecé a llorar luego oí como el bajaba
-¡No!- gritó y sentí sus brazos rodearme su cabeza en mi pecho oyendo mis latidos, esa calidez era tan linda que seguí llorando
-Dios llegue a tiempo- sentí una humedad en mi pecho y abrí un poco mis ojos y me di cuenta de dos cosas que me sorprendieron papá me cargaba al estilo princesa y lloraba
-Oto-san- mi voz era débil y lastimaba mi garganta el me vio y paso un pequeño trapo en mi rostro tenía puesta una playera roja y unos pantalones de mezclilla estaba muy informal ya tenía tiempo que no lo veía así
-Elise, pequeña como lo siento, vamos te llevaré a casa- me limpio mi cara y empezó a caminar sonreí un poco y me acurruque en su pecho al instante me quedé dormida oyendo los latidos del corazón de mi papá los cuales se fueron relajando hasta formar una bella melodía de cuna.
Fueron varios minutos hasta que oí unas voces lejanas
-¡Natsu!- dijo la voz de mi tío Zeref con un matiz de preocupación
-Estoy bien Zeref pero hay que ir a un hospital Elise esta mal y creo que tiene unos huesos rotos- le dijo mi papá
-Por supuesto sube al auto, Leo diles que ya la encontramos e iremos al hospital, llama a Mavis y le dices que llegaremos mañana esta algo lejos como para ir a la casa con Elise malherida- solté un pequeño gruñido ante aquello no quería que me vieran como una carga así que abrí los ojos y vi que ya estábamos dentro del deportivo de papá
-Estoy bien- dije tan bajo que sorprendí a Natsu ya que me miro con los ojos llenos de preocupación y una sonrisa muy pequeña
-Lo sé Elise pero es mejor ir a un hospital por cualquier cosa, pero mira mientras toma un poco de agua- Natsu puso una botella en mi boca y la empezó a vaciar yo disfrute eso era increíble ya no sentir seca mi garganta, la puerta del deportivo se abrió y alce un poco mi cabeza para ver a mi tío Zeref
-Leo se va llevar la moto a Elise y ya le llame a Happy lo oí muy feliz y relajado- Natsu retiro la botella y me di cuenta de que se había vaciado
-Pues conduce y vamos a un hospital- dijo y mi tío asintió mientras prendía el deportivo, Natsu hecho el asiento hacia atrás y me logró acomodar sobre su regazo cosa que me sorprendió
-¿Como me encontraste?- pregunté Natsu sonrió y saco algo de la guantera y me di cuenta de que eran toallitas húmedas
-Digamos que siempre me preocupe a donde ibas tan noche cuando no tenías moto y pues cuando te la di está tenía un chip de rastreo- me sorprendí pero hice una mueca al ver como Natsu me limpiaba mi cara
-¿Un chip?- dije y el sonrió un poco después de limpiar mi rostro pero note que fruncio el ceño al pasar su mano por los cortes de mis mejillas
-Si pero sólo lo usaba cuando Acuarios me decía que no habías llegado a la casa- asenti y Natsu siguió limpiando y cuando rozó mi brazo derecho solté un pequeño grito y Nastu una maldición
-No la tocaste muy fuerte y le dolió tiene el brazo roto- dijo mi tío Zeref después de prender las luces intermitentes
-No me digas- me di cuenta que Natsu y yo teníamos el mismo sarcasmo y al hablar al mismo tiempo nos empezamos a reír pero yo me queje al sentir como mi estómago dolía
-Te va a tener que hacer radiografías en todo el cuerpo, se me hace que tienes fracturas en las costillas- rodé los ojos
-Callate cerebrito- el automóvil se apagó y alce mi mirada al ver un hospital, Zeref se bajo susurrando algo así como "Mi familia me maltrata" Natsu iba abrir la puerta pero yo le tome la mano
-Natsu, oto-san ¿nos vas a traicionar?- pregunté con los ojos llenos de lágrimas.

Nombre Iron Redofx
Edad 15 años
Forma de ser Es un rockero de corazón, un chico alto de cabellos azules y ojos rojos, viste de colores negros y en ocasiones usa una banda naranja en la cabeza, usa pirsinc en la oreja izquierda y otro en su ceja así como lengua
Dato curioso Quiere ser cantante sobretodo pero en caso contrario de no serlo desearia tener un trabajo en alguna televisora.

Hola aquí les dejó su capítulo y sin más que decir nos vemos en el próximo.

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