Mi Novio Es Un Vampiro |TERMINADA|

Capítulo XXXI

|•Corregido•|

Alexxander POV.

Cuando Kira me dijo que me fuera, fui directo a ver a Milo que se fue cuando yo me fui a hablar con Sebastián, cuando llegué toqué la puerta y él salió a abrirme.

—¿Y Kira dónde está? —me preguntó él buscando a Kira

—Me odia —admití en un susurro

—Pasa y me cuentas qué pasó —me dijo, entramos a su casa y nos fuimos a la sala

—Ahora sí, qué pasó —me preguntó cuando nos sentamos en el sofá

—Kira se enojo conmigo y ya no me quiere ver —le conté tratando de contener las lágrimas que amenazaban con salir

—Mira Alex, ahora tú no la busques, la conozco y ella cuando se enoja con alguien lo que menos quiere es ver a esa persona —me aconsejó él y me abrazó

—Gracias hermano, sabía que podía contar contigo —le agradecí y en ese momento entró Kira con mi princesa en sus brazos, ella nos ignoró y subió a la habitación de Gaby, Milo me miró y me indicó que subiera

Cuando subí y vi a mi princesa muy golpeada, Jair quería tomar el control de mi cuerpo, mis ojos se oscurecieron y mis manos se pusieran en puño a mis costados. Pero después ese enojo se convirtió en tristeza al verla así y saber que yo no pude protegerla de esa hija de perra.

—Está bien, solo está cansada, vino medio camino caminado, y después la cargué hasta acá, necesita descansar —me explicó sin mirarme—.Te dejo sólo con ella —dijo Kira en tono serio y se fue

Cuando Kira se fue yo me acerqué a la cama de mi princesa y había algo raro en ella.

—Mierda —maldije por lo bajo al darme cuenta de que la habían convertido

—¿Alex? —dijo ella muy débil

Yo me quedé un momento en silencio y cerré mis ojos con fuerza provocando que las lágrimas que había contenido salieran.

—Sí aquí estoy, no te preocupes por nada.

—Me odias, ¿Verdad? —me preguntó ella con tristeza

—¿Porque habría de odiarte?.

—Por lo que soy, Alex, pero te juro que yo no quería, ellos m... —comenzó a decir con desesperación pero yo la interrumpí

—Shh!, no te preocupes por eso, yo jamás te odiaría, yo te amo Gabriela —dije tomando su mano y ella me miró

—Yo también te amo Alex —me dijo ella sonriéndome débilmente

—¡¡YA HAZLO, MARCALA YA!! —me gritaba Jair

—Gabriela es que yo... —comencé a decir algo nervioso, pero ella me interrumpió

—Hazlo —dijo ella y se descubrió su cuello

—¿Estás segura? —le pregunté y ella asintió

Yo ya no aguantaba más y me coloque encima de ella, la empecé a besar y fui bajando dejando un camino de besos por su cuello provocando que ella soltara un gemido.

—Gabriela, ya no aguanto más —le dije y ella me calló con un beso muy apasionado y se colocó encima de mi

—Yo tampoco aguanto más —admitió ella mordiéndose el labio inferior

Y después de eso nos dejamos llevar por el deseo y así después de tanto tiempo logré hacerla MÍA.

Empecé a bajar de su cuello hasta su parte dejando un camino de besos.