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Ya era el día, el día de la boda... Todos estaban ansioso, nerviosos, emocionados por la gran fecha, todo estaba en su orden... Exceptuando una cosa. La novia... Ella mientras tanto estaba en la habitación recorriéndolo de un lado a otro, mordisqueando su uña postiza.

- ¿Y si se arrepiente? ¿Y si sale algo mal? ¿Y si se quema la iglesia?- Hablaba con cierto miedo, pero afortunadamente había alguien para tranquilizarla; su buena amiga Amanda.

- Vamos cálmate, no pasará nada de eso...

La puerta de la habitación se abrió - Mami... - Era el castaño que con el lo acompañaba el pelinegro tomados de la mano. - ¿Qué pasa? Mi papá esta esperando en ese enorme pasillo.

La madre se puso a la altura de su hijo con una sonrisa curvada. - Estoy bien mi niño... ¿Me das la mano?

El castaño asintió, tomo la mano de su mamá, y cuando ella se levantaría; la madre de Guillermo se levanto del tirón tomando el ramo de flores, camino hacia ella y se las entrego. La mujer sólo sonrió como agradecimiento.

Mientras tanto Guillermo soltó la mano de Samuel y corrió en busca de sus amigos, la mujer comenzó a caminar con su niño.
Guillermo al llegar con sus amigos feliz dijo que ella ya venía, dando a comenzar unos murmullos del comienzo. Guillermo y Alex corrieron hacia la mamá de Sam para colocarse detrás de ella y tomar la cola del vestido, ellos felices por ayudar en algo en la boda.

Mientras tanto Luzu y Frank se colocaron frente de la novia para comenzar a tirar pétalos en el camino... Y ya era la hora, la boda, estaba apunto de comenzar.

[...]

Y después de una larga hora, podían irse felices a su nuevo hogar, todos destrozados por la repentina marcha de esta pequeña familia apenas ya formada. Y lo peor era que los niños no entenderían lo que sucedería.

La mamá de Samuel se acerco hacia el pequeño, donde se encontraba con sus amigos jugando, ella dolida le hablo.

- Sami... ¿Podrías venir mi niño?

El castaño feliz asintió, corrió hasta ella con una sonrisa de punta a punta.

- ¿Qué sucede mamá?

- Mi niño... Ya es hora.

- ¿Hora para qué mami?

-Hora para irnos...

- ¡Oh! Esta bien... Pero volveremos ¿cierto?

Su mamá comenzó a llorar, ella sonrió dolida. - No cariño, no volveremos. - La mujer comenzó a reír para opacar el llanto. Samuel aún no entendía. - Quizás en un futuro entenderás, pero es hora de despedirse mi príncipe...

- Pero... ¿Y mis amigos? ¿Y Guille?

La mujer no dijo nada. Sólo lo abrazo.
- Anda ve...

La mujer se levanto y dejo que el pequeño se marchara...el niño algo triste se acerco con sus amigos que ellos rápidamente se acercaron preocupados.

- ¿Qué pasó Sami?- Dijo Francisco preocupado.

- Ya me voy...

- ¿Tan plonto? - Hablo Alex.

- Pe..pero.. ¿Te veremos mañana cierto? - Hablo Guille, temiendo lo que su madre le dijo ayer... Fuese cierto.

- No... Ya no los veré.

- ¿Po...Por qué?- Prosiguió Guillermo.

- No lo sé.

Alex, Luzu y Frank se acercaron a abrazarlo. El último abrazo que se darían... La última vez que se verían.
Guillermo con lágrimas en los ojos, corrió hacia Samu para abrazarlo.
El pequeño deseaba que ese abrazo durara para siempre.

- No me olvides Samu...

- No lo haré Guille, no lo haré.

- Seguimos casados recuerda lo.

- Lo recordaré...

Los niños se separaron y se tomaron de las manitas por última vez... Samuel se soltó y fue corriendo con su mamá; ella lo cargo, y caminaron hasta la camioneta, ya no había vuelta tras... Éste... Sería su último adiós.

















































¡Hay que dolor! No quería publicarlo hasta mañana por el hecho de que... ¡HUBO BODA WIGETTA SEÑORES Y SEÑORAS!
La primera fase se a logrado...
Estoy feliz por eso, pero es una lastima que este fic... Tenga que acabar, lo siento... Más noticias para después.

Las hamo... z4

Babies «Wigetta»Where stories live. Discover now