Capítulo 13 parte 1

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Kageyama tomó una decisión al ver a su novio abrazar a su hermana, lucharía por su relación costara lo que costara, amaba con toda su alma a su naranjito. Este tiempo enojado fue de lo peor, nunca imaginó que no tocarlo, no abrazarlo y no demostrarle su amor fuera tan difícil, pero ella le dijo que debía ser firme cuando algo no le gustara, el problema es que no entendía hasta que punto serlo, ¿horas?, ¿días?, ¿cuánto era el tiempo prudente para seguir enojado?.

-    Hinata... ¿podemos conversar? – dijo despacio, con un poco de temor a una respuesta negativa.

Naranjito lo miró con tristeza pero respondió – claro.

Natsu los miró, dejó de abrazar a su hermano pero antes besó su mejilla y dijo al oído – arréglense.

Hinata le sonrió y le regaló una mirada cargada de cariño. Nastu antes de abandonar la pieza le cerró el ojo a su cuñado, éste sonrió.

Una vez que se quedaron solos, el ceñudo cerró la puerta. Su corazón latía rápido, golpeaba con fuerza en su pecho, de sus manos salía un sudor frío, se las secó en los jeans. Ahí parado en la entrada de la pieza se sentía muy inseguro. Hinata se sentó el cama cabizbajo, jugaba con sus manos nervioso, su cabello largo le tapó el rostro.

-    Hinata yo... – carraspeó la garganta – quiero decirte el porqué estoy enojado.

-    Te escucho – no levantó la vista.

-    Primero, me mentiste varias veces con lo del patinaje.

-    Sí, lo siento.

-    Segundo, no fuiste cuidadoso.

-    Lo sé.

-    ¡¿Qué hubiese pasado si tú te fracturas el brazo?! – aumentó un poco el tono de voz pero reaccionó e inmediatamente se detuvo, suspirando en el proceso – me preocupo mucho por ti porque te amo Hinata, no quiero que algo malo te pase...

-    Gracias Kageyama... reconozco que actué mal, fui impulsivo y es cierto no tuve cuidado y por eso Takashima san se fracturó el brazo... soy culpable – a naranjito se le quebró la voz al hablar, le dolía recordar el accidente.

-    Y lo tercero, lo que más me molestó, lo que me sacó de quicio fue ese pelafustán de Tanaka... amor, él intentó besarte delante mío, delante de todos y tú no le pegaste una cachetada como bien se lo merecía.

-    Kageyama, yo aún me siento culpable con él, por eso no soy más enérgico en alejarlo, además él fue un apoyo muy grande cuando tú me tratabas mal... él me cuidó y me hizo sentir algo más que basura.

Kageyama cerró los ojos con una expresión de dolor en el rostro, le dolía profundamente el pasado, como fue de cruel con Hinata, su novio tocó el punto débil del ceñudo, estaba tan arrepentido. Caminó hacia su naranjito, llegó frente a él, éste aún no levantaba la vista, en cuclillas agarró las inquietas manos de su novio.

-    Mírame por favor – suplicó, Hinata levantó su rostro – te amo Hinata por favor ayúdame a no enojarme, ayúdame a seguir amándote.

-    Lo que me dices significa que si sigo siendo yo... tal vez me dejas de amar... – "Kageyama me puede abandonar".

-    No es eso, no quiero que dejes de ser tú, pero quiero que no me mientas, que no dejes que Tanaka se te tire encima y le des tanta confianza.

-    Está bien, eso lo puedo hacer – "pero seguiré mintiéndote con lo de la estampilla, aunque la dejo cuando me termine la mitad que me queda... y justo ahora tengo ganas de eso... pero... mejor no".

-    Gracias amor – apoyó su frente en las manos tomadas de su novio – te amo Hinata y no sabes cuanto.

-    Yo igual Kageyama, te amo mucho – naranjito se sentía aliviado, su amado aún lo quería y estaban arreglando las cosas.

Kageyama se abalanzó sobre el pequeño y lo tiró de espaldas a la cama, Hinata quedó con el pelo revuelto y los ojos bien abiertos ya que no se esperaba esta reacción de su novio, se sonrió y se la achinaron los ojitos. Kageyama adoraba la cara sonriente de su amado, todo su ser le gritaba que lo besara y eso hizo, presionó sus labios en los homónimos de Hinata, fue un beso tierno, lleno de afecto y desesperación, lo encontraba tan hermoso que no podía frenar su deseo de besarlo. Se quedó ahí sobre naranjito, observándolo, deleitándose con cada milímetro de sus facciones.

-    Hinata – se tiró encima, su cabeza entre el cuello y hombro de su novio, lo aplastó y por ende en su pecho podía sentir el latir acelerado y fuerte del corazón de su naranjito – te amo, no discutamos más.

-    Bueno amor – con sus brazos rodeó el torso de Kageyama y apretó fuertemente.

"Me dijo amor, nunca me lo dice... ella tenía razón, hay que enojarse de verdad", pensó el ceñudo.

-    Quedémonos así un rato más – dijo con su nariz pegada al cuello de su novio.

-    Está bien Kageyama.

-    No me sueltes.

-    No te soltaré.

-    No me mientas.

-    No te mentiré

-    Sé mas enérgico con Tanaka.

-    Lo seré.

-    No seas tan impulsivo.

-    No lo seré.

-    Cuídate más.

-    Me cuidaré.

-    ¿Lo prometes?.

-    Lo prometo – dijo cruzando los dedos sobre la espalda de Kageyama.

El peli negro inspiró con fuerza y exhaló lentamente en un suspiro dramático – te duchaste.

-    Sí, lo hice.

-    No te duches.

-    ¡Oye! Jajajajaja – lo miro y sus narices se toparon – no te aproveches, eso es imposible.

-    Jajajaja tienes razón, pero el fin de semana por lo menos – rogó con voz mimada.

-    Me rehuso, me gusta ducharme y estar limpio.

-    Bueno...

El domingo se quedaron mimándose mutuamente, besos y abrazos cargados de amor.
Kageyama conversó por teléfono con su madre, gritó en el proceso pero Hinata no pudo escuchar nada ya que su novio se encerró en el baño, luego llamó a otra persona pero fue al patio a conversar, esto molestó profundamente a naranjito pero como habían discutido se quedó callado, no quería provocar otra discusión, la enredadera de los celos subía por sus piernas llegando hasta las rodillas, lo ataba e inmovilizaba...

Kageyama se quedó dormido antes y Hinata se metió en el doble bolsillo de su bolso...

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hace tiempo que les mando un abrazo rompe costillas... ahí va ٩(๑❛ᴗ❛๑)۶

Volemos 2 (yaoi), [kagehina] [daisuga]Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt