Spring Day🌸 봄날. bts

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Desperté con dolor de espalda. Aún me tenía que acostumbrar a dormir en el suelo. Me dirigí a la cocina para tomar un café y me di cuenta de que no tenía nada, así que cogí mi abrigó y salí en busca de una tienda.

Había vuelto a nevar por la noche, parecía ser. Veía más nieve y me costaba andar. Caminaba sin rumbo, esperando encontrar algo o alguien que me indicara donde podía hacer la compra. Vi una silueta moverse despacio y intenté correr hacia ella.

- ¡Perdone!- grité desesperado para llamar su atención. Pero no me hizo caso.

Al acercarme vi que era aquel chico del autobús y llevaba los cascos puestos, de nuevo. Intenté alcanzarlo pero alguien tocó mi hombro.

- Buenos dias.- me dijo NamJoon sonriente.

- Buenos dias.- saludé- ¿sabes de alguna tienda para comprar comida?

- Claro. Sigueme.

- Muchas gracias.- dije mirando de nuevo hacia atrás, pero el chico ya se había ido.

Caminamos- yo como pude- hacia la otra punta del pueblo.

- ¿Puedo preguntarte una cosa?- cuestioné amablemente.

- Lo que quieras.

- ¿Sabés quien es un chico de pelo negro y muy pálido? Por lo que he visto tiene siempre cascos.

- Oh. Se llama YoonGi. Puede ser distante, pero si lo conoces es muy buena persona. Ya os presentaré.

Asentí y me di cuenta de que ya habiamos llegado. Entramos y me sorprendió ver lo "moderno" que era. Busqué el café y unas cosas para comer. Ya compraría esta tarde. Me atendió un señor mayor. Parece que todos son abuelos aquí excepto por estos dos. Salí y NamJoon me estaba esperando fuera.

- ¿Te apetece venir a mi casa? Así charlamos y me cuentas un poco sobre este lugar- le propuse.

- Está bien.- sonrió y nos dirigimos de vuelta a mi casa. Intentaba ir a su ritmo pero me era imposible con tanta nieve. Él caminaba ligero, como si no hubiera nada.

Al llegar, nos quitamos los zapatos y me dirigí a la cocina a prepararme un café.

- ¿Quieres?- le ofrecí.

- No, gracias.

Cuando terminé cogí mi taza, una galleta y me senté en el suelo.

- Bueno.- carraspeó- ¿y por qué estas aquí? Es decir, ¿por qué te mudaste?

- Mi jefe me transladó aquí para un nuevo proyecto. Soy fotografo.- le dije y sorbí mi café.

- Interesante. Espero que algún día me dejes ver tus fotos.- me dijo con una gran sonrisa.

- Claro.- le sonreí también- Tengo una pregunta, ¿cómo sabías que me había mudado?- le pregunté curioso.

- Pues el alcalde me lo contó. Como habrás visto, el pueblo es pequeño, entonces las noticias se cuentan enseguida y más si alguien se muda aquí.

- ¿No viene gente?- fruncí el ceño.

- Se podría decir que no.- se encongió de hombros- podría explotar y nadie se daría cuenta.
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Pasamos la mañana hablando, más sobre mí que de él. A la hora de comer se tuvo que ir.

- Bueno, gracias por invitarme.- hizo una reverencia.

- No es nada. Me ha gustado hablar con alguien.- sonreí agradecido.

Se despidió y se alejó corriendo otra vez. Cuando lo perdí de vista, entré en casa.

          Terminé de desempacar las pocas cosas que tenía y decidí cenar un sandwich. Se me había olvidado comprar. Terminé y me fui a dormir.

****

Me levanté de nuevo con dolor de espalda y fui a prepararme un café. Hoy iria a explorar los alrededores y sacar unas fotos. Cogí la cámara y salí de mi nueva casa.

         Encontré un campo precioso y como estaba amaneciendo, era aun mejor. Estaba muy relajado comparado con antes. Cuando vivía en Seúl, estaba muy estresado y tener un adolescente rebelde de vecino que peleaba con sus padres cada hora, no me ayudaba nada. Esto me venía genial para relajarme y pensar bien.

Volví a casa, satisfecho por el resultado y me encontré una carta debajo de la puerta.

"Hola, Jin. Quería preguntarte si querias venir a comer con un amigo y conmigo. Iré a las 2 a ver si vienes ;)
Atentamente,
NamJoon."

Normalmente no hubiera aceptado porque estaría cansado. Pero ese día estaba de buen humor y ¿por qué no socializar un rato? Aunque viendo el pueblo, uno pensaría que hay solo tres gatos.

Saqué mi portátil para pasar mis fotos y verlas mejor. Por lo que sabía, el proyecto era sobre el "Renacer", y parecía ser que aquel lugar era el idóneo para aquel tema. Comprobé mis fotos y con mi vista de halcón, vi algo extraño.
En la foto que le había hecho a un árbol, había una sombra dentras de el tronco pero no se veía bien, ya que había sacado la foto desde lejos. Negué con la cabeza y volví a mirar, pero seguía ahí. Seguramente sea la luz.

Estuve todola mañana con el portátil editando fotos, hasta que me di cuenta de que eran casi las dos. Me preparé rápidamente y justo llegó NamJoon.

- Hola.- me saludó con la mano.- ¿Vienes?

- Claro. Vamos.- cerré la puerta y lo seguí.

Llegamos a un restaurante pequeñito. Entramos y vi a un chico mirando por la ventana. El mismo chico que miraba por la ventana en el vagón.