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"Hola, ¿puedo-eh... hablar con el Dr. Paulson por favor?"

La recepcionista lo miró con confusión en sus ojos.

Ella se ríe por lo bajo antes de responder, "Lo siento, caballero, pero aquí no trabaja ningún Dr. Paulson."

Josh se ríe ante la frase y le responde como si la chica no supiera de lo que habla.

"Verá, señorita... mi mejor amigo- uh, sí, mi mejor amigo, Tyler, tenía sesiones con él todo el tiempo."

Josh comenzó a hablar más rápido, pensando en algo que la hiciera entender.

"Hablaban sobre libros, y dolores de cabeza, y como Tyler se sentía en ciertas situaciones, y ocasionalmente yo era mencionado en la conversación, y él le daba chupetes a Tyler para hacerlo sentir mej-"

"¡Señor!" La joven lo interrumpe en la mitad de la frase. "¿Perdóneme...?"

"Josh. Josh Dun."

"Bueno, lo siento Sr. Dun," suspira, "pero nunca hemos trabajado con un Dr. Paulson aquí."

"¡No, está equivocada!"

"TENGA UN BUEN DÍA, SEÑOR." Levantó la voz, claramente sintiéndose incómoda con la presencia de Josh.

Josh mira hacia el piso dándose por vencido. Nadie parece entenderlo. La gente debe pensar que está loco.

Se dirige hacia la puerta, pero se detiene y se la vuelta. "¿Con quién puedo hablar, entonces?"

"Hola, Josh," Un hombre llamado Dr. Franklin le sonríe. "¿Qué es lo que te acompleja?"

Josh mira a su regazo y juega con sus dedos. "Tengo una lista tan larga que sería más rápido leer la biblia. Tiene una letra tan pequeña que es mejor mirar un arcoíris... eso decía Tyler," Josh lentamente mira al Dr. Franklin, como si esperase que entendiera lo que estaba diciendo.

"Bueno, como no soy el doctor que sueles ver siempre, ni siquiera sé quién es ese," se encoge de hombros empujando sus lentes hacia su nariz, "Vas a tener que darme un poco más de información, Sr. Dun."

Josh mira hacia el techo mientras que el silencio llena el ambiente, no un silencio incómodo; un silencio reconfortante.

"He estado teniendo jaquecas de nuevo..." Josh mueve su mirada desde el techo oscuro hacia la expresión en blanco en el rostro del doctor Franklin, quien asiente con la cabeza.

"Mi dolor oscila hacia arriba, abajo, y hacia los lados... A veces la muerte suena mejor." Murmura Josh.

"Y no sé-" Dice más claramente. "No sé... si es el clima.... O-"

"Para mí, es una metáfora," el Dr. Franklin lo interrumpe. "No sólo es una jaqueca de lo que estamos hablando aquí. Creo que una jaqueca, un dolor de cabeza, representa un problema. Si piensas en lo que es realmente un dolor de cabeza, el dolor no es el problema, el dolor está en tu mente diciéndote que estás deshidratado, o que no estás durmiendo lo suficiente, o que tu cuerpo no está recibiendo lo que necesita. Así que tu cuerpo lanza una alarma para decirte que algo anda mal, y tu cuerpo obtiene tu atención mediante el dolor. Así que si tomas ese ejemplo de cómo funciona tu cuerpo, creo que un dolor de cabeza, psicológicamente, puede indicar que algo anda mal. Y eso es lo que tu cuerpo intenta expresar; algo anda mal." Dice el Dr. Franklin, escribiendo cosas en su portapapeles. Josh tuvo que sacudir su cabeza un par de veces para regresar a la realidad, porque aunque suene loco, él escuchó la voz de Tyler, no la del Dr. Franklin.

Josh asiente estando de acuerdo, "No sé exactamente lo que es, hay algo mal en el mundo obviamente, ¿cierto? y una jaqueca es la forma que tiene el cerebro de preguntar si hay alguien más que se siente así. Debe sentirse genial cuando alguien dice que también lo siente. Me haría sentir como si... no estuviese pasando solo por esto."

"Supongo que es cierto."

Josh espera un momento para volver a hablar. "Amo comenzar cosas en una escala menor."

"¿A qué te refieres con eso?" El Dr. Franklin ladea su cabeza y recarga su mentón en la parte trasera de su lápiz.

"...Porque es triste, y a mí me gusta estar triste. No sé, hace que... hace que la vida se sienta más tolerable a veces. Me gusta estar triste. Me gusta ponerme audífonos y mirar por la ventana, pretendiendo que soy un pequeño y triste personaje en alguna película. Por eso solía escribir canciones que ayudaban con eso." El vacío en los ojos de Josh captó la atención del Dr. Franklin.

"Bueno, ¿por qué no vuelves a escribir canciones?, algo así como un mecanismo de supervivencia." Sugiere.

"No puedo."

"¿Por qué no?, ¿falta de imaginación?"

"Mi escritor odia el reloj." Suspira profundamente.

El Dr. Franklin ofrece la idea de pintar.

"No me gusta pintar. Porque una vez que pones los colores en el papel, es extremadamente difícil sacarlos. Hay que agregar capas extras para tapar el error, y al final se te olvida lo que tu cerebro te dictó originalmente. Creo que una mejor forma de tapar tus errores es cubrirlos con negro... o azul, quizá. Sólo me gustan las pinturas mentales. Sólo los retratos. La razón para eso es que sólo puedes mirar hacia arriba o hacia abajo. Metafóricamente hablando, ganas o pierdes. Lo logras o fallas. Vives o mueres. Si fuese un paisaje, tendría que matarme." Josh hace una gran pausa antes de volver a abrir su boca.

"Además, los colores me dan dolor de cabeza." Se encoge de hombros casualmente.

La boca del doctor está entreabierta, pero su sorpresa se ve interrumpida por las palabras de Josh.

"No. ¡No-no-no-no-no-no!, ¡No!" Exclama Josh. El pánico y la comprensión en sus ojos son suficientes para asustar al doctor.

"¿SABES QUÉ DÍA ES MAÑANA?" Josh toma los hombros del doctor y sus palmas lo sacuden débilmente.

"¿SABES QUÉ DÍA ES MAÑANA?" Repite.

"¿Domingo?" pronunció el Dr. Franklin.

"EXACTO. Y LOS DOMINGOS... LOS DOMINGOS NO SON AMIGOS DEL HOMBRE. NO MÍOS, AL MENOS. LOS DOMINGOS ESTÁN LLENOS DE DOLOR Y TORMENTO. TODOS SON DISTINTOS, PERO IGUALES AL MISMO TIEMPO."

Comienza a dar vueltas en el cuarto con las manos en su cabeza.

Las gotas de sudor caen por su frente, haciendo evidente el estado de pánico y ansiedad.

"MAÑANA ES EL DÍA QUE PINTO NEGRO-AZUL. MAÑANA ES EL DÍA EN EL QUE TRANSFORMO EL LIENZO EN UN PAISAJE. SÓLO QUIERO VER UN TRANQUILO JARDÍN VERDE CRECER EN MI CABEZA, PERO ESTÁ LLENA DE HUMO. ME AHOGO CADA DÍA, NO PUEDO IMAGINAR COMO SE SINTIÓ TYLER." Las palabras simplemente salían de la boca de Josh, sin poder detenerlas.

"YO- YO NECESITO IR A PREPARARME PARA MAÑANA. GRACIAS DR. FRANKLIN." Gritó mientras salía por la puerta.

"¡Espera!, ¡Sr. Dun!, ¿qué ocurre mañana?" preguntó el doctor.

Josh pestañeó un par de veces antes de responderle, incrédulo de sí mismo.

"...Mi día de suicidio." Murmura antes de salir del cuarto, sin hacer contacto visual con el Dr. Franklin.

the migraine fic, joshler [español]Where stories live. Discover now