Capitulo 2

1.3K 25 12
                                    

Estuvimos recorriendo distintas tiendas en busca de un vestido para Paloma y cuando ya se había perdido la esperanza de la vitrina de una tienda se veía un hermoso vestido blanco, estilo princesa y un hermoso escote de corazón.

-Miren ese de allá.- digo a lo que todos caminos hacía la vitrina.

-Me gusta ese, vamos.- dice Paloma y terminamos entrando a la tienda, enseguida se nos acerca una chica vestida muy elegante y prolija.

-Buenas tardes, ¿En que las puedo ayudar?- pregunta amablemente.

-Nos interesa ver el vestido que se muestra afuera.- la chica se lleva a Paloma hacia los vestidores junto con el vestido.

-Deberías aprovechar y mirar algo tú también.- habla Nash quien extrañamente había estado en completo silencio hasta ahora.

-Si tienes razón, ¿Me acompañas? así me das tu opinión.

-Bueno.

Comenzamos a recorrer la tienda buscando algo que llame mi atención. Habían muchos vestidos bonitos pero demasiado extravagantes para una boda, siempre es sabido que en esa fiesta nadie puede llamar más la atención que la novia.

-¿Qué te parece este?- me muestra un vestido amarillo con pedrería, con escote de corazón y la falda era de tul amarillo.

-No me gusta...- seguimos buscando y desechando varios vestidos más hasta que la chica que antes se fue con Paloma nos llama para que veamos como le queda el vestido. Y se veía maravillosa, el escote de corazón se ceñía muy bien a su torso realzando sus pechos dándole un aspecto sensual pero que al ser también un estilo princesa se confinaba dándole un toque de ternura.

-¿Que les parece?- pregunta emocionada.

-Yo digo que te lo lleves, se te ve espectacular.

-Opino lo mismo, te ves hermosa ma.- habla Nash esta vez.

-Bien, me llevo este.- dice con una emoción que nos saca una sonrisa a todos incluyendo a la chica de la tienda. -en lo que yo lo pago deberías buscar un vestido nena, yo los alcanzo cuando termine.

-Okay.- Nash y yo regresamos a la sección de vestidos y de gala y continuamos con la búsqueda, más tarde se nos unió Paloma pero lamentablemente no encontré ninguno de mi agrado.

-Que mal que ninguno te haya gustado nena.- dice Paloma -pero no te preocupes, tratare de hacerme el tiempo en el trabajo para ayudarte a encontrar uno, la boda es en dos semanas y no nos podemos retrasar.- asiento.

-No te preocupes ma, mañana no tengo nada que hacer así que puedo acompañar a _____ para que elija un vestido, así tú tampoco estarías corriendo tanto por la hora.

-No es necesario Nash, no quiero molestar.- digo por cordialidad porque en el fondo si me gustaría que me acompañara.

-Muchas gracias hijo, mañana vienen a buscar tu vestido pequeña.- salimos del centro comercial y nos montamos en el auto para por fin irnos a casa. Al llegar a casa encontramos a papá sentado en el sofá mirando un partido en la televisión.

-Hola papá.- me siento junto a él y lo abrazo, recibiendo un beso en la frente por su parte.

-Hola hija, ¿Qué tal el último día?

-Aburrido, las chicas no fueron así que estuve sola toda la jornada... pero a la salida me divertí mucho con Paloma y Nash.

-¿Compraste tu vestido amor?- ella asiente -Muéstramelo.- dice mi papá con malicia, enseguida Paloma sale corriendo a su habitación, ella es muy creyente en los mitos de los ancianos, sobre todo en que el novio vea vestida a la novia o al vestido antes de la ceremonia.

-No seas malo pa.- luego de ese gracioso momento decido subir a mi habitación para colocarme ropa más cómoda, por alguna extraña razón mi cuerpo decidió hincharse y esta ropa comenzaba a molestarme.

Al subir y pasar por fuera de la habitación de Josh escucho ruidos, por lo que cautelosamente me acerco a su puerta pegando la oreja en ella.

-Yo también te extraño mucho nena... pero debes tener paciencia, pronto nos veremos..- supuse que eso se lo decía a quien quiera que estuviera al otro lado de la llamada.

Por temor a escuchar algo mucho más incomodo decido seguir mi camino a mi habitación, y al estar finalmente en el comienzo a retirar toda mi ropa excepto la ropa interior, busco algo que ponerme. Finalmente escojo un pantaloncillo corto de algodón gris y una ancha polera negra sintiendo por fin mi cuerpo totalmente libre.

Paso lo que resta de la tarde viendo películas, escuchando música y por último en una llamada grupal con todas mis amigas.

-Hasta que aparecen, me dejaron sola el último día.

-Nena, no pensamos que se te ocurriría asistir el último día... nadie lo hace.- me contesta Lissete una de mis tres amigas, era la mayor del grupo. Una hermosa chica de cabello rubio y corto, con una actitud empoderada y dominante, en resumen era la fuck girl de nuestro grupo.

-Yo si lo hago.- finjo un puchero.

-Bueno, pero para compensarte te queremos invitar a salir.- esta vez habla Alex, la hermosa chica hijas de padres cristianos que siempre la atormentan por su orientación sexual. 

Mi amiga en una noche de borrachera nos conto que hace más de dos años se había percatado de su singular atracción hacia las mujeres, pero que no sabía como decirle a sus padres por temor a como fueran a reaccionar. Obviamente el resultado no fue muy bueno y desde ese entonces la relación entre ellos se complico, obligando a mi amiga el dejar su casa para mudarse con una de sus tías, que es una de las hermanas de su mamá y para ser especifico la oveja negra de la familia. Alexandra es alta, con un hermoso cabello rosa sumamente corto, hace ya un tiempo comenzó a inyectarse testosterona en su cuerpo para poder ser lo que ella realmente es. Un chico. Todas nosotras le hemos estado apoyando en su proceso y nos sentimos muy orgullosas de ella.

-Si, con las chicas se nos ocurrió ir a comer algo y luego irnos a festejar, ¿Qué te parece?- pregunta mi última amiga, Cassie. Una hermosa chica de tez morena, lindos ojos verdes y cabello oscuro.

-No lo sé, mañana Nash y yo íbamos a ir por un vestido...

-Oh vamos nena, fue nuestro último día en la escuela... debemos festejar- habla Alex.

-Esta bien.- sonrío -vengan a casa y nos arreglamos juntas.

-Vamos en camino tonta.- suelto una carcajada y corto la llamada para ponerme en pie y arreglar mi cuarto antes de que mis amigas lleguen, luego bajo a pedirle a papá si me deja salir, a lo cual acepta con la condición de que este constantemente mandando ubicación en tiempo real, el mundo afuera esta cada vez más enfermo.

A los minutos mis amigas llegan a casa con bolsos en donde obviamente traían sus cosas, todas subimos a mi cuarto y comenzamos a prepararnos para salir y disfrutar la gran noche que se nos viene.

sexo con mi hermanastro ~Nash Grier y tu~Where stories live. Discover now