¡Preso por error!

Capitulo 11 "Descanso"

Cuando Pichit volvió a su celda vio cómo su amigo se había quedo dormido junto con aquel alfa rubio, parecía un gatito que se pegaba a su madre, el ruso estaba aferrado al japonés como un pequeño niño que jamás dejaría a su madre.

-Parece que tienes un hijo Yuuri- susurró bajo el tailandés.

El moreno se acostó en la cama de Yuuri, acaricio la almohada de su amigo y se quedo dormido profundamente; al parecer los tres estaban tan cansados que pasaron lo que restaba del día y toda la noche durmiendo.

[A la mañana siguiente]

El japonés se despertó primero, se movió un poco todavía adormilado, tenía en su pecho la cabeza de quién parecía un pequeño cachorro, acaricio su hermosa cabellera y el rubio empezó a moverse como señal de que se estaba despertando.

-Yuuri, dormí demasiado bien...- apenas se alcanzaba a escuchar su voz.

-Pareces un pequeño gato-

-No te burles Yuuri...- musitó el rubio con puchero.

El tailandés escuchaba lo que se decían, le molestaba en gran parte que se llevarán de esa manera, sin embargo, otra parte trataba de calmarlo, pensando en que se ve como si su amigo fuera la madre de ese alfa, cosa que al pensar le quitaba esos pensamientos negativos de su mente.

El guardia en jefe llevó el desayuno a la celda del japonés, se sorprendió mucho al ver que Yuuri estaba siendo abrazo por el alfa y para colmó habían dormido juntos; el guardia estaba furioso, no obstante guardo compostura, dejó el desayuno y se fue.

-Me voy, tengo que ir a arreglar algunos cosas-

Los omegas asintieron, Yurio se despidió momentáneamente, salió de la celda asegurándose de que no hubiera alguien merodeando y pudo irse tranquilo. Los dos amigos tomaron las bandejas con comida, empezaron a desayunar, después de todo tenían mucha hambre.

-¿Qué tal te fue con tú visita?-

-Mal...bueno, el estúpido que se encargó de que me refundieran en esta prisión vino a verme para solucionar las cosas-

-¿Qué pasó?-

-Ni siquiera deje que me explicará nada, le tengo demasiado coraje-

-¿Qué fue lo qué pasó entre ustedes?, digo...antes de que estuvieras encerrado aquí Pichit-

El tailandés tomó una gran bocanada de aire, al parecer era algo triste que no le gustaba mucho contar, más bien, nunca lo había contado, siempre cargaba con eso; Yuuri por su parte seguía comiendo y haciendo expresiones tiernas al hacerlo, lo que alegraba al moreno.

[Narra Pichit]

Todo empezó cuando llegue a Rusia, hace ya más de 4 años, llegue al que sería mi nuevo departamento;caí exhausto por el sueño en aquella cama tan cómoda, aún recuerdo lo suave que era...los días habían transcurrido, conocí a la mayoría de mis vecinos a excepción de uno, él siempre llegaba muy noche y se iba muy temprano, siempre me pregunté cómo aguantaba ese ritmo de vida.

El fin de semana había llegado, ya tenía todo acomodado en mi apartamento, quería salir a recorrer las calles de Moscú, estaba ansioso por hacerlo, de un momento a otro sentí la necesidad de hacerlo acompañado, quería pasar el día con alguien, de cierta forma me sentía muy solo, quería tener un amigo con el cual conversar y salir de vez en cuando a pasear o pasarla bien.

Salí del apartamento y baje las escaleras con lentitud, a pesar de que tenía tantas ganas de conocer, el hacerlo solo era algo que no me gustaba. Ahí conocí a ese beta...él subía y yo pues obviamente bajaba, hicimos contacto visual por unos segundos.