Capítulo 8

5.2K 428 211
                                    

Louis deslizó las manos por los hombros aceitados de Harry hasta llegar al cuello, donde se agarró con fuerza. Harry se olvidó de su bonito traje gris con capa a juego, de su peinado de peluquería y también de sus reservas.

Todos sus sentidos estaban puestos en beso de Louis, en su sabor, en su aroma increíble, en lo bien que se sentía abrazando su cuerpo pequeño.

Le hundió los dedos en el pelo, ajeno a todo, para que Louis no dejara de besarlo. Tenía la boca caliente y dulce, y su lengua le rozaba la suya con timidez.

Harry pegó la cadera a la suya, lo puso de puntillas y lo estrechó contra su cuerpo.

Era un hombre tan pequeño y femenino; toda él era suavidad y dulzura. Un hombre que lo dejaba sin aliento, que lo urgía a protegerlo, que lo invitaba a devorarlo.

-Cariño, me estás volviendo loco.

Louis le miró los labios con sus preciosos ojos azules, cargados de deseo.

-Sí...

Harry gimió y volvió a besarlo. No sabía el tiempo que llevaba Louis sin hacerlo, pero él sentía como si llevara años sin hacer el amor, y estaba ya a punto de estallar. Incluso a través de los pantalones del uniforme era consciente del miembro de Louis presionándole la erección, en señal de clara invitación.

Cuando Harry le retiró la capa y la dejó caer a sus pies, Louis no pareció darse cuenta.

Le deslizó la mano por la espalda, sobre la curva de la cadera, y continuó por las nalgas. Harry gimió al sentir el trasero firme y redondeado de Louis.

No se había dado cuenta. En realidad esos abrigos largos no le habían dejado verlo antes. Claro que no le importaba. Lo que menos le apetecía era que ningún tío le mirara el trasero. O alguna otra parte de su cuerpo.

Continuó deslizando la mano hacia abajo hasta que encontró el dobladillo de la camiseta. Entonces empezó a acariciarle los muslos. Cuando tocó cerca a su miembro, Harry estuvo a punto de caer redondo.

-Pícaro... -le murmuró sin dejar de besarle los labios, mientras sus dedos descubrían la piel satinada y desnuda un poco más -. Has venido aquí muy sexy y ni siquiera me lo ibas a mostrar.

Louis se quedó helado, y al momento se apartó de él tan repentinamente que pisó la capa y cayó hacia atrás. Harry intentó agarrarlo, pero no le dio tiempo. Louis estaba en el suelo, muy pálido, y lo miraba horrorizado.

Tenía una mano apoyada en el suelo; con la otra tiraba frenéticamente de su camiseta. Con las rodillas juntas y los pies separados, Harry decidió que tenía un aspecto adorable.

Se arrodilló delante de él, intentando aparentar calma, a pesar de la tensión que sentía.

-¿Qué te pasa, cielo?

Louis retrocedió sin levantarse, y al hacerlo se le subió un poco más la camiseta, dejando al descubierto un trozo de su abdomen marcado. Maldita sea, qué piel tan sedosa tenía. Antes de que pudiera escapársele del todo, Harry la agarró del tobillo izquierdo.

-Espera. Solo quiero saber qué pasa.

Louis empezó a alisarse la americana del traje con preocupación.

-Mi traje. Está todo estropeado.

-Te compraré otro. Yo lo he estropeado.

-No, no has sido tú -dijo Louis con una mueca de asco-. He sido yo, y mi comportamiento.

-Nos hemos besado Louis. No es algo malo; no es como si hubieras matado a alguien.

Abrió mucho los ojos y soltó una exclamación entrecortada.

Fuego y Pasión  ~Larry Stylinson~Место, где живут истории. Откройте их для себя