Prohibido Enamorarse||Jelsa||

Capitulo 23

Narra Elsa:

Ya no estaba en la camioneta. Estábamos en el lugar mas horrible del mundo que nadie nunca soportaría. "La empresa controladora de poderes" que en realidad los quita.

—¡Oye!— dice una voz a mi espalda.— ¿Lo conoces?

Era una niña pelinegra de alrededor de 18 años. Alado de ella estaba Jack.

—Jack...—corrí a donde estaba y pase mis manos por su cara.

—Parece que si. Violeta— se presenta.

—Elsa.

—Y no hace falta el de él, ya me lo se.

—¿Qué haces aquí?

—Me prohibieron salir de la casa sin permiso de mis padres y...mirame ahora.

—Ya veo, yo también rompí las reglas.

—¿Cuál era?

—No enamorarse.

—Ssss, esa si que esta difícil.

—¿Por qué lo dices?

—Porque esa es otra razón por la que estoy aquí.

—Ya veo.

Al parecer aquí a todos ponen diferentes reglas, pero la de enamorarse es misma regla de todos y cada uno.

—¿De qué son tus poderes, eras guardián o normal?—me pregunta.

—Normal e invisibilidad.

—Wow, eso es genial.

—Lose. Pero no se si saldré de aquí.

—¿Por qué?

—Porque la mayoría de los que están aquí los dejan encerrados hasta morir.

—Entonces...ya murió el que tu...

—No, no es eso. No me pusieron un guardián de aquí. Me pusieron al primo de Hans, y el también, pero el esta bien, esta buscándome, lo se.

—¿Y cómo lo sabes?

—Soy también de los capos de energía, y la siento.

—Comprendo.

La verdad no, para que nos dejan aquí, alguien nos puede sacar o hasta incluso podemos salir de aquí y ellos no lo saben.

—¡Elsa!¡Jack!—gritan en la entrada, es Tooth.

—Tooth—digo.

—Tranquila te vamos a sacar de aquí.

—¿Dónde están los demás?

—Estan sacando a los niños— me responde Honey Lemon.

—Tenemos que sacar a los de aquí también. No podemos dejarlos aquí.

—Pero si ni siquiera...

—Los dejan encerrados solamente— la interrumpí.

—Tadashi tu los de la izquierda, Honey tu los de la derecha. Yo voy con Honey. Elsa tu cuida a Jack, nosotros nos encargaremos.

Y si, eso hicieron. Por favor Jack, despierta, por favor.

Observe de nuevo a Jack. Estaba abriendo los ojos. Eso me alegro demasiado.

—¡Jack!

—Elsa,—dice con dificultad, todavía esta débil— ¿dónde estamos?

—En la prisión.

—Tenemos que sacar a todos los que están aquí.

—Tranquilo, en eso estamos. Tienes que...

—Pero la maquina— me interrumpe.

—Ah, eso. ¿Cómo la destruimos?

—Necesitamos a la creadora de ella, a la persona que tuvo la idea. Necesitamos a Tooth.

—La llamare, ¡Tooth!—grito.

—¿Qué paso Els? ¡¡Jack!!

—Tenemos que destruir la máquina, así ya no pasara nada malo.

—Bien, vamos. ¿Quieres venir Jack?

—Claro.

Lo levantamos y lo subimos sus brazos a nuestros hombros. Seguimos caminando. Al parecer no estaba demasiado lejos de la máquina. Vimos correr a muchos niños y por ahí a Rapunzel.

—Punzie, una ayuda no nos va mal.

—¡Corran niños, corran! Voy en un momento Els.

Si, todos estaba ayudando a los niños, adolescentes y hasta padres.

Al fin llegamos a la maquina.

—¿Cómo van con la máquina?

—No tenemos idea de lo que hacemos,—dice Kristoff— aparte, ya llevamos años aquí intentando de todo.

—¡Chicos!—grita Tooth— Subiré a la camilla, bajaran esa palanca, ese es el de la intensidad. Subanla cada 15 segundos hasta llegar al último. Eso servirá para destruir la máquina.

—Pero To...

—Por favor Elsa, si lo hago me buscaran, después me traerán aquí y harán de nuevo la máquina.

—Pero no sabrás quien soy.— una lágrima sale de mis ojos— Y pasará lo mismo de la ves pasada.

—Te prometo que no amiga,— me abraza —jamas te olvidaría.