capítulo 22: nos vemos

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Continuamos avanzando en busca de la segunda prueba.

Paradox: Bryan, la siguiente prueba está a unos 100 metros de aquí.

Bryan: ¿enserio? Ya casi estamos ahí.

Paradox: nosotros llegaremos hasta aquí.

Bryan: ¿enserio? ¿Y eso por qué?

Paradox: porque no tenemos permitido avanzar más. Además, hay que regresar a la aldea.

Bryan: bueno, es una pena, pero si no hay otra opción. Está bien, desde aquí avanzaremos solos.

Paradox: gracias por entender. Toma mi mapa, les servirá más a ustedes.

Bryan: gracias.

Paradox: adiós. Nos vemos en otra ocasión.

Bryan: claro así será. Nos vemos.

Paradox regreso a la aldea junto a los tres centauros que nos acompañaban, Andrés, Aron y yo seguimos adelante.

Aron: que rápido le entro miedo a los centauros jajajajaja

Bryan: yo no me reiría si fuera tú, Aron.

Aron: ¿por qué?

Andrés: ellos deben de saber algo que nosotros no.

Bryan: exacto. Hay que mantenerse alerta.

Aron: ¿bueno cuanta falta para la siguiente prueba?

Bryan: según el mapa está detrás de esos árboles.

Andrés: ¡andando! Tengo muchas ganas de ver que prueba será.

Cruzamos los árboles y había un camino con dos paredes gigantes de roca.

Andrés: ¿Bryan, que será esto?

Bryan: no lo se. Pero debe de haber algo que nos lo diga.

Aron: ¿cómo este cartel?

Bryan: muy bien Aron, di nos que dice.

Aron: dice: "la sabiduría es difícil de alcanzar, al igual que la salida de este laberinto".

Andrés: así que es un laberinto.

Bryan: hay que estar muy atentos.

Aron: deberíamos seguir.

Bryan: claro andando.

Nos adentramos al laberinto, era un laberinto grande, con caminos anchos, se nota a simple vista lo viejo que eran.

Andrés: mis instintos me dicen que algo va a pasar.

Aron: tus instintos son igual de inútiles que tú.

Andrés: ¡¿que dijiste afeminado?!

Bryan: cálmense. Este no es lugar para pelear. Hay que seguir adelante.

Andrés: ¿Bryan, cuanto crees que nos tardaremos en salir?

Bryan: peleando entre nosotros, bastante.

Aron: ¡mierda! Este camino no tiene salida.

Andrés: hay que regresar.

Bryan: esperen. Debe de haber algo que nos indique la salida. Busquen en las paredes alguna pista.

Todos buscamos desesperados por encontrar una pista, pero no tuvimos suerte.

Andrés: no hay nada.

Aron: odio concordar contigo, pero si, aquí no hay nada.

Bryan: tienen razón. Bueno sigamos el camino de la derecha y mantengámonos atentos a cualquier pista.

Seguimos caminando por el laberinto. Siempre eran caminos sin salida. Muchas veces tuvimos que regresar por donde veníamos. Pero no encontrábamos la salida y estábamos muy cansados.

Andrés: yo me sentaré a descansar, si quieren seguir sin mi hagan lo.

Aron: con Gusto.

Bryan: ¿Andrés que es eso detrás de ti?

Andrés: ¿ah? Parece una palanca con grabado sobre ella.

Aron: el grabado dice: "esta palanca alumbrara tu camino.... Pero te pondrá al borde de la muerte"

Andrés: ¿Bryan, la activamos?

Bryan: sí. No hay de otra.

Andrés activo la palanca, las paredes y el suelo comenzaron a temblar, de pronto las paredes comenzaron a moverse y el camino se hacía más angosto.

Todos: ¡¡mierda!!



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