Capitulo 4: ¡Mala hasta las raíces!

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Los miembros del equipo SONAR se han retirado del bosque para buscar alguna anomalía en la isla, mientras los escuadrones de aves sobrevuelan sobre las costas de la isla para entregar las noticias sobre el "ser" que está en la isla y recibir información acerca del mismo.

Desgraciadamente, los únicos que han quedado "plantados" tendrán que arreglárselas como puedan, entre ellos: "El Pignon V.", nombre entregado por uno del escuadrón "V", quien le entregó la primera letra que empezaba con "V" (osea, "V", valga la "hiper redundancia"); también está Rosalia, quien quedó muda por el temblor; el resto del bosque, igual que el anterior [admito que como narrador, también me puedo cansar, incluso cuando solo narra cuando usted narra; en pocas palabras, de seguro usted se cansa como narrador como yo me canso de narrar o de hacer un comentario como este de una manera exageradamente larga... Volvamos al texto, ya descansé (o descansamos)].

Así que como todo el bosque quedó totalmente quieto y "plantado", Pignon V. está demasiado incómodo sabiendo de que quiere decir algo pero no tendrá respuesta, y los demás hongos y Rosalia con ganas de decir algo pero ni ideas para hablar nuevamente. Mientras que en los subterráneos, Purpura comienza a ver seres muy extraños y misteriosos bajo el suelo, desde las "megaorganizadas" hormigas hasta la fuente de conocimiento subterráneo que supera incluso a los topos, van hacia los que conocen el corazón de la isla. Solo ellos pueden conocer todo lo que ocurre tanto dentro como por fuera de la isla, solo estas criaturas horrendas y nauseabundas, con un afán de comer todo ser que "fué" vivo... "Los gusanos".

Al entrar a los dominios de estas criaturas, ni el topo Gutiérrez pudo disimular el asco por el olor a humedad y muerto. Pero Purpura debía conocer al ser que causaba estos problemas y encontrarlo, por eso se contuvo unos segundos y consulta.

¡Buenas tardes!...

Aquí el tiempo no vale ni cuenta...- interrumpe uno de ellos
Sabemos que haces aquí, sino fuese por eso, no vendrías ante nosotros y nosotras...- sigue otro (u otra, ni siquiera yo lo se, son muchos... y muchas).

Entonces, ¿a quien estamos siguiendo?- pregunta Purpura

Todos los gusanos se retorcieron, algunos retrocedieron y se espantaban unos a otros como enloquecidos, solo se escuchaban algunos ecos y aullidos.

El mal...

...La destrucción...

...Nuestra muerte...



... No lo estas buscando, está buscándote y a todos los seres vivos- se detuvo uno de los gusanos.

... No tiene nombre, no es de esta isla... solo sabemos que comenzó como una semilla- decía otra.

... los pájaros, hambrientos, torpes, siempre buscando tierras nuevas- decía una lombriz.

... uno trajo el mal en sus patas, no se dio cuenta del lío que nos dejó- continua un gusano anillado.

(...)

Se han callado todos, Púrpura no sabe por qué, pero el topo Gutiérrez si

¿Díganme, que sucede?- dice Purpura muy preocupada

No es posible...

Nadie puede ser tan rápido.. o rápida...

No, no es eso...

Imposible...

¡El mal es enorme, moriremos todos!- grita una

¡Es imposible... pero debes matar al ser o matará toda la isla!- gritó el último gusano al escapar

De un momento a otro, de los susurros a gritos, de un sitio infestado de estos seres extraños a un sitio vacío con dos excepciones, quienes con mas preguntas que respuestas deben escapar del sitio.

¡Bueno, sabemos que la cosa será fea, y ya estoy sintiendo el temblor que deja a su paso!, ¡sígueme!- advierte topo Gutiérrez

¡Bien, pero esperameeee!- grita Púrpura corriendo lo que mas puede en los tuneles

Todo el sitio comienza a temblar, pero Púrpura comienza a ver que entre las piedras y tierra que caían del túnel salían raíces... Lo malo, es que no puede quedarse a investigar, todo se comienza a derrumbar.



Ya en la salida del túnel, ve un enfrentamiento: Hongos contra "el ser"... Mas bien era una criatura muy enorme, con hojas moradas y dentadas (de forma, pues no tienen dientes... solo "metafóricamente"); espinas con formas de gancho, muy gruesas y de color oscuro como sus ramas. Todo este ser destructivo amenazaba en el bosque, las aves que lograron regresar tras entregar las noticias trataban de atacarle, pero sus espinas amenazaban con matarles o causar mucho dolor.
Y los que daban lucha eran: hormigas, tratando de cortar sus hojas; los hongos disparando todas sus esporas con esperanza de surtir efecto; Rosalia con su rama evitando que se acerque "el ser". Pero los arboles poco y nada lograban hacer en esa pelea, ya que rápidamente eran envueltos.

¡Alto!, ¡deja a todos en paz o te la verás conmigo!- Ordena Púrpura volviendo a su tamaño normal

Luego, el ser empieza a tomar su forma al ver que ella le ha gritado.

¡Te atreves a darme ordenes HADA!- grita el ser al final... eso y mostrando todas sus zarzas al cielo.

¡Soy quien controla la isla niña entrometida!, ¡soy la fuerza mas destructora que ha visto la luz del dia!, ¡soy quien controla la fuerza y energía de la isla!... Soy...  Zarzamora... "La eterna"- finaliza mostrando sus frutos y espinas en señal de fuerza.

Púrpura no puede creer que este ser se haya escondido de sus narices con ese tamaño, y aún si intentase detenerle, esas espinas y a los demás seres que tiene como rehenes puede jugarle en contra.

¡Dejalos en paz! o...

¡¿¿O quéeee??!!- se burla Zarzamora interrumpiendo a Púrpura

Si no me dejas en paz, tus amigos serán pronto nutrientes para mí, y ARGH!!!- se queja Zarzamora

Pignon V. había clavado una piedra en una de sus zarzas y Rosalia hizo lo mismo con la rama, aunque a la zarza tenía suficiente fuerza, hubo otra cosa que le amenazaba: ¡El equipo aéreo venía con piedras para contraatacarle!. Todos los escuadrones aéreos comenzaban a tirar piedras sobre Zarzamora mientras los del equipo SONAR les indicaban las zarzas mas débiles para liberar a los rehenes.

¡Malditos!, Malditos todos ustedes aéreos... Pero pronto no podrán contra mí, ustedes morirán de hambre mientras yo me hago mas fuerte - Sentenció Zarzamora al escapar bajo el suelo

Nadie quedó indiferente a esa amenaza, y mucho menos al terremoto que dejó al marcharse

"Morirán de hambre mientras yo me hago mas fuerte"...- se repetía Púrpura en la cabeza.

Señorita Púrpura, hay problemas en el prado..- dice una de las lombrices

Pero aún queda algo rondando en su mente, aún algo no calza del todo...  

Isla DescansoWhere stories live. Discover now