MOTIVOS PARA ODIARTE [TERMINADA]

25 P A R T E I

 

Este capitulo lo dedicó, poniendo en él todo mi corazón, a todos aquellos que se han percatado del amor que sienten por alguien, cuando ése alguien se encuentra en peligro.

...Amen y demuestren cuanto aman siempre

-¿Puedo pasar?- preguntó Oscar asomando su cabeza calva a través de la puerta de la sala de recuperación en la que me encontraba.

Ha pasado exactamente media hora desde que, al sentir como se desprendía algo dentro de mi, y de como mi puntiaguda barriga se desvanecía, mire al reloj de la sala de partos y marcaba las once y media de la mañana. Mi nueva hora favorita. La hora en la que le permití a mi hija ver la luz de este mundo.

No me permitieron verla, o mejor dicho, no me permití verla porque a causa de tanto esfuerzo, perdí mis fuerzas y sentí lentamente como se me iba la vista mientras me desmayaba. Después de eso desperté en este pequeño espacio donde hace un rato, una enfermera que chequeaba la intravenosa de mi brazo, me dijo que estaba en proceso de recuperación y que posterior a esto iba ser dada de alta.

-Claro, adelante- le respondí a mi médico al cual le estaría profundamente agradecida por venir a verme.- No me imagine que te aguantaras el viaje.

-¿Y perderme el parto de mi paciente favorita? No no..eso no lo iba a permitir.-respondió sonriendo, dándome sus acostumbrados besos en ambas mejillas.- ¡Todo a salido muy bien! Ya me cerciore de todo.- sonreía ampliamente sin darse cuenta el grado de tranquilidad que me sembraba.

-Así escuché. Solo que aún no me la traen y ya me comienzo a desesperar.- dije mirando de nuevo el reloj y la puerta que nadie tocaba.

-Con respecto a eso Aurora..-comenzó a decir rascando su calva- quise entrar yo primero  para poder explicarte..

-¡Hay no! Lo sabia, algo debió salir mal.- interrumpi mortificada. Estaba segura que algo andaba mal, de no ser así me hubiese despertado con Alma a mi lado.- Dime Oscar, ¿Ella esta bien?

-Si, esta muy muy bien. Te lo puedo garantizar. El detalle es que no es ella.

-No te entiendo. ¿Ha que te refieres?

-Dulce Aurora,- dijo después de un largo suspiro. Pero no de resignación,mas bien de sinceridad.- Me equivoqué. Creo que al final, tu amigo Pitter estuvo en lo correcto todo el tiempo. Confundí los labios de una vulva con lo que realmente eran sus testículos. ¡Tuviste un hermoso varón!

-¿No?- pregunté sorprendida. Deliberadamente sorprendida. Me lleve ambas manos al rostro y comencé a enjuagarlo en medio de mis prontas lágrimas. Eso si,no podía creerlo- ¿Como no te diste cuenta Oscar?

-Lo siento, de verdad es la primera vez en tantos años que me sucede algo como esto. -decía apenado, podía verlo a través de su expresión y de su mirada.- Intento saber como me paso, y creo que es por la posición en la que estuvo Aurora

-Descuida Oscar- dije, permitiéndolo abrazarme.- Lo único que me importa es que esta muy bien. El amor siempre sera el mismo. ¡Ahora traelo ya!..estoy muriendo por verlo.

Mi corazón dio un enorme vuelco experimentando esa sensación que aparece cuando ocurre algo inesperado, pero no malo. Lo que sucede muy rara vez.