11. Alcohol

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La semana de exámenes estuvo bastante pesada según el criterio de LuHan pese a que todavía era el primer parcial antes de los exámenes finales del semestre, por ello una vez que terminaron LuHan se sintió bastante más aliviado y con un mejor humor. El peliplatinado debe decir que en esa semana estuvo un tanto frustrado con todo y tuvo que pedir momentos a solas sobre todo a SeHun y sin embargo a diferencia de lo que creyó, SeHun respetó su petición y le dejó el tiempo que necesitaba.

Hablaron por teléfono unas cuantas veces luego de la escuela cuando no se veían, SeHun le contó a LuHan el bombardeo de preguntas que recibió por parte de BaekHyun pero sobre todo de ChanYeol de cómo fue que ellos terminaron enrollándose y también le contó que había hablado con JongIn y este le cantó la misma cantaleta de siempre sin embargo que le había pedido que se detuviera. Al parecer no llegaron a los golpes y terminaron 'la charla' en buenos términos, no llegó a más detalles y tampoco le contó mucho al respecto y sin embargo LuHan ya se había percatado del distanciamiento de JongIn al grupo y por supuesto que no le agradaba aquello aunque tampoco sabía qué hacer con eso. No sabía si quería enfrentarse a JongIn o decirle a SeHun que volviese a hablar con él. Las dos ideas le parecían terribles.

Una vez finalizaron sus exámenes, LuHan enseguida recibió las visitas de SeHun a su casa y una invitación a una nueva fiesta a la cual por supuesto asistirían porque sería como la celebración para todos por haber finalizado los exámenes aunque ni siquiera aún sabían los resultados de ellos.

Las charlas que ahora compartía con SeHun eran espontaneas, salían de la nada y era un lapso en el que sobresalían cosas a flote que no conocían del otro para saber más del contrario. Pese a la apariencia de SeHun en el instituto, él se trataba de un chico bastante juguetón y carismático, a LuHan le gustaba bastante, tal vez por eso entendía que terminó queriéndolo de la manera en la que lo hacía.

Esa tarde se reunieron sólo ellos en la casa del mayor. Su relación con el grupo no había cambiado tanto pero obviamente ahora ellos dos saliendo de manera amorosa era un cambio en el grupo, uno que destacaba entre ellos, no obstante no se habían distanciado o algo por el estilo de los demás, sino que a veces los momentos de únicamente ellos dos eran necesarios.

LuHan intentó seguir ese juego de póker que SeHun le había enseñado hace apenas unos minutos atrás. Resulta que el mayor es amante de los juegos de azar y lo que más se le daba eran las cartas, al menor en realidad no le llamaba mucho la atención el juego pero después de todo SeHun era algo así como su novio y le encantaba descubrir sus gustos y verlo desenvolverse en ellos. Ambos estaban sentados en forma de indio en la cama del mayor frente al otro con el suficiente espacio entre ellos, SeHun se fumaba un cigarrillo de forma casi distraída mientras LuHan utilizaba toda su concentración en el juego.

En el juego, SeHun era bastante bueno en sus movimientos, utilizaba muy bien su inteligencia según LuHan, además era bueno al barajar y hábil con ello y eso le da un toque de seriedad y madurez hasta cierto punto. LuHan miró sus cartas por última vez con una sonrisa esplendida y le mostró luego su juego con confianza a SeHun, el mayor luego de mirar la jugada de LuHan, miró al menor formando una sonrisa ladina que le adelantó el resultado a LuHan. Cuando el mayor mostró su jugada, LuHan bufó frustrado de sólo perder.

Su humilde póker había sido vencido por la espléndida flor imperial de SeHun.

—Ahora me toca cobrar mi premio —. Le dijo SeHun luego de inhalar algo de tabaco y sacando el humo al hablar —Dame el dinero bebé —LuHan refunfuñó y le paso las monedas y billetes que apostó, SeHun lo tomó y luego sonrió.

—A este paso me quedaré pobre

—Te propongo un trato.

— ¡Ya no quiero jugar!

Contraste「HH」Where stories live. Discover now