Cuenta una vieja leyenda que en la casa de un hombre rico y famoso vivía una gata que era muy bella, Tenía un pelaje muy bonito y adornaban su cuello lindos lazos de colores.
Tenía largos bigotes, unos colmillos muy blancos y unos hermosos ojos como el mar en un día de verano.
Aquel hombre quería mucho a la gata porque era muy cariñosa y se acurrucaba junto a él para dormir.
Caminaba junto a el cuando paseaba y por eso le hablaba con frecuencia.
Ojala fueses una bella doncella repetía aquel hombre mientras acariciaba la cabeza de su gatita.
miauuu miauuu le contestaba la cariñosa gata mirando le con sus hermosos ojos.
-Si ya lo se eres solo una gata- le decía él muy triste por no tener a nadie tan cariñoso como la gata.
Y cada día la quería más hasta que decidió hacerle su petición a la Diosa de la belleza que era VENUS y le dijo
-señora si convertís esta gata en mujer te daré muchos regalos y espero que ésta le escuchara.
Y la Diosa la escucho y convirtió a la gata en una hermosa muchacha y además era simpática y amorosa y decidieron casarse y dijeron que se casarían y prepararon la gran boda donde le tocarían campanas y la bella muchacha se vistió con un hermoso vestido con velo y estaba todo listo para iniciar la ceremonia cuando la Diosa VENUS hizo que un ratoncillo pase por donde estaban los novios a esos que le gustan a los gatos.
Al inicio nadie lo vio pero luego todos se fueron y algunos se subieron as las sillas y otros se escondieron tras un armario.
Sin embargo la muchacha dio un salto y fue tras el ratón y todos se dieron cuenta que aunque era una hermosa muchacha su corazón seguía siendo de una gata.
Dice la leyenda que el novio paso tanta verguenza que le pidió a la Diosa VENUS que la convirtiera nuevamente en gata.
Y así lo hizo VENUS y aquel hombre comprendiendo su error, con el tiempo encontró una buena muchacha con la que se caso y vivió muchos años feliz cuidando los 2 a su querida gatita.
