Mi pesadilla favorita (Aguslina) [Pausada]

13.- «Lo prometo»

Se alejo de mi con una sonrisa triunfante, pero mi cara seguir inundada en lagrimas. Salió del cuarto y me dejo aun en la silla, no podía hacer nada más que llorar ¿Por que a mi? Soy una estupida, tuve que haber escuchado a Agus y a las chicas cuando me dijeron que Juan era raro, que ocultaba algo, creía que lo conocía pero efectivamente me equivoque. No puedo creer que este haciendo esto.

—Agus...— sorbi mi nariz —No sabes cuanto te necesito— me susurre a mi misma con la voz entrecortada

Tenia mis muñecas lastimadas al igual que mis tobillos gracias a las cuerdas que los amarraban fuertemente. Llore hasta cansarme y hasta creo que se acabaron las lagrimas, me quede dormida en la silla.

(...)

Desperte de susto dando un brinco a causa de que Juan abrió la puerta de golpe fuertemente.

—Tengo que salir— dijo entrando a la pieza y buscando algo entre los cajones.

—¿Ah donde?— pregunte.

—¡No te importa!— grito provocando que sobresaltara de miedo y que volviera a llorar —Solo quédate quieta y no hagas nada— saco una billetera de un cajón y empezó a salir del cuarto —Aunque no creo que puedas hacer mucho— dijo sarcástico y se retiro dejándome completamente sola en la casa.

Pude escuchar como bajaba las escaleras saltando, salía de la casa y finalmente escuche su auto arrancando.

No puedo quedarme así, tengo que salir de acá. Empece a mirar por todo el cuarto buscando que me podía servir para escapar, cuando veo encima de una mesa de noche esta mi cartera, podía tomar mi teléfono y llamar a alguien.

Como pude empece a arrastrar la silla hasta dicha mesa la cual no estaba tan lejos y llegue lo antes que pude, me puse de espaldas a esta y con mis manos empece a rastrear por todas partes de la cartera mi celular, cuando por fin lo encontré lo tire al suelo, me quite un tacón y con mi pie puse el teléfono frente mío, lo desbloquee con mi pie y marque a la persona que mas necesitaba en este momento y sabia que estaría dispuesta a ayudarme.

Pov Agustin

Con Julian y Maxi estamos sentados en el sofa de mi casa haciendo nada, solo los invite para no estar tan solo y para chalar, necesitaba distraerme.

—Che Agus ¿Seguís mal con Caro?— pregunto Maxi de la nada.

—Si, la verdad que no me quiere ver ni en pintura. Ayer me llamó y me dijo cosas horribles, aunque todo es mi culpa, no debí reaccionar así en el restaurante. Creanme, Juan no es bueno— conteste. A ellos ya les había contado todo lo que paso entre Caro y yo

—Si lo sabemos, ese pibe es muy raro– hablo Julian.

—Temo que le pueda hacer algo a Caro, la quiero mucho y no me perdonaría si algo malo le pasara— dije nostálgico.

—Las cosas con Ori... tampoco van tan bien que digamos— agrego Julian.

—¿En serio? ¿Que paso?— pregunto nuevamente Maxi

—Ultimamente estuvimos peleándonos por bobadas pero... la situación es mas seria de lo que creí— dijo algo triste.

—Lo siento hermano— palmee su espalda.

—Por eso yo estoy soltero— dijo Maxi mientras ponía sus manos en su nuca —No sufro y soy feliz— Juli y yo reímos. Mi teléfono comenzó a sonar indicando que me estaban llamando.

—Y hablando de Carolina— dijo Julian mostrándome la pantalla de mi celular el cual indicaba una llamada de Caro.

—¿Posta?— le arrebate el teléfono para contestar.